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VIII. ¨COMO Y POR QVE SURGIO LA "CUESTION SURESLAVA"
DENTRO DE AUSTRIA-HUNGRIA?
2. La constitución dualista - desafío a la mayoría estava de Austria-Hungría
La concepción imperial no permitió que Francisco José I, liquidada
la revolución húngara de 1848, satisficiera las aspiraciones
del austroeslavismo. Según una frase irónica, que los húngaros
gustaban repetir, Francisco José en 1849, al implantar el absolutismo,
premió a los pueblos eslavos por la ayuda prestada contra los
húngaros, con lo que castigó a los rebeldes magyares. Ni en 1859,
tras la derrota en Solferino, cuando fue abolido el centralismo
y el absolutismo, el emperador quiso introducir un verdadero
federalismo, y por último en 1867 tras el revés de Sadowa, accedió
a la división real de la Monarquía en la parte austríaca y la
húngara, sólo para poder seguir gobernando en la parte austríaca
como emperador, pero ya no de los pueblos libres, sino sobre
las "tierras" (Lander) del imperio austríaco, pálida sombra y
reflejo marchito del ex imperio germano-romano. El antiguo reino
de Bohemia llegó a ser una provincia del Imperio austríaco igual
que Dalmacia, cuna del reino de Croacia.
La posición inferior en que se encontraron los pueblos eslavos
dentro de la doble Monarquía no se debe sólo a la oposición de
Francisco José I al principio de la soberanía nacional, incompatible
con la concepción del imperio fundado en el principio de la legitimidad
dinástica, sino también a una apreciación harto errónea del
movimiento
de solidaridad eslava.
Tratando a los súbditos eslavos hasta entonces leales a los Habsburgo
como políticamente inseguros, los círculos oficiales de Austria-Hungría,
sin quererlo, favorecieron la orientación de esos pueblos hacia
las tendencias centrifugas. Al no distinguir entre los eslavos
de tradición occidental y los de la bizantina tampoco pudieron
afrontar acertadamente la llamada cuestión sureslava, creada
por ellos mismos cuando insistieron en la división de las provincias
croatas, repartidas entre la mitad austríaca y la húngara de
la Monarquía, y estimulando la propaganda nacionalista serbia,
especialmente tras la ocupación de Bosnia y Hercegovina contra
la oposición croata, leal en el fondo. De esta manera, la cuestión
de Bosnia llegó a ser parte integrante de la llamada Cuestión
de los eslavos del sur, sin solución dentro del dualismo.
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