STUDIA CROATICA
Año XXV – Junio
1984 - Vol. 92-93
Dr. Francisco Nevistić - In Memoriam
Crisis de la sociedad de consumo época del prometeismo
general
El imperio marxista de fuerza frente a la fuerza de la
justicia
Srećko Karaman — El Poeta y el Mar —
Marx y Engels acerca de los croatas
Sabio croata Juan Benigar - "El Cacique Blanco"
de los indios mapuches
Monseñor Quijote, de Graham Greene, visto por el escritor
croata G. Raspudić
La belleza al alcance de todos
Declaración de paz en Medjugorje
Tres documentos acerca de Bleiburg que dicen todo y
reclaman investigacion
Declaración del 5to Congreso del Consejo Nacional Croata
Ecos del libro "Croacia y su Destino"
J. Botić y S. Djureković: "Yugoslavia in
Crisis"
K.
Jončić: "The Nationalities in Yugoslavia"
Los Balcanes, olla infernal de Europa
Acerca del futuro de Yugoslavia
A propósito de la ópera "Ero El Pícaro", de
Jakov Gotovac
Ivo Rojnica: "Susreti i doživljaji - Razdoblje od
1938 do 1975. u mojim sjećanjima"
Kvirin Vasilj: "Razonamientos sobre la Religión"
El 13 de junio
del año en curso, luego de una breve y grave enfermedad, falleció en Buenos
Aires el Dr. Francisco –Franjo– Nevistić, director de la revista Studia
Croatica y socio del Instituto Croata Latinoamericano de Cultura.
Francisco
Nevistić nació el 2 de julio de 1913 en Šuica, cerca de la histórica
localidad de Duvno, en la provincia croata de Bosnia, que en aquel entonces,
junto con Herzegovina, era administrada por Austro-Hungría en virtud del
mandato del Congreso de Berlín de 1878 y de la posterior anexión a la Monarquía
en 1908. Sus estudios primarios los cursa en su localidad natal y los secundarios
en el colegio de orientación clásica de los padres franciscanos en Široki
Brijeg. Durante sus estudios como alumno secundario despertó justificadas
esperanzas en sus profesores de que iba a abrazar la carrera religiosa y
posteriormente la docente. Sin embargo, después del bachillerato, se decide por
la vida laica y se inscribe en la Facultad de derecho en la Universidad de
Zagreb, dedicándose especialmente al estudio de la filosofía de historia y de
derecho. Durante su vida estudiantil participa en las luchas de la juventud
universitaria croata por el derecho de autodeterminación del pueblo croata,
denegado al mismo desde la fundación del Estado común de servios, croatas y
eslovenos en 1918. En 1940 se recibe en la Facultad de derecho con el título de
doctor en Leyes e inicia la carrera de abogacía en un estudio jurídico de
Zagreb.
Durante la
Segunda Guerra Mundial, establecido el Estado Inde-pendiente de Croacia en
1941, primero presta servicios en el Ministerio de Justicia y Culto,
trasladándose luego a Roma y Viena donde cursa estudios de postgrado y rinde
exámenes del Derecho constitucional, filosofía de Derecho y Derecho
corporativo. De vuelta a Zagreb, fue nombrado profesor suplente en la Facultad
de Derecho para la cátedra de Filosofía de Derecho, cumpliendo al mismo tiempo
otras funciones, como ser en la organización estudiantil universitaria y en la
dirección del periódico quincenal de los intelectuales nacionalistas croatas Spremnost,
en 1944 y 1945, donde escribe varios artículos sobre los temas de su
especialidad. En esa época publicó una extensa disertación sobre el tema:
"El concepto de derecho dentro de la filosofía de B. Croce".
El desafortunado
desenlace de la Segunda Guerra Mundial para la nación croata con la
consiguiente ocupación comunista de Croacia, obligó a Nevistić, al igual
que a muchos otros intelectuales croatas, a abandonar la patria y a refugiarse
primero en Austria (1945) y luego en Roma (1946). Aquí, y en nuevas
circunstancias políticas e ideológicas, se dedica al profundo estudio de la
democracia como única alternativa al fascismo y comunismo, siendo resultado de
este estudio su libro en el idioma croata, Temelji demokracije - kriza i
obnova (Los fundamentos de la democracia - crisis y renovación), editado en
1971 en Roma.
Llegado a la
Argentina en 1947 se dedica, junto con el prof. Vinko Nikolić, a la
actividad periodística, publicando en 1948 el periódico mensual Croacia
y en 1949 el compendio político-cultural Hrvatska (Croacia). Poco
después comienza su colaboración en el semanario Danica (The Morning Star)
de los padres franciscanos de Chicago, como editorialista y comentarista
principal, abordando temas de política internacional y nacional, de sociologia,
filósoffa, cultura y economía. Esta actividad periodística se prolongó por
espacio de más de veinticinco años. Al mismo tiempo fue colaborador de Hrvatska
Revija (Ia Revista Croata), Buenos Aires (luego Barcelona), desde 1951.
En 1960 se
adhiere al Instituto Croata Latinoamericano de Cultura en Buenos Aires,
que patrocina la revista Studia Croatica, colaborando en ella hasta 1968
y dirigiéndola desde este año hasta su muerte. Con la dirección de la revista Studia
Croatica asume la presidencia del Instituto, la que abandona debido a la
enfermedad de Ia vista, en 1983. En el curso de su dirección de la revista S.C.
ha escrito todos los artículos de fondo y la mayoría de notas y comentarios. En
ocasión de la supresión de la "Primavera croata" por parte del
mariscal Tito en 1971, escribió un ensayo enjundioso Croacia y la actual crisis
de Yugoslavia (algunas opiniones de la prensa mundial). En 1977 ha
redactado la mayor parte del compendio ilustrado Croacia y su destino,
ambos títulos publicados como ediciones especiales de la revista Studia
Croatica.
El extinto Dr.
Francisco Nevistić fue miembro, vicepresidente y secretario del Club
Cultural Croata-Argentino, como así también de otras instituciones croatas
políticas, culturales y benéficas.
Buen orador y conferencista, excelente escritor y periodista, profundo pensador y creyente, el Dr. Nevistić deja huellas imborrables en la vida política y cultural de los croatas radicados tanto en la Argentina como en el mundo entero. Sus firmes convicciones políticas, sociales y morales las defendía con valentía y tenacidad. Era hombre de principios e ideas.
Su deceso
representa una pérdida irreparable para la comunidad croata en el mundo. ¡Que
descanse en paz!
Franjo
Nevistić
MAX
SCHELLER, filósofo alemán, si no nos traiciona la memoria, escribió una vez,
que el hombre es un "eterno protestante". Por cierto no se trata del
protestantismo ligado ai luteranismo de cierta época histórica y en una
personalidad descollante como lo fue M. Luther. El hombre protestante aqui hay
que tomarlo en el sentido general. El protestar es una de Ias características
salientes del hombre; característica casi inamovible.
La época actual
nos ofrece ejemplos en tal sentido tuera de toda duda o la discusión. Corea del
Norte contra la del Sur y viceversa, Vietnam contra la China comunista, Camboya
contra Vietnam; el tercer mundo contra el mundo del hemisferio norte; Nicaragua
y Salvador contra Honduras y los Estados Unidos, Cuba contra todo el sistema
vigente en Hispanoamérica; los partidos comunistas contra los de la burguesia
y, a su vez, ésta contra todo el movimiento izquierdista. En una palabra: el
hombre está descontento. El protesta e, incluso, con armas en mano mata a su
prójimo del que nos hablan tan maravillosamente los Evangelios. ¿Y la causa de estas
rebeliones?
Según nos informa
Arturo Uslar Pietri en "La Prensa" del 24 de abril ppdo., Isaac J.
Pardo reduce este prometeismo general a la vigencia de la utopia. Este autor
venezolano ha dedicado toda una vida al estudio de la utopia, comenzando con Hesiodo,
quien canta la Edad de Oro, "cuando los hombres vivían como dioses... No
conocían el trabajo, ni el dolor, ni la cruel vejez... Poseían todos los
bienes".
Recuperar de
nuevo la "Edad de Oro" como si fuera inextinguible deseo de todos.
Reproducimos una
opinión más que está avalando este sueño de la Edad de Oro; si bien dentro de
unos límites más estrechos y en confrontación con la Biblia. Esta nos dice, sin
vacilaciones: comerás tu pan con el sudor de tu frente, mientras Trlstán
Bernard, según Raymond Ruyer, quiere convencernos que el hombre no está para el
trabajo. Entre el hombre de trabajo (homo laborans) y el hombre despreocupado
(homo ludens) todos, absolutamente todos somos partidarios dei hombre, visto en
la utopía de la Edad de Oro: "no conocer el trabajo y poseer todos los
bienes".
Lo malo está en
el hecho que la opinión de la Biblia prevalece sobre el sueño utópico. Toda la
historia humana lo confirma de sobra. Son inimaginables los esfuerzos,
sacrificios, sufrimientos y desilusiones al mismo tlempo que venia
experimentando el hombre a través de su historia. Las quejas, las protestas y
las rebeliones, si bien a veces, habían tenido éxitos parciales, el problema
queda sin solución. Todos tenemos que trabajar. Bajo el peso de esta realidad
nunca se apagó el deseo de no trabajar "y poseer todos los bienes".
De aquí un "nuevo impulso" de la división entre los hombres y la
sociedad en general. No todos tienen el mismo éxito en conseguir bienes y
liberarse del trabajo. Si uno no puede liberarse del mismo, por lo menos
"elegir" el más agradable.[1]
En esta dura
necesidad que es la actividad económica y la economía en general se han formado
profesiones, donde el trabajo —el juego político o cultural— se reputa creador
y que ennoblece, y las profesiones de obreros Ias que producen. Según Ruyer, en
el pasado esta división se realizaba más o menos en forma velada, dando a la
sociedad un carácter de nobleza ideológica de otro tinte. Recién el siglo XIX
se ha revelado en su desnudez puramente económica y, en lugar de un Leviatán
político de Hobbs, se elevó un Leviatán económico con sus grandes y múltiples
empresas industriales que parecen inexorables. "La rebelión contra la
economía ha tomado la forma de una rebelión contra la sociedad económica,
contra el capitalismo —liberal o estatal— la tecnocracia, la "sociedad de
consumo" (...), dice Ruyer textualmente.
Nosotros hemos
dado al presente artículo justamente el título "crisis de la sociedad de
consumo". Pero este término, como muchos en boga, está poco claro. Si no
se lo determina con mayor precisión, resultaría todavía más incomprensible lo
que queríamos decir. ¿Qué es pues la sociedad de consumo?
R. Ruyer la
elogia, pero no sin observaciones negativas; George Hourdin la critica, pero no
sin el reconocimiento de lo positivo.[2]
Según este último
autor, se trata de una fase, la última hasta ahora, de la sociedad industrial,
capitalista y liberal. Sin omitir alusiones al desarrollo anterior en otros
países, el autor se detiene con mucha atención en el caso francés que conoce
mejor, tratándose de su pueblo, de la experiencia del mismo pueblo y del autor
que la presencia en la actualidad.
El mundo
occidental, rompiendo con la vida patriarcal-agrícola, gracias al adelanto de
su ciencia y técnica, substituye esa sociedad medieval por la sociedad
industrial. El proceso del traspaso tiene varios períodos. En el comienzo se
halla el ahorro, luego la inversión y por fin la producción y el consumo. De
ahí también el término "petit bourgeois" —el pequeño burgués—, ya que
casi todo el mundo ahorraba, para mejorar las condiciones de vida. Una vez
acumulado el dinero, se lo invertía en empresas industriales, liberando al hombre
de la casi total dependencia de la naturaleza, asegurándole el bienestar
individual, familiar y nacional.
Pero, como
siempre, el sistema empieza a degenerar. En el período de producción empieza a
erigirse la idea de ia producción ilimitada. No más para Ias necesidades
primarias —hogar, alimentos, vestimenta, etc.—, sino también de necesidades
secundarias, lujo de toda clase. Este es precisamente el traspaso, el franquear
el umbral de una sociedad de consumo. Mientras con anterioridad se aceptaba la
idea de la soberanía del consumidor —demanda y oferta— ahora los términos se
invierten. "El problema no es ya el saber cómo obtener una producción
suficiente, sino el de consumo". (...) "Es necesario, por lo tanto,
obligar al ciudadano medio a comprar cada día más. Se pone en marcha todo un
sistema sutil e inteligente para lograr el resultado que justifique el aumento
continuo del producto nacional por cabeza. La sociedad de consumo se ha
constituido definitivamente".
En síntesis, se
trata de un sistema económico que empieza con el ahorro, continúa con
inversiones, la producción, la superproducción y el consumo masivo. ¿Qué maio
puede haber en esto? ¿No es el objetivo de la economía liberar al hombre de las
necesidades más elementales y proporcionarle un acopio de bienes cada vez mayor
para liberarle de todas necesidades y dependencias, tanto individuales como de
aquellas provenientes de la forma e índole de la organización social?
Sí, lo es fuera
de toda duda, pero ¿concuerda la realidad con el proyecto? Aquí está la raíz de
la actual crisis de la sociedad de consumo. En vez de liberarse, el hombre está
alienado como nunca en su historia. Se ha convertido en un robot.[3]
¡Qué tremenda
discordancia entre este justificativo y la realidad efectiva! "...
quinientas o seiscientas empresas detentan en un país como Estados Unidos de
Norteamérica, la dirección efectiva de ia economía. No se contentan con
producir la mitad de los bienes y de los servicios. Dirigen los mercados... el
molde clásico se ha invertido. En adelante la oferta va a determinar la
demanda".[4]
Esto es la época
de los "managers". Y en cuanto a su poder y política de liberación,
oigamos que dicen dos norteamericanos "En el proceso de crear un mundo
nuevo, deciden 'managers' de las empresas GM, IBM, Pepsico, General Electric,
Pfizer, Shell, Volkswagen, Excon y un par de centenares de firmas más, de un
día al otro imponen decisiones de mayor envergadura e importancia que la
mayoría de los gobiernos soberanos - si se trata acerca en donde los hombres se
alojan, si los mismos trabajan (si trabajan), lo qué comen, beben y lo que van
a vestir; acerca de qué clase de escuelas o universidades hay que alentar y qué
clase de la sociedad sus hijos van a heredar".[5]
El francés
Hourdin agrega: "Deciden, entonces, soberanamente los productos que es
necesario largar al mercado y los que es necesario comprar. Apelan, cuando han
establecido su plan de ventas, la campaña de publicidad obsesiva con respecto
al público. Organizan enseguida la venta a crédito que permite a cada uno
comprar —momentáneamente— más allá del salario que recibe".[6]
Así el hombre en
vez de liberarse, se aliena por completo. Desde tempranas horas de mañana hasta
Ias horas tardías de la noche corre detrás de lo que le fue proclamado y dado
como liberación. De aquí también el empleo masivo de las mujeres, que abandonan
a sus hogares y a sus hijos, lo que se considera una revolución profunda y
radical de la sociedad actual. Silenciosa, pero no menos dirigida, contra los
fundamentos mismos de dicha sociedad.
Esta sociedad de
consumo tiene sus repercusiones especialmente perniciosas en Ias relaciones
internacionales. Las ingentes deudas del mundo en desarrollo que alcanzan sumas
de alrededor de 600.000 millones de dólares, sobrepasa toda la posibilidad de
devolverlos a la banca internacional con la sede principal en los Estados
Unidos. El mismo gobierno de este Estado, considerado el más fuerte del mundo
entero, tiene sus propias deudas, cuyo déficit presupuestario llega anualmente
a la suma de entre 150-200 mil millones de dólares.
El circuito de
esta manera queda casi cerrado. La sociedad de consumo y el Estado más liberal
ya no tienen a quien vender sus productos. Parece llegar a su fin el dictado de
soberania de ia producción, de las mercancias acumuladas. Estamos en el margen
de tolerancia, dicen casi al unísono los pueblos y los gobiernos del tercer
mundo. O nos dan condiciones de pago más favorables o cesaremos de pagar deudas
ya contraídas. En lugar de salir al encuentro a esta posición la banca
Internacional aumenta intereses y con eso provoca la inflación tanto interna
como internacional.
Raúl Prebisch,
buen experto en esta materia acota: "El sistema se encuentra ante una
realidad en donde se ha desvanecido la ilusión de una prosperidad incesante y
también la ilusión del poderío ilimitado de dólar".[7]
G. Hourdin es un
intelectual católico de izquierda. Reseñando todos estos datos llega a ia
conclusión: "En los Estados Unidos la corriente oficial de búsqueda
científica quiere ser absolutamente neutral. Lo mismo en lo que concierne a la
sociología, la economia política, la etnología y todas las ciencias humanas.
Los investigadores, los sabios y los escritores analizan la realidad humana tai
cual es. No sacan ninguna conclusión de ningún tipo. La comprueban. No le
encuentran ninguna finalidad humana ni ningún sentido histórico, desembocando
automáticamente en una cierta concepción práctica dei progreso colectivo que no
implica ningún freno moral, ni ningún tipo de búsqueda fuera de la prosperidad
para el conjunto de la nación".[8]
Creemos que
resultaría demasiado agregar otras opiniones. La crisis del sistema de consumo
es palpable; 17.000.000 de norteamericanos viven en la miseria, es decir los
primeros que deberían sentirse libres de las necesidades más elementales, pues
viven en el mayor de los centros del capitalismo. Este no ha encontrado
adecuada solución y la miseria coexiste con la opulencia. En lugar de liberarse
de toda la alienación, el hombre se siente en Ias laderas omnipresentes dei
capitalismo y de sus tentáculos. El Estado liberal, que debería mantenerse
fuera de la actividad económica, encargándose del orden jurídico y de seguridad
para la iniciativa particular, se ha convertido en un gran empresario, causando
con sus gastos enormes arrogaciones y despilfarros que gravemente repercute en
el balance de pagos externos y del déficit presupuestario. En cuanto a la
unificación mundial --sueño de los managers— el prometismo casi general. Los
organismos internacionales, núcleo de un futuro Estado mundial, se han convertido
en arenas de batalla entre los intereses que han llegado al margen de lo
tolerable o bien que están quemando, en fuego de guerra, muchísimos puntos
sensibles, en donde concluyen los intereses tan opuestos. Sumamente
característico es el siguiente hecho: "Europa y América del Norte
representan el 12% de la población mundial. Explotan una como ia otra para
mantener el nivel de vida de sus habitantes, el 60% al 70% del total de las
riquezas mundiales. No estamos seguros de ese porcentaje, pero podemos asegurar
que más de la mitad de las riquezas producidas por los países del tercer mundo
finalmente son compradas por los grandes paises industrializados. Las compran a
un precio que es inferior a su precio real. Por otra parte es necesario señalar
que los países colonizados en otra época han desarrollado la producción de una
o dos materias primas y no construyeron la economia polivalente que los hubiera
llevado a los umbrales de un verdadero desarrollo.[9]
Cuando fue
efectuada la conferencia del consejo económico de Upsala en 1965 y tratándose
de derechos humanos, alguien había planteado la cuestión, dice Hourdin, si las
grandes potencias no podían ponerse de acuerdo para aplicar un boicot económico
contra Africa del Sur para que cambiase su política racial, Lord Caradom,
representante de Gran Bretaña ante la organización de Ias Naciones Unidas,
rechazó enérgicamente tal propuesta aduciendo: "Si el boicot debía
extenderse a Africa del Sur (antes aplicado a Rhodesia. N.O.) nuestra economia
se arruinaría, nuestro déficit alcanzaría a 300 millones de libras por día'.*
¿Cómo superar ia
crisis del mundo industrial actual en sus fases de la sociedad de consumo?
Ruyer, quien
elogia la sociedad de consumo, rechaza con razón el sueño de la utopía de la
Edad de Oro. "Se equivocan todos los que creen poder liberarse de Ias
leyes de economía y de la economía misma, propiciando un esfuerzo constante
para producir. Más producción, más comodidad. La producción económica implica
laboriosas transformaciones sin más magia y milagro que Ias transformaciones
energéticas. Se dice que la fe puede transportar montañas, pero es a condición
que se pliegue a las leyes de la mecánica y que se conecte con suficientes
fuentes de energía según una correcta técnica. De otra manera, como dice S.
Butler, hasta una fe grande como una montaña no puede transportar un grano de
mostaza. La economía en el empleo de los medios para un fin es independiente de
la naturaleza de este fin y de la intensidad de la fe en este fin. La voluntad
puede todavia mucho menos sobre los medios —y la economía es un conjunto de los
medios— que sobre los fines. Los discursos contra la sociedad económica tienen
exclusivamente el valor de las novelas". (...) "Se puede falsear una
imagen de un film (...) no se puede falsear una máquina material o
social". (...) "La mutación antieconómica de la sociedad es una
mutación imposible, no hay rebelión que pueda contra la revolución económica.
Si esta revolución ha traído muchos males, la esperanza está, no en la
abolición sino en el perfeccionamiento de la sociedad industrial". (...)
"No es una anarquía decorada con el nombre de la 'democracia directa'
rápidamente cambiada en tiranía decorada con el nombre de planificación, en que
la sociedad humana pueda progresar, sino en un orden perfeccionado de
conformidad con la naturaleza de las cosas".[10]
G. Hourdin, por
el contrario, señalando la contrariedad de los cristianos a ia sociedad dei
consumo dice a su vez: "La sociedad de consumo es condenable no porque
obliga al hombre moderno a una disciplina rigurosa y a formas de vida
colectiva, sino porque, teniendo el poder de distribuir el saber, el pan, la
libertad, el trabajo y los derechos para todos, los reserva para algunos".[11]
Aquí está, según
nuestro parecer, el meollo del problema. Mientras Ruyer cree en la
independencia absoluta de las leyes y las cosas de la economia, olvidando su
"color" ético, Hourdin reserva para este lado del problema el rol
decisivo.
Nadie puede
quedarse indiferente ante la gravedad del problema. Una visión equivocada o una
condescendencia consciente pueden traer males todavía peores. Encontrándose
ante el mismo dilema, monseñor Quijote y Pancho de Graham Green, defendiendo
cada uno su punto de vista, surge la pregunta: ¿quién de nosotros dos tiene el
derecho? y leemos la contestación: "Nosotros". ¿Vale este
dualismo-unidad?
El derecho no
puede dejar de ser derecho, si tenemos una clara idea del mismo. La verdad no
puede dejar de serlo, si sabemos qué es la verdad en el sentido superior —no
exactitud científica, sino en sentido metafísico que es lo único que puede
apagar la sed humana de la verdad y la justicia—. La tabor, el sacrificio y los
esfuerzos son inseparables dei destino humano, pero también la sed y el hambre
de la verdad y la justicia.
Por lo tanto, el
prometeismo actual contra todos los órdenes tiene su raiz en la naturaleza
humana. Cuando se trata de orden económico sea interno o de aquel de carácter
internacional, esta raíz debe ser bien cuidada y cultivada, por lo cual la
ilusión de la Edad de Oro si bien inalcanzable, será mucho más real y más
cercana al hombre y a su sociedad. El alcance de la utopía se reduciría dentro
de los límites cada vez menores y quedará marginada dentro de au cuadro
legitimo y real.
De esta creencia
y carácter es nuestro "protestantismo" croata. Luchamos por los
derechos humanos contra aberraciones de la sociedad de consumo que se halla en
el punto crucial y fatídico de su desarrollo.
por Miguel
Poradowski
I
EN Ia historia de
los pueblos ha habido muchos "imperios de fuerza", es decir, de
violencia institucionalizada. Sin embargo, seguramente ninguno de ellos tuvo
carácter tan opresivo y explotador como lo tiene el "imperio marxista de
fuerza" del siglo XX.
Históricamente se
dan dos casos de este "imperio marxista de fuerza", a saber: el de la
Unión Soviética y el de la China Comunista; sin embargo, uno y otro son
solamente dos variantes del único "imperio marxista de fuerza", el
que Ia revolución marxista-comunista pretende imponer a todos los paises del
mundo y que, hasta ahora, ha logrado instalar primeramente en Rusia, al final
de la primera guerra mundial, y en China, después de la segunda guerra mundial,
y desde estos parses extenderlo a otros países como Armenia, Azerbaijan,
Bielorusia, Cossakia, Georgia, Idel-Ural, Caucasia del Norte, Ucrania,
Turquestán, la República del Extremo Oriente, Mongolia, en los años 1920-1924,
y después en el año 1939 los Estados Bálticos de Letonia, 'Lituania y Estonia,
y parcialmente, Finlandia, y, al final de la segunda guerra mundial, Polonia,
Hungria, Rumania, Bulgaria, Checoeslovaquia, Albania y Yugoslavia, y
recientemente, Afganistán, si se trata de los paises vecinos de Rusia; mientras
que, si se trata de los países lejanos de Rusia, viene la extensión a Cuba y de
aqui a otros paises de América Central y a varios paises en Africa y en el
Lejano Oriente (Vietnam). De parte de la China Comunista viene la ocupación del
Tibet y de Corea del Norte.
El origen de estos
dos "imperios marxistas de fuerza" es bastante curioso, pues no tiene
nada que ver con la historia, geografía, cultura, idiosincrasia y geopolítica
de Rusia y de China[12].
Su idea, concepto y programa nacen, pues, en la mente de Karl Marx[13],
de ahí su nombre "marxista".
Hasta hoy dia los
historiadores de las doctrinas sociales y políticas no llegan a descubrir
completamente los entretelones del origen de la "revolución
marxista", la que fue planteada por Karl Marx indiscutiblemente con dos
finalidades, a saber: Ia destrucción violenta y completa de fa sociedad
histórica y la implantación en su lugar de una sociedad nueva, única, mundial,
universal, completamente comunista.
Sin embargo,
hasta hoy día sigue ia polémica respecto a la pregunta: ¿por qué Marx quería
destruir completamente la sociedad histórica o, más exactamente, Ias muchísimas
sociedades históricas, muy distintas entre si, pues cada una de ellas tiene su
propio, original y exclusivo "curriculum vitae"? Y la otra pregunta:
¿por qué queria imponer a todos los pueblos de todo el mundo la única sociedad
comunista?
Hasta hace poco
hubo muchas conjeturas al respecto; casi todas ellas no pasaban de ser
suposiciones gratuitas y, en la mayoría de los casos, se trataba de
explicaciones con carácter de propaganda polftica en favor o en contra del
marxismo de Marx[14].
La mayoría de
estas suposiciones quería ver en Marx a una persona de grandes ideales
humanitarios y humanísticos, a uno entre muchos soñadores
"idealistas" de la primera mitad del siglo XIX, es decir, a un hombre
obsesionado por la visión de una futura sociedad feliz, un paraíso terrestre,
una ovidiana aurea aetas, en la cual el gran Ideal de la justicia,
especialmente de la justicia social, encontraria su plena realización, y, como
sería dificil, si no imposible, construir esta sociedad ideal comunista mundial
dei futuro sin la previa demolición completa de las sociedades históricas, Marx
habría planteado la necesidad de la revolución destructora, radical y violenta.
Sin embargo,
estas suposiciones han sido últimamente desmentidas por las serias
investigaciones efectuadas con ocasión del centenario de la muerte de Marx,
acontecida el 14 de marzo de 1883.
Hay que tener
presente que la vida de Marx y su pensamiento fueron en realidad, hasta hace
poco, no suficientemente estudiados; predominaban las leyendas y los mitos,
creados tanto por sus partidarios, como por sus adversarios[15].
Cosa curiosa es que durante casi un siglo lo más importante de los escritos de
Marx haya permanecido escondido por sus partidarios; se trata de su
correspondencia, la obra más auténtica y la más indispensable' para conocer su
vida y su pensamiento. Sólo últimamente las cartas de Marx se han hecho
accesibles a los estudiosos. Es la obra más grande, es decir, la más voluminosa,
pues ellas sobrepasan los 8 mil (además hay que agregar a ellas las de Engels,
que probablemente llegan a 2 mil) y, en algunas ediciones, abarcan más de 30
volúmenes. Sin embargo, todas las colecciones de cartas de Marx son
incompletas, pues gran parte de ellas fueron destruídas por la hija de Marx,
Eleonor, la cual las consideraba compro-metedoras para su padre; otras fueron
destruidas o intencionalmente traducidas por los testamentarios de Marx. De
todas maneras, actualmente ya sabemos mucho más sobre la vida de Marx y sobre
su pensamiento que hasta hace poco, y Io que sabemos no nos permite aceptar la
afirmación de que Marx fue un "idealista", pues no hay bases para
suponer que le preocupaba el problema de la justicia, en general, o de la "justicia
social", en particular, menos todavía la así llamada "cuestión
social" o "cuestión obrera" de su tiempo, Marx nunca amó a
nadie, menos a los obreros, a los proletariados o a los "pobres".
Marx solamente odiaba, vivía odiando: odiaba y despreciaba a sus padres, a sus
hermanos, a sus familiares, a sus compañeros de estudios, odiaba a todos porque
se odiaba a si mismo y este odio de si mismo lo proyectaba a toda la sociedad,
al hombre como tal, a ia humanidad entera y, especialmente, a Dios[16].
Marx fue
satanista, pero su satanismo no. se limitaba al culto de Satanás, como parece
insinuar Wurmbrand[17],
sino que se expresaba ante todo en su concepto de la "revolución
mundial" (die Weltrevolution), concebida como una "revolución
permanente", una revolución-destrucción, una revolución-sufrimiento de
todos y para siempre. La "cuestión social", la "cuestión
obrera", la "cuestión proletaria" son para Marx solamente los
pretextos, las ocasiones para plantear la necesidad de la revolución destructora.
La "cuestión social" es importante para Marx sólo como dinámica
social real indispensable para su revolución destructora de la sociedad, Marx
odia a la sociedad histórica no porque en ella descubra imperfecciones, taras,
injusticias, sino porque esta sociedad, por muy imperfecta que sea, tiene algo
de bueno, algo de justo, algo del Orden Natural y, por ende, hace la vida
humana llevadera, incluso feliz para muchos, pues tiene valores morales,
espirituales, que es precisamente y ante todo Io que Marx odia en ella, porque
él odiaba Dios y a su Ley Eterna. El satanismo de Marx exije de él la
destrucción del hombre como imagen de Dios y la destrucción de los planes
divinos sobre el destino feliz del hombre redimido e invitado a compartir la
felicidad eterna de Dios. Marx odia el Reino de aios y pretende impedir su
realización aqui en la tierra y, ante todo, su realización en el Cielo, en la
eternidad.
No podemos aqui,
en esta ocasión, entrar en los detalles, ni en la presentación documentada de
estos aspectos del marxismo. Sin embargo no podemos tampoco dejar de
mencionarlos, pues, de otra manera, no es posible comprender en qué consiste
esta "revolución marxista" ni por qué esta "revolución
permanente", después de destruir algún país, implanta en él un régimen de
opresión y de explotación totales y permanentes, es decir, el "imperio
marxista de fuerza". En vez de la participación del hombre en el Reino de
Dios, Marx desea Ia participación del hombre en el reino de Satanás, y para eso
plantea Ia necesidad de la revolución (es decir, de la destrucción) y del
comunismo (es decir, del infierno en la tierra, como preludio del Infierno
definitivo en la eternidad).
El "imperio
marxista de fuerza", implantado en Rusia y en China, es
"marxista" (según la opinión unánime de los marxistas y de los no marxistas)
porque son la primera (en el caso de Rusia) y la segunda (en el caso de China)
realización histórica de Ia "revolución mundial" (es decir, de la
Weltrevolution) de Marx. Sin embargo, la revolución marxista-comunista en Rusia
(la revolución bolchevique) no es rusa; tampoco la revolución
marxista-comunista en China es china, pues ni una ni otra vienen como
consecuencia de los procesos sociales intrínsecos de estos países, sino como
implantación desde el exterior, por potencias extranjeras dei proceso
destructivo revolucionario; en el caso de Rusia por Alemania y en el caso de
China por Rusia. Más todavia, Marx no preveía la posibilidad de realizar su
revolución en Rusia o en China antes de realizarla en Alemania o Inglaterra. La
revolución marxista es esencialmente mundial (die Weltrevolution) y universal,
porque es satánica, es decir tiene por finalidad desvincular la historia de
Dios y vincularla con Satanás.
La implantación
del único "imperio marxista de fuerza" mundial es lo que Marx quiere
lograr con su "revolución permanente" (die permanente
Weltrevolutionn). Para Marx no se trata de solucionar la "cuestión
social" o la "cuestión obrera", o la "cuestión de la
justicia". Nada de eso. Tampoco se trata para él de solucionar solamente
la "cuestión judia". No hay duda de que este problema lo preocupa en
su juventud y que, con ocasión de discutirlo con Bruno Bauer, Marx, por primera
vez, formula su "marxismo" (es decir, al materialismo histórico y la
revolución permanente). Sin embargo, una atenta y minuciosa lectura de su
obrita Zur Judenfrage (sobre la cuestión judía) lleva a Ia conclusión de
que Marx, con su "revolución permanente", no pretende sólo solucionar
la "cuestión judia", sino la cuestión dei hombre como tal y de la
humanidad, pues quiere liberar no solamente al judio, sino al hombre, y
liberarlo radicalmente. Pero, ¿de qué o de quién liberarlo? De Ia moral
objetiva y de Dios; más exactamente, liberar de la creencia en la existencia de
Dios y de la creencia en el destino eterno del hombre; quiere liberar al hombre
de su dependencia de Dios, de su destino eterno, quiere arrancar al hombre de
las manos de Dios y entregarlo en las manos de Satanás. Esta
"liberación" tiene por finalidad la total, completa y definitiva
esclavización del hombre por Satanás. Marx quiere despojar al hombre no
solamente de los bienes económicos, de la propiedad privada (el comunismo),
sino también de los bienes espirituales, de la fe en Dios (el materialismo y el
ateísmo), quiere rebajar al hombre al nivel del animai, quiere que el hombre
sufra aqui en la tierra y, ante todo, que sufra en la eternidad, en el
Infierno; quiere despojar al hombre de su relativa felicidad en la tierra y de
su perfecta felicidad en el Cielo. En esto consiste el satanismo de Marx.
Este
"imperio marxista de fuerza" empieza históricamente, por casualidad,
debido a la primera guerra mundial, en Rusia, pero por su naturaleza no es
"ruso" sino universal, pues es la primera realización de la
"revolución mundial" (de la Weltrevolution), es la primera etapa de
la revolución mundial, como lo dice Trotsky[18]
y, por ser mundial, desde Rusia tiene que extenderse a todo el mundo.
En vano se busca
las explicaciones históricas para demostrar que este "imperio de
fuerza" tiene también algunas raíces "rusas", pues eso no tiene
importancia; su naturaleza marxista (el satanismo) le permite extenderse a
todos los países, incluso a los que no tienen nada de estas "raíces
rusas" (como por ejemplo el absolutismo de los zares o el nihilismo de
Niechaiev, o la obsesión de destrucción de Bakunin).
El "imperio
marxista de fuerza" en Rusia ya tiene 66 años y el de China más o menos 40
años[19];
sin embargo, en ambos casos es un período de tiempo suficiente para que
demuestre plenamente su carácter totalitario, inhumano, opresor y explotador
del hombre, y para que imponga un régimen de permanente sufrimiento físico (la
miseria) y síquico (el terror, la esclavitud, el "pensamiento
cautivo"[20]
el ateísmo obligatorio, etc.), es decir, satánico. Este período de tiempo es
también suficiente para que todos los que lo desean sepan cuál es esta
realidad. Los estudios, las informaciones, los testimonios de las víctimas, las
acusaciones de los disidentes son tan abundantes e irrefutables, que podemos
tener por comprobado y seguro que se trata en ambos casos, de Rusia y de China,
de un "imperio marxista de fuerza" con más de 70 millones[21]
de víctimas en el caso ruso y más de 150 millones en el caso chino; víctimas
directas de terror, torturas, ejecuciones y muertes en los campos de
concentración, y víctimas de la miseria, hambre, enfermedades y de condiciones
inhumanas de vida como consecuencias directas del régimen comunista.
Hay que buscar la
explicación de este fenómeno; ¿por qué el régimen del comunismo marxista es tan
inhumano, totalitario, opresor y destructor del hombre? En otras palabras: ¿por
qué el "imperio marxista de fuerza" es esencialmente un imperio de
fuerza bruta y brutal, es decir, de violencia institucionalizada? ¿Viene eso
del mismo marxismo o de las condiciones históricas en las cuales se lo realiza?
A pesar de que,
en ciertos casos, estas condiciones o circunstancias históricas tienen
indiscutiblemente algún papel, la responsabilidad principal cae en el mismo
marxismo de Marx.
En primer lugar,
porque este régimen opresor es la consecuencia inevitable de lo que, en la
terminología de Marx, se llama la "dictadura del proletariado"[22].
Según la doctrina de Marx, la "dictadura del proletariado" es la
forma de gobierno "dictatorial", es decir, absoluto, no limitado en
nada por ninguna ley humana, ni, menos todavía, por las leyes divinas (la Ley
Natural y la ley positiva divina). Este poder dictatorial no está en las manos
del "proletariado", como lo sugiere la misma fórmula, sino en las
manos de los que pretenden representar al proletariado, es decir, en las manos
de los dirigentes del partido comunista. Sin embargo, en realidad se trata de
la dictadura del dirigente máximo del partido comunista, es decir, de su
secretario general. En el caso de la Unión Soviética, este dictador fue primero
Lenin, después Stalin, seguido de Malenkov, Kruschev, Breznev, Andropow y
actualmente Chernenko[23].
En el "imperio marxista de fuerza" el poder político es total y
absoluto y se encuentra en las manos del partido comunista único. Lo destaca
muy bien Mauricio Thorez[24],
diciendo: del partido, son puramente administrativos y, además, están
controlados por el partido en todos los niveles.
En segundo lugar
hay que tener presente el carácter del partido comunista único. Lo destaca muy
bien Mauricio Thorez, diciendo: "Notre parti n'est pas comme les
autres" (nuestro partido no es como los demás). Se trata aqui de la
doctrina de Lenin sobre el "partido único" (comunista). Según esta
doctrina, expuesta en lo que se llama Ia "tesis de Abril[25],
el partido comunista es el partido único (la monopartia) en muchísimos sentidos
de la palabra "único". El partido comunista (marxista) es único,
pues, en los paises donde llega al poder, no se admite la posibilidad de la
existencia de otros partidos políticos[26];
es único, pues representa la única clase social autorizada a gobernar: el
"proletariado"[27];
es único, no solamente en Rusia, donde primero llegó al poder, sino en todo el
mundo, lo que quiere decir que los partidos comunistas de otros paises son
solamente las secciones de este partido comunista único de la Unión Soviética,
pues sólo este partido es autorizado para llevar a cabo ia revolución
marxista-comunista en todo el mundo; es único gobernante, es decir, que a su
lado no se puede tolerar ningún tipo de poder y, si tales poderes existen,
siendo indispensables para la administración del país, tienen que ser
completamente controlados por el partido comunista; en consecuencia no se da y
no se puede dar en el "imperio marxista de fuerza" ningún tipo de
poder que no sea el del partido único: todas las instituciones y todos los
poderes están subordinados completamente al partido única y controlados por él.
De ahí nada de extraño que la Iglesia (y los comunidades religiosas de todos
los credos) puede ser tolerada sólo si acepta el control total de parte del
partido; también las Fuerzas Armadas están controladas en todos los niveles por
el partido; lo mismo ocurre con los Tribunales, con los sindicatos, etc.;
también el pseudo-Parlamento está controlado por el partido, como lo es el mismo
Gobierno de la Unión Soviética, pues el poder supremo real está en las manos
del partido, quien es el soberano. Este control de todo por el partido es
garantizado por la Constitución de la Unión Soviética[28].
En tercer lugar,
coma consecuencia de la aplicación de las doctrinas de la "dictadura del
proletariado" y del "partido único", viene el totalitarismo,
pues la aplicación de las mencionadas doctrinas elimina completamente cualquier
tipo de democracia; el régimen marxista-comunista es esencialmente antidemocrático[29].
Más todavía,
según la doctrina marxista la desaparición completa de la democracia es la
condición previa e inevitable para poder pasar a la plena realización del
"socialismo" como camino al "comunismo".
Este
totalitarismo marxista no es solamente una vuelta al totalitarismo de los
imperios de la antigüedad precristiana, sino mucho más. En la antigüedad el
hombre- fue de hecho y muy a menudo completamente absorbido por el Estado,
pues, en estos casos, actuaba no solamente el afán de parte del Estado de
subordinar a sus súbditos totalmente, sino que, en muchos casos, éste fue
también el deseo de los mismos súbditos o, al menos, este afán de absorción no
encontraba una adecuada fuerza de resistencia entre ellos, salvo tal vez en los
casos de los creyentes, especialmente de los judios, quienes, conociendo la
Biblia, de ella sacaban los argumentos en favor de la dignidad del hombre,
especialmente en los textos del Génesis, los que describen la creación del
hombre por Dios a su imagen y semejanza; En la mayoría de los casos, los
antiguos imperios paganos precristianos tienen sus religiones estatales
obligatorias para todos los ciudadanos y súbditos, por intermedio de Ias cuales
vinculaban (re-ligare) interiormente al hombre con el Estado, llegando
incluso a veces a deificar (divinizar) el Estado o, al menos, al gobernante y,
por ende, llegando a un poder realmente totalitario, pues no es solamente
exterior (jurídico), sino también interior (religioso y moral).
Sin embargo, el
caso del "'imperialismo marxista de fuerza" es distinto, pues aqui el
totalitarismo es de otro tipo, a saber, su "religión" estatal,
obligatoria e impuesta a todos por fuerza es el materialismo y el ateísmo
beligerante. La cosmovisión materialista justifica —según los marxistas-leninistas—
una posición de ateísmo beligerante, es decir, perseguidor de toda religión
auténtica precisamente por Iras exigencias totalitarias, es decir, para que
nada en los súbditos se oponga a la completa y total subordinación al poder del
partido y al proceso de completa absorción del hombre por la sociedad. Creer en
algo otro que la materia es buscar la independencia frente al poder absoluto y
totalitario. La integración completa del hombre en la sociedad comunista no
puede ser realizada hasta que no se elimine totalmente la fe en algo que no sea
la materia, pues la materia es la base de la sociedad totalitaria comunista. A
esta exigencia de adhesión completa, (es decir, no solamente exterior, sino
también interior) al partido, a la sociedad comunista, al Estado, no llegaban
completamente los totalitarismos de la antigüedad precristiana, lo que no es
nada de extraño, pues no pretendían presentarse como la antitesis del Reino de
Dios, tal como lo hace el totalitarismo marxista. Pero antes que ahondemos en
este tema de carácter teológico conviene todavia recordar también Ias otras
bases sociológicas dei totalitarismo marxista, a saber su carácter de
"comunista".
Por el
"comunismo" se entiende durante toda la historia de la humanidad
cualquier régimen social-económico sin la institución de la propiedad privada.
Pues bien, es sabido que la propiedad privada es Ia base de ia libertad; no hay
libertad sin propiedad privada, y no se trata sólo de la libertad económica,
sino de todas las libertades[30].
Claro está que no se trata de la libertad en el sentido de una de las
facultades espirituales del hombre; el hombre es un ser razonable y libre por
su naturaleza. Sin embargo, la posibilidad de ejercer esta facultad depende, al
menos hasta algún punto, dentro de la vida social, de algunas condiciones
concretas y, entre ellas, una de las más importantes es precisamente la
institución de la propiedad privada. Dentro de la sociedad política (en la
"polis", en la "ciudad"), la libertad del ciudadano está,
hasta algún punto, condicionada por la propiedad privada; los que no la tienen
no se encuentran en las condiciones adecuadas para ejercer su libertad. No liberty without property, decía Chesterton. A mayor posesión de la propiedad privada, mayor libertad
económica y política, pues la propiedad privada es la base de la independencia
frente al poder político del Estado.
La sociedad
comunista, por ser comunista, es decir, sin propiedad privada, donde toda la
propiedad pertenece exclusivamente al Estado, prácticamente no admite ninguna
libertad, pues, siendo la propiedad la base del poder, si toda propiedad
pertenece al Estado, también al Estado pertenece la totalidad del poder.
Los proletarios
son los que no tienen ninguna propiedad privada. El Estado comunista sólo puede
ser compuesto por proletarios. No es por casualidad que Marx, en su
"Manifiesto comunista", desee que todos sean proletarios (claro está
que no en el sentido de que vivan en la miseria, sino en el sentido propio del
término "proletario": quien no tiene ninguna propiedad); tampoco por
casualidad habla de la "dictadura del proletariado", pues la futura
sociedad comunista, soñada por él, por ser comunista, solamente puede ser
formada por proletarios, es decir, por los que no tienen ninguna propiedad
privada. Pero los "proletarios" (es decir, los que no tienen ninguna
propiedad privada), son, por definición, esclavos; en este caso no se trata de
los esclavos del derecho privado, sino del derecho público, es decir, son
esclavos no como propietarios de otras personas, sino como propiedad del Estado
comunista. Quitando la propiedad privada a todos, el marxismo esclaviza a
todos, pues reduce a todos al nivel de esclavos, haciendo de todos esclavos del
Estado comunista. Huega decir que se trata de la peor forma de esclavitud, pues
los esclavos del derecho privado tenían la posibilidad de recurrir al Estado
contra los abusos de sus amos, mientras que los esclavos del derecho público,
siendo esclavos del Estado, ya no tienen a quién recurrir contra los abusos de
su amo, pues el amo es el Estado. El poder político del Estado comunista es el
más totalitario que se puede dar. El "imperio marxista de fuerza' es
totalitario porque es comunista, es decir, porque, suprimiendo la institución
de la propiedad privada, transforma a todos los ciudadanos en esclavos del
Estado. Es evidente que se trata de un totalitarismo incomparable con el
totalitarismo de la antigüedad precristiana, pues, en los Estados antiguos, en
la mayoría de los casos, existia la institución de la propiedad privada y, por
ende, de la libertad. Sin embargo, en algunos casos, cuando se suprimía la
institución de la propiedad privada, es decir, cuando se introducía el régimen
comunista, de la propiedad exclusivamente estatal, todos los ciudadanos se
transformaban en esclavos. El caso tal vez más elocuente y mejor conocido es el
citado en la Biblia (Génesis, 47, 20-21), que se refiere a la actuación de José
en el Egipto, quien siendo autorizado por el faraón, para enfrentar los años de
las "vacas flacas", compra todas Ias cosechas de los pequeños
propietarios, transformando el antiguo régimen social-económico del Egipto,
basado sobre la pequeña propiedad privada de los ciudadanos, en un régimen de
la única propiedad estatal, es decir, en un capitalismo del Estado comunista,
en el cual todos los ciudadanos, con excepción de los judíos, llegan a ser
esclavos del faraón. Marx analiza este caso muy minuciosamente en El Capital,
demostrando gran admiración respecto a la obra de su correligionario José, y
parece que es este sistema de la completa esclavitud (la proletarización de
todos por la supresión de la propiedad privada) el que quiere imponer a todo el
mundo por su "revolución mundial" (die Weltrevolution). ¿En provecho
de quién? En provecho del partido comunista. Más todavía, a esta esclavización
de todos el marxismo la llama la "liberación".
El otro aspecto
del comunismo de Marx es su carácter ateísta. Parece que Marx no explica en
ninguna parte de sus escritos por qué para él el comunismo se identifica con el
ateísmo, sin embargo lo subraya frecuentemente y por eso se puede suponer que
ésta es la razón por la cual insiste tanto en la necesidad del régimen
comunista, pues (imponiendo este régimen por fuerza al mismo tiempo impone el
ateísmo.
Se puede suponer
que la identificación por Marx del comunismo con el ateísmo viene del mismo
análisis sociológico del comunismo, pues una sociedad comunista es la sociedad
en la cual el hombre está integrado completamente al grupo, es completamente
absorbido por la sociedad hasta el punto de que se identifica con la sociedad
y, en consecuencia, pierde casi toda su originalidad, su personalidad, su vida
privada, propia, (individual, interior; se trata (de la identificación de la
"parte" con el "todo", hasta el punto de que la
"parte" (el hombre-individuo) vive exclusivamente para el
"todo" (Ia sociedad), como la hormiga o la abeja, u otros insectos
sociales, los cuales no pueden vivir solos, desvinculados de la sociedad.
Incluso, algunos utopistas comunistas sostienen que esta identificación del
hombre con la sociedad comunista debería llegar hasta la que hay entre la
célula y el organismo biológico al cual pertenece, es decir, a una situación en
la cual no existe y no puede existir ningún tipo de vida privada, personal.
Huelga decir que, en estos casos, la vida espiritual individual desaparece y,
por ende, desaparece también la posibilidad de creer en Dios, de amarlo, de
pensar en EI, es decir, desaparece la religión. A lo sumo podría, tal vez,
darse el caso de algún culto grupal, común, pero nunca del culto personal,
individual, es decir, del culto verdadero de Dios verdadero[31].
El "imperio
marxista de fuerza" es de hecho una violencia institucionalizada, pues
está basado sobre el terror; incluso, en sus realizaciones históricas, llega a
ser el "imperio dei terror", el "imperio del miedo". Los
primeros realizadores de la revolución marxista en Rusia, Lenin y Trotsky,
insisten en sus escritos en la absoluta necesidad del terror, y más todavia,
ambos insisten en que el terror institucionalizado es el elemento esencial del
régimen comunista y, por ende, no es algo que se agrega a este régimen por
razones de necesidad de represión, pero que podría en el futuro desaparecer,
sino que es un elemento constitutivo del régimen comunista, un elemento permanente,
pues la revolución marxista es una revolución permanente y la revolución es
violencia[32].
La revolución
marxista, tanto en Rusia como en China, de inmediato institucionaliza el
terror.
En Rusia
primeramente se usa los "órganos de represión" introducidos durante
la "revolución de Febrero" (la revolución de Karensky). Se trata del
"Buró (oficina) 75"[33],
que rápidamente se transforma en una "máquina del terror". Sin
embargo, es la famosa Cheká (Cherezviniaia Komisia) la que —bajo la dirección
de Feliks Dzierzynski—(Ilamado por sus camaradas el Fouquier-Tinville[34]
de la revolución bolchevique), siendo encargada de las ejecuciones en masa (el
paredón), llega a ser el "terror institucionalizado", a partir del 7
de diciembre de 1917. Este terror primeramente está dirigido contra los
adversarios de la revolución bolchevique, sin embargo, rápidamente se ex-tiende
a todos, incluso a los miembros del partido único comunista. El primitivo
mecanismo, montado por Dzierzynski, para matar primero a los adversarios reales
y después a los adversarios posibles, es decir, a los sospechosos, en seguida
se transforma en una complicada institución, extendida a todo el pais, con sus
espantosas cárceles y horribles campos de concentración, muchos de los cuales,
con el tiempo, toman carácter de "campos de trabajo forzado",
colocados, en ia mayoría de los casos, en las partes más inhóspitas del país,
como Ias regiones del polo norte, la Kamchatka, Kolyma, etc., donde el mismo
clima, con temperaturas de 40 grados bajo cero, se presenta como factor de la
peor tortura. Viene el exterminio de millones de personas.
Después de cinco
años, el Cheká se transforma en la peor GPU (Polichesnoie Upravnienie
Gosudarstwa), esta vez bajo la dirección del cruel Yagoda. Con la (legada al
poder de Stalin viene el perfeccionamiento ,del sistema represivo y su
extensión a toda la sociedad, alcanzando la plena realización del "imperio
del miedo". La GPU es reemplazada por NKVD (Nachelnii Komitet Vnutrennii
Diet), es decir, que lo que en los países democráticos se llama el Ministerio
del Interior, en la Unión Soviética toma carácter de Ministerio del Terror. Sin
embargo, no es exacto pensar que se trata sólo del terror aplicado dentro de la
Unión Soviética, pues la NKVD extiende sus actividades terroristas, de
espionaje y de subversión a todo el mundo, poniendo de esta manera fin a las
huidas de gente de la Unión Soviética al extranjero, pues todos sabían que en
cualquier parte del mundo podían ser alcanzados por los agentes de la NKVD, y,
en realidad, durante la época staliniana el NKVD tortura, mata y secuestra a la
gente a su gusto, no solamente en la Unión Soviética, sino en todos los países
del mundo. A la tortura física y brutal se agregan las refinadas torturas
síquicas, con las cuales se consiguen la autocrítica y la autoacusación de los
presos políticos en los "juicios" - espectáculos, como la plena
realización del "imperio del miedo".
Después de la
segunda guerra mundial, en la época de la "coexistencia pacífica", es
decir, en la época de la plena cooperación y colaboración de las potencias
occidentales con el "imperio marxista de fuerza", la NKVD se
transforma en el KGB (Komitet Bezpiechenstva Gosudarstva), la cual, además de
ser una institución dei terror al mismo tiempo está encargada de la subversión,
espionaje y revolución en los paises todavía libres. Sin embargo, hay que
reconocer que los métodos algo cambian, pues hay menos ejecuciones masivas y
menos torturas físicas, como también hay un mejor aprovechamiento del trabajo
gratuito en los campos de trabajo forzado, y muchas víctimas del terror, en vez
de pudrirse en las cárceles, ahora se alienan en los hospitales siquiátricos.
Creer en la existencia de Dios ya no se califica como un crimen, sino como una
enfermedad mental. Sin embargo, el archipiélago GULAG sigue firme como antes,
pues el "imperio marxista de fuerza", siendo contrario a la
naturaleza humana, sólo puede mantenerse recurriendo al terror total.
En China, el
"imperio marxista de fuerza" llega a lo que podríamos llamar la
"democratización del terror". Si en la Unión Soviética, el terror es
una institución en las manos de un grupo (muy numeroso) de personas, y Si el
"pueblo" lo siente como algo impuesto de afuera, algo que se
identifica con el gobierno, con el partido y con la administración, en China el
terror toma otro carácter, pues se lo encarga al mismo "pueblo",
aplicando la fórmula democrática americana: the government of the people, by
the people and for the people, es decir, el terror del pueblo, para el pueblo y
por el pueblo, en otras palabras, el pueblo llega a ser el protagonista del
terror y, por ende, el protagonista de la revolución marxista. En la práctica
eso toma forma de "tribunales populares", con la diferencia de que el
"pueblo" no solamente juzga a los presuntos culpables (a los
contrarevolucionarios), sino que, al mismo tiempo, también de inmediato los
castiga, torturando y matando. El logro sicológico es enorme, pues el
"pueblo" se compromete con el terror y se envilece torturando hasta
la muerte, tratando las torturas como espectáculo y diversión. La revolución
marxista recibe una nueva dimensión, la dimensión popular; ya no es solamente
la obra de los "revolucionarios profesionales", es decir, del
partido, sino de todo el "pueblo", de toda la población envilecida
por el crimen, corrompida por la envidia y el odio; el "pueblo" asume
Ia función del verdugo, de un verdugo muy eficiente, pues en pocos años asesinó
torturando más de 150 millones de personas.
Por otra parte, a
Mao-Tse-tung también se debe el refinamiento del terror, especialmente de lo
que se suele llamar oficialmente el "bombardeo mental" y el
"lavado mental", practicados a enorme escala y en base a todos los
adelantos científicos, tanto sicológicos como bioquímicos, para destruir al
hombre no sólo física, sino también síquicamente; no basta destruir el cuerpo,
se pretende destruir completamente el alma: la razón, la voluntad y los
sentimientos, corrompiendo por completo lo interior de la persona, hasta el
punto de que el enemigo del "imperio marxista de fuerza" se
transforma en su fanático y fiel servidor.
¿De dónde viene
esta crueldad, esta locura de torturar y matar? Del ateísmo y del satanismo.
Donde se apaga la fe en Dios, se oscurece la mente, nos recuerda Solzhenitsyn[35];
el hombre se envilece; se transforma en un criminal, en un canibal
"civilizado', en un antropófago; viene la autodestrucción. El
"imperio marxista de fuerza" es la destrucción del hombre y de la
sociedad humana y en eso consiste su satanismo. Donde no se respeta a Dios,
tampoco se respeta al hombre. Donde no se respeta los derechos divinos, tampoco
se respeta los derechos humanos, como nos lo recuerda el Papa Juan Pablo
Segundo[36].
II
"Buscad
primero al Reino de Dios y su justicia, y todo lo demás recibiréis en
añadidura." (S. Mat., 6, 25.)
El concepto
general de la justicia —como "dar a cada cual lo suyo" o "dar a
cada uno lo que le corresponde"— es común a todos los pueblos de todos los
tiempos; sin embargo, en la Biblia y en las antiguas culturas griega y romana
se expresa de una manera más precisa y más evidente. Además, se la considera
como Io más característico de la vida social civilizada y como reflejo y
respeto de la Ley Natural.
Para nosotros,
los herederos y continuadores de la Civilización Occidental Cristiana, la
"justicia" se identifica más bien con el "régimen de
justicia", el que corresponde al sentido común de la justicia, típico para
los pueblos bíblicos y de las culturas griega y romana pre-cristianas, en las
cuales el conocimiento y el respeto de la Ley Natural es evidente.
Sin embargo, el
concepto cristiano de la justicia —a pesar de que tiene sus raíces en el
Antiguo Testamento y en las culturas griega y romana— nace del Evangelio y del
entendimiento de esta enseñanza nuevotestamental que nos otorga el Espiritu
Santo.
Los valiosísimos
conceptos de ia justicia, expresados en la antigua filosofía griega
(especialmente en los escritos de Aristóteles) y en las antiguas obras
teatrales griegas (especialmente en las de Sófocles), como también en el
Derecho Romano, vienen a ser aclarados y sublimados por la luz del Evangelio y
reformulados por el pensamiento cristiano de los primeros siglos, después
profundizados por la escolástica y, ante todo, por Santo Tomás de Aquino y sus
seguidores. Este concepto cristiano de la justicia, completado por el de la
caridad y de la verdad, llega a ser la base de la Civilización Occidental
Cristiana, es decir, de la Cristiandad, tan odiada por Marx y por sus
seguidores.
Sin embargo a lo
que se opone conscientemente el "imperio marxista de fuerza", es
decir, el "imperio de la injusticia institucionalizada", no es
solamente a este concepto de la justicia tradicional, es decir,
bíblico-griego-romano-cristiano y su parcial realización por la Civilización
Occidental Cristiana, sino ante todo a este otro concepto, todavía superior y
más perfecto, a saber: el de la "justicia del Reino de Dios".
Recordemos que
Cristo, antes de subir al Cielo, nos dejó una tarea concreta y obligatoria:
"Buscad primero el Reino de Dios y su justicia, y todo lo demás recibireís
en añadidura". Es evidente que la justicia del Reino de Dios es algo más
que la justicia de la Ley Natural. Podriamos llamarla el grado superior de la
justicia de la Ley Natural, pues si la justicia de la Ley Natural se expresa en
la fórmula del Derecho Romano pagano "suumcuique tribuere" (dar a
cada cual lo suyo) o como "constan et perpetua voluntas suumcuique
tribuendi" y en la fórmula de Santo Tomás "ordinare ea quae sunt
privatorum personarum in bonum commune", la justicia del Reino de Dios es
—tal como lo dice Santo Tomás— la subordinación de lo privado al bien común,
con tal que, en este caso, el término "bien común" signifique
"Dios", y si es así, la fuerza de esta justicia es no sólo de orden
moral y espiritual, sino también de orden divino.
No se trata pues
sólo de la justicia reducida a los problemas del salario, o a los de la
remuneración dei trabajo, o a los social-económicos en general, ni siquiera a
los problemas que surgen como consecuencia de la permanente convivencia social,
sino de la justicia que se expresa en el tratar al hombre coma creatura de
Dios, en la cual está presente la imagen de Dios, la imagen de Dios intrínseca
a la misma naturaleza humana, pues el hombre, siendo creado a "imagen y
semejanza de Dios" es por eso un ser razonable, libre y capaz de amar;
entonces, lo "justo" es tratar al hombre de tal manera que se respeta
en él la imagen de Dios y que ese permita a esta semejanza realizarse.
El régimen justo
del Reino de Dios es el que respeta al hombre como ser razonable y libre, con
destino eterno y capaz de amar no solamente a sus semejantes, sino ante todo a
Dios, su Creador, y que permita al hombre capacitarse, durante su vida
terrenal, para participar en la felicidad eterna de Dios en el Cielo.
Para nosotros,
los cristianos, es indiscutible que la finalidad de la vida terrenal es la
preparación y capacitación para convivir en el Cielo con Dios. Es la única
oportunidad al respecto, la que no puede ser perdida por nadie. Tenemos el
derecho y el deber de luchar por una sociedad justa, es decir, una sociedad que
permita a cada hombre llevar una vida de preparación y capacitación para la
eterna convivencia con Dios.
El "imperio
marxista de fuerza" se opone a eso, lo imposibilita y por eso es
esencialmente injusto. Dios es La Justicia (como es La Verdad y La Caridad).
Una sociedad es justa sólo en la medida en que esté orientada y ordenada hacia
el Bien Común supremo y último, es decir, hacia Dios. El "imperio marxista
de fuerza", siendo ateo y materialista, está contra Dios, contra el Bien
Común supremo y por eso es de suyo injusto; es la injusticia
institucionalizada.
"La justicia
del Reino de Dios" se hace presente en la convivencia humana sólo por la
participación en El Justo y en Lo Justo, es decir, en Dios. "Sin mi no
podéis hacer nada" —dice Cristo. ¿Acaso no quiere decir esto que sin la
participación de Dios en nuestra vida no puede darse ninguna virtud natural y,
menos todavía, sobrenatural? La virtud, como perfección, se da en nuestra vida
sólo en la medida de nuestra participación en la perfección divina. La justicia
natural y sobrenatural y, ante todo, la del Reino de Dios, se da en nuestra
vida sólo por la participación en la Justicia que es Dios. Si es así, en el
"imperio marxista de fuerza" no puede darse ningún tipo de justicia,
pues, irguiéndose contra Dios, se hace espiritualmente estéril y sólo puede
producir los frutos venenosos del Mal: el sufrimiento, el dolor, la injusticia,
la opresión, la esclavitud y la muerte; en lugar del Reino de Dios instala el
reino dei Príncipe de este mundo, el reino de Satanás, el reino de la envidia,
del odio, de la mentira, de la esclavitud. Estos son, según la Santísima
Virgen, los "errores de Rusia", que por la revolución marxista,
dirigida desde Moscú, se propagan a todo el mundo, hudiéndonos en el caos y la
destrucción de las luchas fratricidas.
La única salida
de esta trágica situación está en el radical rechazo de estos "errores de
Rusia", es decir, en el rechazo del veneno marxista. Tarea difícil pero
posible con la ayuda de la Santísima Virgen.
En su mensaje de
Fátima de julio de 1917, la Santísima Virgen, previniéndonos contra los
"errores de Rusia", por su propia iniciativa, se ofrece a nosotros
coma Patrona de nuestra lucha por el triunfo del Reino de Dios y su justicia y
contra el "imperio marxista de fuerza". Hay que recordar entonces las
siempre actuales palabras de Santa Juana de Arco: "Que los caballeros
luchen y Dios dará la victoria".
Antonio Gazzari
ENTRE los
críticos literarios croatas (y no solamente croatas) existe, así por lo menos
parece, una tendencia a buscar en las obras los trazos de la no originalidad,
olvidando la verdadera originalidad creativa. Hay un afán por poner en
descubierto, desvestir una obra literaria para relacionarla con otra o con una
idea o un motivo, expresado ya por otro autor. Se subestima de este modo,
aunque sin mala intención, el valor real de la obra en cuestión. Se hace, en la
mayoría de los casos, demostrando un amplio conocimiento en la materia, pero
sin entrar ni penetrar en la objetividad, sino dejándose llevar por la propia
subjetividad.
Cuando se
analiza, por ejemplo, una obra poética, uno encuentra que se está buscando
primero el modelo, el maestro, el inspirador. Luego, la escuela, el movimiento,
la ideologia, e inmediatamente después salen a la luz del día los nombres de
Baudelaire, Poe, Verlaine, Rilke, Quasimodo, o Neruda, Borges y otros más
modernos.
Para algunos,
resulta incomprensible la existencia artística de un poeta sin modelos, al
margen de toda escuela, corriente o maestros. Se ignora la existencia artística
inspirada sólo en los propios sentimientos del autor, a partir de una reacción
interna, vivida bajo ciertas circunstancias y volcada finalmente en ia obra
poética.
Hoy nos
referiremos a uno de estos artistas, en ia oportunidad de cumplirse 20 años de
su desaparición física. Un poeta que vivió en nuestros dias, compartiendo con
nosotros esa curiosa mezcla de factores que traen ellos consigo: la alegria y
la tristeza, el dolor y el placer, el llanto y la risa, el triunfo y la caída,
la vida y la muerte.
¿Por qué
ocuparnos una vez más de un poeta muerto? Porque, como lo dijera Viktor Vida
—desaparecido él también hace algo más de dos décadas, cuando parecia alcanzar
la cima de la expresión poética— "los poetas muertos no murieron".
Se trata de
Srećko Karaman, nacido el 16 de febrero de 1909 en Jesenice, en la
"República de Poljice", una interesante región croata enclavada en
las ríspidas pendientes montañosas, mirando al mar, respirando su fresco aire,
gozando de las suaves brisas marinas, escuchando a su vez el ulular de los
vientos que se estrellan en ráfagas contra lo alto de la montaña. Esta región
se caracterizó, desde el punto de vista histórico y social, por un fenómeno
singular. La "República de Poljica" o "Principado"
(Knežina), fue una Comuna campesina autónoma, conocida como tal ya en el siglo
X y que, con mayor o menor fortuna, mantuvo dicho carácter hasta la ocupación
francesa de 1807. Este "Principado" se hizo famoso, entre otras
cosas, por el "Estatuto de Poljica", conocido en los círculos
especializados, escrito en idioma croata y letras "bosančica"
—llamadas también "hrvačica" (derivadas de la vernácula
escritura croata "glagolica")— en el siglo XIV, alrededor del año
1333. Cabe señalar que el manuscrito más antiguo que se conserva data del siglo
XV, más precisamente de 1440.
El Estatuto era
una compilación jurídica, referida a la organización y la administración de la
Comuna y regulaba el código civil, penal y procesal. En verdad, se trata de un
documento singular de su época. Demostraba y reflejaba una realidad
democrática, asentada en una visión de la libertad personal y comunal, visión,
bien cabe señalar, no idealizada, sino real. En él, encontramos también este
pensamiento: "Nadie tiene derecho hacerse justicia por su cuenta"
(Nitko ne ima sam sebi pravo činiti). Justamente, este principio forma la
base del antiguo derecho croata.
Todo intelectual
que nació, creció y se desarrolló espiritualmente en este suelo (hubo varios
poetas, literatos y hombres de cultura, como por ejemplo, los poetas
Ivanišević, Kaštelan, Klarić, Ercegović, Miličević; el
crítico literario y ensayista de renombre internacional, Ante Kadić;
Branko Kadić, otro ensayista y critico literario, profundo conocedor de la
poesía de Karaman y autor de un estudio completo sobre su vida y obra ("Hrvatska
revija, 1964, N° 4) es portador tanto de los valores éticos de su región
natal como de los rasgos opuestos que la caracterizan: la fortaleza y la
resistencia de Ias montañas y las tempestades marinas, por un lado, y la
apacibilidad de las bonanzas azules y las brisas suaves que llegan de los
valles, por el otro.
La espiritualidad
de Srećko Karaman amalgamaba estos elementos. Aunque eligió el estudio de
la jurisprudencia (realismo puro), cursándolos en la Facultad de Derecho de
Zagreb, en su interior llevaba los ecos autóctonos, primitivos, de la belleza
—sea cual fuere su expresión— del terruño. Estos ecos se transformaban en voces
llenas de belleza, de sentimiento, de expresión íntima, en fin, de un tejer de
cosas sublime. Nació así un poeta en cuyo interior maduraron con los años las
imágenes visuales y aquellas éticas, retenidas por la retina del alma, que se
impregnaban en su ser.
La obra poética
de Karaman no es abundante. Preferia la profundidad antes que la chatura. Pero,
a pesar de ello, el valor de su poesía es bastante desparejo. Al analizar todo
lo que ha publicado, se notan significativos altibajos. Tal vez esto se debe a
la nerviosidad creativa, a un deseo apresurado de ponerse en contacto con el
público en un tiempo relativamente corto como para permitir una elaboración
municlosa y limada de asperezas.
Empezó a publicar
en varias revistas literarias croatas, allá por el año 1928, pero en forma poco
sistemática y sin lograr un lugar destacado. En 1945 es partícipe del Calvario
del pueblo croata, en el trágico éxodo, consecuencia del supremo sacrificio de
toda una Nación. En el año 1947 llegó a la Argentina. Cuando Karaman deja atrás
su pueblo natal, se convierte en un ser sin patria, sin hogar —eterno errante—,
sin poder encontrar, siquiera, su propia paz. El instinto bohemio, encadenado
hasta ese entonces a su vida interna, se pone ahora al descubierto, Irrumpe al
exterior y da forma a su pensamiento poético.
Es comprensible,
pues, que lo vivido —sufrimiento, sangre, muerte de inocentes—formara luego
parte de su expresión. De esta época datan los bellísimos versos: "Las
amapolas han conquistado hoy las praderas", donde Karaman se hace eco de
la trágica Bleiburg, en cuyas praderas florecen rojas amapolas que personifican
la vida segada de miles y miles de soldados prisioneros croatas.
Una vez en la
Argentina, Karaman —expresión de inocencia, tranquilidad y bondad— no encuentra
el rumbo perdido. La separación fue brusca, fulminante. Quedó desorientado. El
instinto, quizás un deseo de reemplazar, por lo menos parcialmente, los amores
de su juventud, de ir en busca del olvido descubriendo nuevas cosas, nuevas
impresiones, nuevo vivir, lo lleva a la vida marinera. Como simple marinero
recorre los mares, los ríos, soñando su mar, su costa, ávido de nuevas
experiencias, cual un lejano Pierre Loti, acortando las distancias.
Buscando lo que en realidad no puede encontrar a pesar de sus esfuerzos espirituales, pisa otra vez tierra firme —esta nuestra vieja, pobre y cansada tierra— y termina sus días en una oficina de la gran metrópoli, donde estoicamente vive la vida de una hormiga obrera. Desaparece a los 55 años, un 21 de enero de 1964. Partió hacia el infinito mar; se abrieron para él las blancas velas y la nave tomó rumbo hacia la Luz. Karaman se fue en silencio, tranquilo, envuelto en un sosiego ejemplar. Pero no murió sin pena: "Recién nací y ya tengo que irme", decía en "Viaje sin regreso", un cuento de carácter autobiográfico. Estas palabras nos hacen recordar los versos del maestro de la poesía croata, Tin Ujević: "Qué duro es sentirse viejo siendo joven".
Aunque
Srećko Karaman publicó sus creaciones líricas antes y durante la última
guerra, se hizo poeta, cabalmente, fuera de su patria. En este sentido, su caso
se asemeja al de otros tantos poetas croatas en el exilio. Su vida fue
relativamente breve y su obra, ya lo hemos anotado, no fue prolífica. Fuera de
Croacia, casi todas sus creaciones fueron publicadas en la revista literaria "Hrvatska
revija" (Revista croata), Alma Mater de las realizaciones culturales
croatas en la diáspora. En el año 1951 aparece su único libro de poesías
"Una vela en alta mar". Con este libro se afirma su nombre, en forma
rotunda y definitiva, en la poesía moderna croata. El destino truncó el camino
hacia una expresión seguramente más madura, rica y evolutiva.
Consideramos a la
poesía de Karaman como una poesia autóctona y al autor como una expresión de pura
poesia, donde no existen segundas intenciones; todo es claro, simple, sin
ningún hermetismo (hermetismo al que algunos recurren a menudo, únicamente por
ser un -ismo).
Karaman no sigue
modelos, hemos sostenido al principio de estas lineas. Su poesía no es un
reflejo de la lectura de los maestros franceses, italianos u otros. En sus
versos no se encuentra ni a Baudelaire, ni a Poe, ni a Ungaretti, ni los
grandes maestros de la poesía croata: Kranjčević, Matoš, Ujević,
para nombrar algunos de los más destacados. Se trata de una poesía espontánea,
acuñada en lo íntimo. Poesía no premeditada. Casi un resultado empírico, una
experiencia acumulada en lo más profundo del ser humano. De aquí que un
ejercicio comparativo a pensar en comparaciones, en influencias, en
imitaciones, no tiene sentido real. De la profundidad de su ser extrajo su
propia poesía. En esto Karaman se asemeja a otro poeta croata en el exilio, a
Vinko Nikolić en cuyos versos brota en tramos fascinantes una
autenticidad, una sinceridad, una espontaneidad sin par.
Me lo profundo de
su ser! ¿Qué es lo que encontramos allí de donde el poeta extrae sus penas, sus
dolores, su desesperación, al tiempo que ahoga el grito del hombre moribundo?
La nostalgia está
presente en la mayor parte de sus versos: hacia el país natal, la casa paterna,
el mar azul, hacia su gente; hacia la juventud y el amor lejano y perdido para
siempre. Todos estos elementos se entretejen, se mezclan y dan vida a su
poesía. El poeta se proclama "gaviota solitaria". Flota, no vuela, en
el aire. Para la gaviota no hay un lugar donde descansar.
"Vientos primaverales ustedes no tienen hogar.
Vientos primaverales yo tampoco lo tengo."
Lejos está su patria "donde para mi retorno no hay".
La nostalgia es
el dios Cronos que devora su propia prole. "La casa de mi padre en vano me
espera - estoy errando por los caminos extraños Consciente de encontrarse
perdido en su interior, no tiene ya furzas para seguir adelante:
"No tengo nombre, no tengo patria. Estoy en el camino hacia lo desconocido."
La imagen pura de
este sufrir por el pasado perdido, por cosas pequeñas que se agrandan con el
pasar del tiempo en la visión del poeta, ilustran los siguientes versos, un
espléndido esboza, unas pinceladas artisticamente trazadas, tal vez la más
linda, la más sublime expresión poética de Karaman, titulada "Las cosas
muertas":
"El ancla oxidada, el remo partido y el timón viejo
yacen olvidados
en el puerto muerto.
El mar está detenido.
Los peces no se mueven.
El sol inmóvil.
Por todas partes silencio mortal.
¿Por qué has venido, mi madre canosa,
lágrimas derramando,
acaso no sabes que las cosas muertas
no se despiertan?"
Recordando
su dura y penosa vida, brotan a veces expresiones filosóficas que encuadran su
visión de la vida en general. Al igual que las palabras dirigidas a la anciana
madre, rogándole no llorar, envía los mensajes al hombre que sufre, al hombre
moribundo: "Es lindo y heroico sufrir sin lágrimas, para que nadie se
entere". O los siguientes versos como para completar los primeros:
"Muérete, sin que nadie escuche tu grito, cual el pájaro mortalmente herido en el vuelo."
Estos versos los
dirige en primer término a sí mismo. En tal sentido fue consecuente hasta el
final. Con sus últimos esfuerzos, cuando la vida se apagaba, se dirigió a su
médico y amigo y tendiéndole su afiebrada mano le dijo: "Gracias. Eres un
hombre". Nada más. Para él, esto significaba el supremo sentido de la
vida. En esta expresión se concentraba la máxima virtud moral. Así Karaman
imaginaba la humanidad. Asi transitaba por el camino de la vida este hombre
brillante y amigo entrañable. ¡Ser bueno. Ser hombre!
¡Ser hombre! Otro
fuerte trazo de la personalidad de Srećko Karaman - ser humano.
Si podía y a Judas perdonaría,
porque la vida no es más que perdón,
porque la felicidad no es más que imaginación.
En su poesía
Karaman se acerca más que nunca a la sensibilidad y delicadeza poética cuando
aborda los motivos marinos. Es un trabajo como de filigrana. Para un ser que
salió de la espuma del mar, no hay mayor goce, no existe mayor sublimación ni
mayor felicidad que vivir junto al mar. Escuchar su vida íntima, su murmullo de
ir y venir, su gorgoteo entre las grietas de las rocas y peñascos. Presentar
con admiración, y casi veneración sus sueltas furias, que suben desde los
abismos para luego morir y convertirse en complaciente tranquilidad - otra cara
de su belleza.
Es comprensible,
y así lo demuestra la realidad, que la gente identificada con estos fenómenos
naturales, escuchan durante toda su vida la voz de las sirenas. No ayuda el
taparse los oídos.
Srećko
Karaman fue uno de ellos. Con él vivia el mar. El mar lo inspiraba: sus olas,
sus chichas calmas, su maestral, su vida plácida y también su vida salvaje. Lo
proclamaron "poeta del mar". En realidad, conquistó un lugar entre
los mejores poetas trotas que vertieron en versos, su admiración y amor hacia
el mar, como máxima expresión de belleza. Karaman se ubica al lado de los
grandes poetas de su patria: Drago Ivanišević —creador multifacético, pero
destacado sobre todo, por sus temas marinos—; Olinko Delorko; Frano
Alfirević; Mate Balota; el profundo Žic-Klačić; Josip Tomin,
poeta poco conocido, cuya obra está totalmente dedicada ai mar y tiene, como lo
han observado algunos "un gusto especial a mar". Nadie por ejemplo
descubrió el alma del mar en su profundidad sensible como la poetisa —la más
importante en la Croacia contemporánea— Vesna Parun. Es difícil pasar esta
reseña sin detenerse en la figura poética de Ante Cettineo, admirador de la
compleja vida marítima. Cettineo, un poeta pagano, panteísta, pues en todo lo
referente al mar, veía, encontraba la divinidad: en las olas, en las grutas
marinas, en las rocas, en las algas, en los cangrejos que subían los peñascos durante
la marea baja, en las conchitas que se metían en la arena. Deificaba todo.
Karaman vivió
esta íntima vida en forma profundamente espiritual, con más sentido simbólico,
igualado por pocos poetas croatas en exilio. Varios de ellos, en modo
particular Antun Bonifačić, Vinko Nikolić y Viktor Vida han
vivido hondamente esta vida. Otros apenas la rozaron. Algunos se zambullieron
entre sus olas. Karaman acariciaba su superficie y buceaba en sus
profundidades, gozando una y otra vez. Vivía con el mar y el mar vivía en él.
Estos
sentimientos acompañaron al poeta toda su vida. Buscaba su mar viajando por
mares ajenos; por los ríos de agua turbia y perezosa; por las costas
desconocidas donde no se respiraba el aire que curaba el alma, el aire de su
Mediterráneo. Tenía la sensación de estar crucificado; "la gaviota
solitaria aprisionada por las olas". Las Nereidas, ninfas de este mar,
eran sus amables y fieles compañeras.
En los versos de
Karaman "predomina la pasión y el ansia por el mar; la fiebre por las
olas" (Branko Kadić). Su entorno poético forman su patria chica, sus
recuerdos, reminiscencias, deseos frustrados, amores no vividos, salvo su único
amor, el mar. El mar "fiel e infiel". El mar "donde la juventud
maduraba bajo el sol en compañía de melancólicas melodías". Para Karaman
el mar estaba relacionado con todo lo más hermoso:
"Anoche soñé que navegabas en una valva de cristal
ataviada en malla de musgos marinos y algas
aromáticas."
Pensando
en su imaginario amor, mientras cruzaba los ríos, visitaba las exóticas
ciudades rioplatenses, admirando los delicados encajes paraguayos y las
cataratas del Iguazú, el poeta le envía un tibio mensaje:
"Las lejanías me han conquistado, el sol me despertó y las aguas matutinas me refrescaron.
Al mediodía soy barco en el mar, al anochecer silencio en una copa de árbol."
Karaman,
personificación de la vida marítima, un Glauco que hace reflejar el azul de
cielo sobre las tranquilas aguas, soñó hasta su último dia, con reposar una vez
más junto a las nativas playas lejanas. Ahí edificaria, a su retorno, su casa
"sobre la orilla de una ola, allá donde soplan el siroco y al atardecer,
el maestral". Allá, donde reposan para siempre sus antepasados, diestros
en el manejo de velas y timón.
¡Pero, no!
Hace 20 años, en
un día de verano caliente y agobiante, una gaviota herida voló hacia el
Infinito. ¿Llegó a sobrevolar las blancas arenas de su playa natal, allá en las
lejanas costas croatas de Dalmacia?
Se cumplieron sus
presentimientos expresados en los versos:
"No te dormirás donde soñabas,
ni volverás donde deseabas."
Ernest Bauer
QUIEN se ocupa de
los escritos de Carlos Marx, cuyo centenario de muerte fue celebrado el año
pasado (1983), como también de los de su amigo y seguidor Federico Engels
—ambos considerados como "clásicos de marxismo"— conoce su posición
tocante a los así llamados "pequeños y no históricos pueblos". Marx
afirmaba que había pueblos europeos, que durante siglos no consiguieron
organizar su propio Estado y, por cierto, no gracias a las circunstancias
geográficas e históricas desfavorables, sino sólo a causa de no haber mostrado
suficiente capacidad para conseguir este objetivo o, mejor, para alcanzarlo con
armas. En Ia Europa central, según él, lo serían los checos, los eslovacos, los
servios y los croatas, pero también los ucranianos y los rumanos. Estas
afirmaciones las escribió para mostrar la diferencia con respecto a los
pueblos, que evidenciaron tener la idea de Estado por la cual supieron luchar.
Naturalmente,
Marx justificaba esta su opinión, porque los polacos y los húngaros con sus
revoluciones contra el orden vigente por los años cincuenta del siglo pasado
(1848), creaban condiciones propicias para las ideas marxistas, respecto de las
relaciones sociales, pues Marx consideraba a esos pueblos como
"progresivos" a diferencia de los imperios austriaco y ruso, que se
podían considerar "reaccionarios". Otras causas y condiciones, en que
vivían esos pueblos, no le interesaban a Marx, porque todo su pensamiento se
movía en el sentido de la propagación de la idea socialista en el mundo.
Desde esta
perspectiva Marx atacó especialmente a los croatas, porque ellos, junto con
todas las desventajas de los pueblos "no históricos", tenían otro
punto débil, es decir fueron aprovechados por la Corte imperial vienesa contra
los húngaros "progresistas" y, desbaratando su revolución de 1848, se
opusieron directamente a la ayuda que Marx proporcionó a los húngaros.
Esta opinión de
Marx sobre los croatas uno la puede estudiar a lo mejor leyendo su
correspondencia con su amigo Engels, cuyo mérito especial consiste en haber
aplicado las ideas de Marx en la vida práctica política. Engels era justamente
en aquellos años del siglo XIX, cuando empezó a desarrollarse el nacionalismo
húngaro y luego aquel croata, el principal redactor del periódico Neue
Rheinische Zeitung.
Por lo tanto no
resultará superfluo citar algunos fragmentos de sus escritos de aquella época.
He aquí algunas
diatribas de Engels contra los croatas:
"El nuevo
Estado croata-eslavonio-dálmata de bandidos, asesinos y hajduks", es el
titulo de un artículo de Engels en Neue Rheinische Zeitung del 21 de
abril de 1849 (Nro. 278) como colaboración-correspondencia de Zagreb. (...)
"Se trata de un proyecto de ley acerca de una Comisión de Sabor
(parlamento) de 1849, en que se preveía la constitución del reino trino
croata-eslavonio-dálmata dentro de la Monarquía austro-húngara".
Y continúa de
esta manera: "Mientras en la Hungría propiamente dicha todo el poder
imperial está conmoviéndose gracias a las victoriosas armas húngaras, una
corriente especial nacional prepara al gobierno austríaco nuevas dificultades.
Los croatas ahora inventaron la idea del reino trino croata-eslavonio-dálmata,
que debería desempeñarse como apoyo para difundir la idea paneslava en el sur
de la Monarquía". Engels además escribe, que "el proyecto de la
mencionada Ley no habla de las pretensiones húngaras, sino que está ideado como
arma contra la influencia alemana y para servir a la alianza paneslava contra
los alemanes. ¡Este es el regalo a los custodios; a nuestros guardias
patrióticos y servidores de la Constitución del Santo Imperio Romano de la
nacionalidad alemana, quienes están soñando con los croatas! ¡El mismo
sentimiento de desconfianza y de odio existe en Ia Voivodina servia, cosa que
hemos informado con anterioridad!".
Este sería, según
Engels, el contenido del mencionado proyecto de Ley del Sabor (parlamento)
croata: "Unidad trina de cortacabezas de carácter rojo-satánico...
constituida por guardianes y la milicia (seresanos)[37],
que empiezan su existencia con conquistas. No sólo que separa a Eslavonia y a
Croacia de Hungría, sino que exige también la cuenca del Mura (Medjumurje), es
decir el ángulo de la zupania (un departamento amplio administrativo-político),
Zála entre los ríos Mura y Drava, incluso piden las islas de Cuarnero de la
región istrianodálmata, lo que quiere decir no sólo una parte de Hungría sino
también de Alemania. Además exige el derecho: 1) a reglamentar las relaciones
internas de Croacia y Eslavonia con Dalmacia a través de sus parlamentos
regionales, 2) a solucionar las relaciones con la Voivodina servia mediante
convenios bilaterales, 3) en base a los convenios concertados entre sí, harían
una alianza política especial con las demás regiones eslavas, vecinas del
Imperio, lo que significaría una nueva alianza paneslava contra los germanos y
los húngaros dentro de la Monarquía austro-húngara. Este derecho a una alianza
especial constituye, según la opinión de los bandidos uno de los derechos
humanos fundamentales!" - pero podría interpretarse también de esta
manera: "Nuestro derecho, derecho natural, es poner en práctica efectiva
el Congreso eslavo de Praga como institución legislativa"[38].
"Después de las declaraciones, conquistas y alianzas eslavas —continúa
Engels—, sigue la solemne Proclamación: ¡El reino trino nunca hasta ahora fue
la parte constitutiva de las tierras alemanas (¡Dieu merci! - ¡Gracias a Dios!)
- como tampoco quería ser parte del Reich alemán; justamente por esto el reino
trino no se puede incluir en el futuro en alianza alguna que Austria podría
concertar con Alemania!". Declaraciones tan solemnes, decía Engels:
"si bien de acuerdo a nuestro saber, nadie considera a Croacia junto con
las demás tierras de bandidos como parte de Alemania, la cual no abriga ni el
más mínimo deseo de incluir a Alemania a los señores isleños y seresanos (1);
no obstante en todo este proyecto no hay ni una sola palabra acerca de los
húngaros, ni un solo párrafo que debería tener por objetivo proteger este
soñado Estado de asesinos de la tan lamentada opresión de Hungría! Es evidente
pues adonde apunta la cosa: una Austria ideada, centralista, objetivo del
gobierno Schwarzenberg-Stadion, en primer término, los alemanes como el pueblo
más civilizado deberían tener la supremacía, provoca a este reino trino
paneslavo más espanto que el miedo a los húngaros a quienes considera ya
vencidos. Al mismo tiempo resulta claro que el odio contra los alemanes dentro
de estas naciones de bandidos supera en mucho al odio contra los húngaros. No
obstante estos pequeños bandoleros son aliados del patriótico periódico alemán
'Koelnische Zeitung'!". "¡Este es el aspecto —termina Engels su
artículo— del fundamento del Estado trino de los bandidos e isleños croatas,
que debería erigirse en la frontera sur de Alemania, si todo esto permiten los
húngaros y la revolución!".
Todos los
comentaristas de Engels están de acuerdo que este modo de presentación de la
idea estatal y del problema croata en la Monarquía de los Habsburgo, sorprende
necesariamente a todos los lectores de mente sana por el tono y el modo de
escribir. Así, por ejemplo, Rosdolsky[39]:
"¡A las naciones de 'bandidos', 'regiones ensangrentadas' les reprocha
Engels ciertos deseos de conquista, (...) sólo porque tratan de liberar del
dominio extranjero a sus regiones compactamente pobladas por ellos (Croacia y
Eslavonia). Engels les imputa odio a los alemanes sólo porque rechazan la
supremacía alemana en el imaginado Estado federativo del futuro! ¡El verdadero
carácter de conquista ofrecía la Asamblea nacional de Frankfort[40],
donde se preparaba la integración de este Estado en el Reich alemán!".
Un ejemplo más
sobre la opinión de Engels, reproducida por Franjo Tudjman, ex-general de Tito,
hoy nacionalista croata, en su conocido libro "Ideas grandes y pueblos
pequeños" (Matica Hrvatska, Zagreb, 1970, pág. 31): "Condenando la
exigencia de la identidad nacional de 'los eslavos semigermanizados' y su lucha
contra el 'centralismo político, como un fenómeno de reacción, opuesto al
progreso industrial', Engels escribirá para justificar la hegemonía húngara y
alemana: 'En breve, resulta claro, que estos "crímenes" de los
alemanes y húngaros contra los sospechosos eslavos se pueden insertar entre las
mejores y 'más valiosas acciones de que podrían estar orgullosas nuestra nación
y la húngara en su historia. En lo que concierne a los húngaros, hay que
destacar especialmente que los mismos, especialmente después de la revolución,
se portaron demasiado bien con los croatas ensorberbecidos... Esta
condescendencia con el pueblo, que es por su naturaleza, contrarrevolucionario,
es la única cosa que podemos reprocharles a los 'húngaros'."
A renglón seguido
continúa Tudjman: "Que las opiniones de esta clase de Marx y Engels acerca
del destino histórico de los pequeños pueblos eslavos no fueron sólo la
consecuencia de un conocimiento deficiente de la relación del pueblo húngaro
con los pueblos eslavos y de su encendido elán por la revolución dentro de las
luchas, sino que fueron fundadas en el pensamiento de entonces de Marx y Engels
en cuanto al desarrollo social, resulta evidente del modo en que habían
encarado a los movimientos nacionales eslavos de 1848 y de su Congreso de
Praga".
En
1852 el "New York Daily Tribune" publicó un artículo acerca de
"la revolución y contrarrevolución en Alemania", firmado por Marx,
donde entre otras cosas se dice: "La moribunda nación checa... hacía el
último esfuerzo por reconquistar su fuerza vital anterior, un esfuerzo, cuyo
fracaso, independientemente de todas las condiciones revolucionarias, fue una
prueba de que Bohemia podía existir en el futuro únicamente como parte de
Alemania, si bien una parte de su población puede, por algunos siglos más,
seguir hablando un idioma no-alemán".
Agrega: "Así
terminaron en esta época, y probablemente para siempre, los intentos de los
eslavos en Alemania para reconquistar una vida nacional independiente. Las
dispersas islas de muchos pueblos, cuya fuerza nacional y política era mucho
tiempo acallada y por lo que se vieron obligados a seguir por el camino de sus
conquistadores, de los pueblos más fuertes... es que estas naciones
moribundas... intentaron aprovechar la confusión general de 1848 para
restablecer su status político de los años 800. La milenaria historia tuvo que
ofrecerles el testimonio de que tal retroceso es imposible, que el hecho de
posesión anterior de entera región al este de los ríos Laba y Saala por un
cúmulo de los pueblos eslavos parecidos entre sí no pudo formar una comunidad,
demuestra la tendencia y al mismo tiempo la capacidad física e intelectual del
pueblo alemán, para vencer, absorber y asimilar a sus antiguos vecinos
orientales. (...) ¡Cómo ellos pueden esperar que la historia retrograda unos
mil años para se sientan satisfechos algunos grupos humanos débiles, que en
todas partes están mezclados con los alemanes y cercados por ellos; que desde
tiempo inmemorial no tuvieron otro idioma para sus necesidades de civilación
que el idioma alemán y que carecen del primer presupuesto para la existencia
nacional: una considerable población numérica y un territorio compacto!".
Así vieron Marx y
Engels lo que nosotros llamamos el renacimiento no sólo del pueblo croata, sino
también de todos los pueblos pequeños en la extinguida Monarquía.
En las discusiones
dentro del cuadro de la Primera Internacional, hubo muchas voces contrarias a
estas opiniones de Marx y Engels, por presentar ya un neto imperialismo alemán.
No obstante, ninguno de los dos abandonó sus ideas hasta el final de su
actividad, por lo cual más tarde vino Lenin, quien proclamó su teoría de la
autodeterminación de los pueblos y que hoy sirve de fundamento para el
marxismo-leninismo moderno.
Sea como fuere,
preguntamos: ¿Es posible —conociendo esta humillante opinión de Marx y Engels,
referente a los croatas— que alguno de sus hijos que se considere honrado, sea
partidario de estas ideas que lo avergüenzan y colocan en la fila de los
pueblos subdesarrollados, sin conciencia nacional e incapaces, ya que le toca
la suerte de ser absorbido por otros pueblos "capaces y adelantados"?
En realidad, ¡hay
que tener muy poco amor por su pueblo para autoproclamarse comunista!
(Publicado en
"Vjesnik" de los obreros e inmigrantes croatas en Alemania, año XII,
N° 43/1983. Traducido por F.N.)
(CENTENARIO DE SU
NACIMIENTO)
HACE un siglo, el
día 23 de diciembre del año 1883, nació en Zagreb, capital de Croacia, Juan
Benigar, uno de los más prestigiosos e importantes estudiosos que haya vivido
en la Patagonia argentina.
'Ese hombre de
ciencia, filólogo, historiador, filósofo, investigador y humanista, vivió por
muchos años entre los indios Mapuches del Neuquén'' meridional y compartió con
ellos sus vicisitudes, sus alegrías y sus penas. Lo llamaban: el patriarca o el
cacique blanco.
Los indios
Mapuches o Araucanos formaban la parte principal de la población de Chile,
especialmente de Coquimbo al sur y que se extendían también por el oeste
argentino, en las provincias de San Juan, Mendoza, Neuquén, Río Negro, La Pampa
y otras regiones.
Profundo
conocedor del alma indígena de esta parte del continente, de su cultura, sus
costumbres e idioma, Juan Benigar ha contribuido con sus trabajos a enriquecer
el caudal de conocimientos humanos y a jerarquizar la ciencia y cultura
argentina en general y de la Patagonia en particular.
El mismo Benigar
escribió a pedido de un amigo y compatriota suyo, alrededor del año 1933, sus
referencias biográficas en una carta. Esta entre otras cosas, dice textualmente[41]:
... "Soy
pues esloveno por los padres Juan y Rosa Lukez y croata por el nacimiento y por
la educación”.[42]
He nacido en
Zagreb el 23 de diciembre de 1883. Allá he estudiado hasta rendir el
bachillerato humanista en 1902. Cuatro años en la ciudad de Graz y luego en
Praga cursando la Ingeniería Civil.
En 1908 me he
trasladado a este país. (Se refiere a la Argentina). Aquí en 1910 me he casado
con una india pampeana, la excelente doña Eufemia Sheypukiñ Barraza[43].
De ella tengo seis varones y cinco mujeres. Ella falleció en 1932. He vivido en
el territorio de Río Negro hasta 1925 y desde entonces aquí en la frontera
chilena del territorio de Neuquén.
He publicado en
croata una gramática búlgara por el año 1904 y 1905 y además dos artículos
sobre mi patria, obras juveniles que me colocan entre los modestos precursores.
Entre los años 1924 y 1929 he publicado los siguientes trabajos en los
boletines de la Junta de Historia y Numismática Americana: a) El concepto del
tiempo entre los araucanos; b) El concepto del espacio entre los araucanos; c)
El concepto de la casualidad entre los araucanos y un estudio crítico sobre la
obra de Tomás Falkner: Descripción de la Patagonia y en la publicación 'Biblos'
de la ciudad de Azul (Provincia de Buenos Aires) El calvario de una tribu
(Estudio social).
En la `Voz del
Territorio' editado en Zapala (Neuquén): Los Chinos y los Japoneses en América.
Independientemente he publicado: El problema del hombre americano.
Sin haberlo
merecido con mis obras soy miembro correspondiente de la Junta de Historia y
Numismática Americana, desde el año 1924. El nombramiento lo considero sólo
como un estímulo por parte de los componentes doctos de esta generosa nación.
Tengo empezado
varios trabajos lingüísticos, históricos y sociales, algunos de ellos
adelantados..."
Para completar su
biografía hay que agregar que después de la muerte de su primera esposa, Juan
Benigar se casó en el año 1938 con Rosario Peña en el Ruca Choroi, departamento
Aluminé, provincia de Neuquén. Con ella tuvo cuatro hijos. Juan Benigar murió
en Poi Pucón, departamento de Aluminé el 14 de enero del año 1950.
Juan Benigar era
un políglota. Dominaba correctamente quince idiomas. Sabia sánscrito, griego,
latín, croata, esloveno, búlgaro, ruso, checo, eslovaco, alemán, inglés,
italiano y francés. Ya antes de su viaje a América, empezó a estudiar
castellano, y con los indios hablaba araucano.
Según la señorita
Ileana Lascaray, ex Directora del Museo Regional Daniel Gatica de Neuquén:
"Obra máxima de Juan Benigar se condensa en unos trescientos pequeños
tomos a manera de diccionarios, donde el estudio etimológico del araucano se
une a la tradición histórico-geográfica y la toponomia regional.
Araucanistas de
prestigio reconocido, como el autor chileno doctor Rodolfo Lenz acuden a
consultar su autorizada opinión.
Su condición de
miembro de número de la Junta de la Historia y Numismática Americana (hoy
Academia Nacional de Historia) le vinculan con la mayoría de las personalidades
intelectuales argentinas, con quienes sostiene nutrida correspondencia matizada
por inteligentes y agudas polémicas".
Como su fuente de
trabajo Juan Benigar inventó unas maquinarias y creó una pequeña industria
textil, al cual puso nombre: "Industria textil casera Eufemia Sheypukiñ"
en homenaje a su esposa.
En el año 1978
"Siringa Libros" de Neuquén editaron un excelente trabajo de Benigar:
"La Patagonia piensa".
La mayoría de los
trabajos de Benigar no fueron todavía editados, pero a pesar de esto él ha
conqusitado el privilegio de ser una de las máximas autoridades en los temas de
la Patagonia y de los indios Mapuches.
Para concluir
esta pequeña nota recordativa al cumplirse el centenario del nacimiento del
sabio croata Juan Benigar queria citar algunas palabras de su obra "El
problema del hombre americano", donde dirigiéndose a los argentinos,
aconseja:
"...A
vosotros, jóvenes argentinos, sedientos del saber y deseosos de crear a la
patria un puesto digno en la ciencia internacional, escuchad: Trabajad por amor
a las cosas, por amor a la verdad, no por amor a sí mismos. Quien pueda, salga
a la campaña, entre los indios, donde se hacen las mejores cosechas. Pero eso
no es indispensable. Indispensable es sólo pisar en seguro y no en fantasías. Y
también es indispensable que os escudéis tras el escudo patrio cuando tengais
algo que decir. La obligación vuestra es responder por vuestras palabras, con
el pecho desnudo. Que así hacen los hombres. La ciencia no es de tal o cual
nación, sino de la humanidad. Si trabajais con provecho, la gloria será
igualmente para vuestra patria, porque sois sus hijos."
Ljeposlav
Perinić
GRAHAM GREENE en
muchas de sus novelas analiza y pormenoriza la problemática del sacerdote
católico en la actualidad. Intenta, según su mejor saber y poder, presentarnos
en dichos libros 'Ia doliente realidad', como diría brillantemente un español,
del sacerdote en el momento histórico actual: de su rol, de su significado, de
su convivencia e inserción en el mundo moderno. A este tema está dedicado
también el libro a que nos referimos, en donde monseñor Quijote es el principal
personaje.
"Ya desde
comienzo anotamos: en este libro que no es un montón de las palabras huecas
como tampoco de las limonadas 'seniles', como desean sugerirnos algunos
críticos en América y Europa, el autor, convencido que en él, en el mundo y el
tiempo actuales están formándose y creciendo huesos nuevos, se sintió impulsado
a aportar su grano para que este crecimiento no se vaya en el sentido
incongruente con el hombre, única medida correcta de todas las cosas."
Recordándonos de
la opinión de un profesor croata de entre las dos guerras, quien señaló a Don
Quijote de Cervantes como una de las imágenes más sinceras y más conmovedoras
de la humanidad, la síntesis de la literatura de su tiempo y de su elevación,
obra de la más preclara libertad del espíritu, escrita en la cárcel,
Raspudić continúa textualmente: "Maraković (el profesor croata a
quien alude, n.o.) acepta la opinión de Madariaga, que paralelamente con el
desarrollo de la novela, Don Quijote 'se sanchiza', es decir se asemeja a
Sancho Panza, mientras éste por su lado experimenta una elevación hacia Don
Quijote, a una visión más alta y más noble del mundo, es decir se
donquijotiza".
Nuestros lectores
y todos los lectores de habla hispana tienen la oportunidad de leer en español
esta novela de Graham Greene, dado que existen ya. por cuanto sabemos, dos
traducciones castellanas: una en España y la otra en la Argentina (EMECE) y
pueden seguir a los principales protagonistas de la novela en sus aventuras.
Para nosotros resulta suficiente señalar, que las personalidades centrales son
monseñor Quijote, cura párroco en El Toboso, y su amigo Sancho —Enrique Zancas—
ex alcalde de El Toboso, marxista-comunista. El primero, honrado con el título
de monseñor gracias a una casual ayuda a un dignatario de Roma en su viaje por
España, y el segundo derrotado en las elecciones comunales —abandonado por el
Partido— se acercan mutuamente y un día decidieron ir juntos de vacaciones,
entablando durante el viaje conversaciones que tocan problemas más acuciantes
de la actualidad. Monseñor Quijote se presenta a un sacerdote católico sin gran
erudición ni inquietudes intelectuales. Es renuente a las novedades del
"aggiornamento", oponiéndose también al lujo de la Curia romana y a
la jerarquía eclesiástica en general. Vive de lo aprendido hace ya 40 años,
tampoco cambia su sotana durante ese tiempo. Está con el pueblo, predicándole verdades
de la Iglesia Romana y suministrando los sacramentos. Sancho, con estudios
secundarios interrumpidos, asimiló algunos de los dogmas del marxismo y con
Lenin, Stalin y Brezhnev anda por el mundo, anunciando sus ideas
"proféticas".
Ambos llevan en
su corazón una bondad originaria del hombre y, ironizando suavemente las ideas
uno del otro, descubren esta bondad que los hace inseparables. Sancho, viajando
en el Rosinante —un viejo coche del monseñor Quijote, trata y consigue desviar
a éste a unas semiaventuras: entrar en un cine pornográfico, dormir en un
burdel y prestar ayuda a un ladrón perseguido y adversario de la política del
generalísimo Franco. Lo peor, monseñor Quijote provocó un escándalo público al
atacar a una procesión sacrílega en que sacerdotes y mercaderes hacían una
especie de negocios con la estatua de la Virgen María. Formalmente todo esto
era incompatible con la disciplina de la Iglesia, pero también tuvo una
profunda justificación: parcialmente la genuidad de Quijote y parcialmente su
rebeldía contra su obispo y la autoridad eclesiástica en abuso. Esta
culpabilidad formal del monseñor Quijote dio suficiente motivo para un
conflicto con las autoridades eclesiásticas y en primer término de su obispo.
Después de la huida de reclusión impuesta por su obispo y la suspensión "a
divinis", el monseñor se accidenta y en una localidad española cae en la
agonía, celebrando en la misma la Santa Misa sin elementos necesarios y contra
la suspensión, pero vivida por él en su lucha agónica, donde también dio simbólicamente
la absolución y la comunión a su amigo Sancho, marxista-comunista, quien se
reveló como un amigo incondicional.
Lástima que por
las razones de espacio no podemos reproducir en su totalidad la opinión de
Raspudić, publicada en el semanario croata "Danica", de Chicago,
en cinco continuaciones al comienzo del año en curso. A pesar de sus simpatías
con el monseñor Quijote y con su autor, Raspudić subraya lo que es contra
el buen renombre y la doctrina eclesiástica, y rechazándolo dice: "Es
verdad, la novela está modelada en sus rasgos fundamentales teniendo presente
el modelo de la obra de Cervantes, pero ella narra su propio cuento, ofrece
—sirve en la palma de la mano— su propio mensaje. Lo entrega al hombre-hermano
en los albores del tercer milenario de la cristiandad, es decir en el momento
cuando se crea y concretiza un novus ordo rerum: anunciado y profetizado por
ambas: Canción de Canciones y la antigua profecía (Sibila)".
"Quien lee a
'El Camilo' de Guareschi y esta novela de Graham Greene, experimentará la gran
coincidencia entre las dos obras. No obstante se trata de una coincidencia
superficial, externa. Tal es así, porque si bien Greene escribe acerca del cura
párroco y el alcalde de la misma aldea, él escribe una novela original, fresca
y nueva. Guareschi persigue en su obra lo cómico sin deseo de dar un paso más
adelante, mientras en Graham Greene lo cómico es mucho más fundado y sirve sólo
como un medio para el fin". (...) "Hay una enorme diferencia entre
nuestro monseñor y el sacerdote de la novela El poder y la gloria. Este último
se desvía hacia el pecado, porque no soporta Ia soledad y alterado ya por el
vino, se entrega a la vida licenciosa, mientras monseñor Quijote, un cordero de
hombre, a pesar de las persecuciones y desgracias, por donde viene hace
introducir y dar a Dios a los hombres-hermanos. Graham Greene vive agónicamente
su catolicismo (en sentido unamuniano), promueve la fe personal y de
tolerancia, donde justamente la tolerancia se convierte en suprema lex. Por eso
ningún milagro que esta tolerancia la ha transplantado en sus 'héroes',
especialmente los sacerdotes". (...)
"Sancho
afirma que la Curia Romana ha matado a la iglesia Católica como lo hizo Stalin
con el comunismo. Monseñor le contesta: 'No del todo, Sancho. Aqui al lado tuyo
hay por lo menos un católico a pesar de la Curia'."
Por eso el Dr.
Raspudić prefiere comparar a monseñor Quijote con el pope (sacerdote)
glagolita croata en Dalmacia (que usaba en la Iglesia el idioma nacional) o al
"ujak" de Bosnia como lo describe Ivo Andrić en sus novelas:
"Conquista con su bondad y no con erudición, más con la práctica efectiva
de la fe que con las formulaciones exactas de la misma. La jerarquía hace
falta, piensa monseñor Quijote, quien 'nunca les daba mucha importancia a los
obispos' si se está en servicio del bien. Caso contrario, hay que evitarlos,
haciendo bien, tanto a la derecha como a la izquierda". (...)
Raspudić,
con razón, rechaza la idea del compromiso de Graham Greene con el comunismo.
Greene ha ido tan lejos, que propicia incluso diluir la doctrina dogmática de
la Iglesia y eliminar el infierno de la `economía de ia salvación".
"Leyendo
esta novela —dice Raspudić— uno no puede liberarse de la impresión, de que
Greene considere el marxismo-comunismo como la trama que permanecerá para el
futuro. Este es un juicio erróneo y una grave aberración, dado que el
materialismo marxista no responde al hombre que tiene el cuerpo y el
alma". A pesar de todo, el compañerismo y el amor humanos entre Quijote y
el ex alcalde de El Toboso son profundos. La Santa Misa, celebrada en la fiebre
mortal por el monseñor Quijote, es conmovedora. El alcalde comunista y ateísta
se pone de rodillas y recibe simbólicamente la absolución y Ia comunión por
parte del alucinante monseñor Quijote.
Después de la
muerte y el entierro de Quijote, el alcalde regresa a su El Toboso,
profundamente conmovido. Llegando con un profesor americano, que se dedicaba al
estudio de la vida de San Ignacio de Loyola, a la localidad de Orense, el
alcalde dijo: "¿Cómo es que el odio hacia un hombre —incluso un hombre
como Franco— muere cuando él muere, y sin embargo el amor, el amor que había
empezado a sentir por el padre Quijote, ahora parecía vivir y crecer a despecho
de la separación final y el silencio definitivo?". ¿Hasta cuándo, se
preguntó con una especie de temor, será posible que continúe aquel amor suyo?
¿Y con qué finalidad?, termina sus observaciones Raspudié, citando textualmente
expresiones de la novela de Graham Greene.
Por nuestra parte
esperamos coincidir con el pensamiento de Raspudić: con la finalidad de la
comprensión, entendimiento y la bondad de hombres que tanto nos faltan.
(Traducido y
comentado por Efemeron.)
UNOS APUNTES
ACERCA DE ESTE ARTICULO DE PRIMERA NECESIDAD
Ay, Belleza, alma graciosa, espíritu misterioso,
que huyes de nosotros tímida y huraña... Detente, Linda,
consuelo y alegria de nuestras vidas cargadas de falsas
ilusiones y fatuas alegrías.. ¿Quién eres, de dónde vienes, a dónde vas?...
¿Por qué has venido?
ESTE es el grito
del Dolor del Mundo, del Weltschmerz, del dolor de todos aquellos que sufren y
buscan la liberación y la felicidad... El grito de los más nobles del mundo.
Mas, ¿qué es la
belleza?... Existe o no existe este artículo de primera y universal
necesidad... Benedetto Croce dice ex cathedra que la belleza no tiene
existencia física... Pero Hegel proclama que la belleza es la aparición de Dios
en el mundo. Y Winckelmann insiste en que la belleza es inconcebible para la
mente humana... Pues bien, ¿qué es la belleza?... ¿Belleza apolínea,
dionisíaca, litúrgica, hedonista?... ¿Belleza activa, pasiva, física,
metafísica, natural, artificial, irresponsable, moralizadora?...
Las respuestas
son muy a menudo confusas, contradictorias, vagas y complicadas. Esto provoca
la impaciencia y el humor de don Max Schassler, profesor alemán, que en 1871
apunta:
"En ninguna parte en el dominio de la filosofía es tan grande Ia disparidad de opiniones como en la estética. Tampoco en ninguna otra parte se encuentra tanta palabrería hueca, un empleo constante de definiciones vacías de todo sentido o mal explicadas, una erudición pedantesca y al mismo tiempo superficial, como en la estética."
León Tolstoy cita
en su famosa obra "¿Qué es el arte?" esta opinión de Schassler y
trata de simplificar la problemática diciendo, que lo "bello" y lo
"bueno" son sinónimos y que, por lo tanto, lo que es bueno debe
necesariamente ser bello. Lo que no es bueno no puede ser bello.
Se deduce la
siguiente moraleja: La corriente eléctrica convierte el fierro en imán y el
espíritu de misericordia, de bondad, convierte el mundo en belleza.
Por lo tanto, la belleza tiene
innumerables formas y una sola función: la función de perfeccionar, purificar,
espiritualizar el mundo y salvarlo.
Sin el ánimo de
hacer un diálogo pedagógico me parece útil e indicado citar unas opiniones
sobre la naturaleza y el espíritu de la belleza.
Dijo Confucio que
nadie ama tanto la bondad cuanto la belleza. De acuerdo con esto dicen los
griegos: Buscando la belleza, encontramos la bondad. Los griegos no crearon su
democracia y la polis por amor al orden y a la justicia sino por amor a la
belleza... Encontraron que la armonía social es una gran realización estética.
Schopenhauer
apasionadamente busca el sentido y la función de la belleza y nos dice: La
Voluntad Ciega de vivir domina el mundo y crea el infierno en la tierra, el
dolor universal, el Weltschmerz. Esta energía ciega y feroz no tiene ni
principio ni fin, ni sentido ni inteligencia. Pero el hombre —sólo el hombre—
puede vencerla. A través de la contemplación que provoca la vivencia estética
separa el intelecto de la opresión de la voluntad y elimina la causa del dolor.
Mas —dice Schopenhauer— el placer estético es breve, es sólo consuelo, no
liberación definitiva. El arte no puede dominar los instintos que producen la
tiranía de la voluntad. Esta puede ser vencida sólo por la caridad que lleva a
la compasión universal. Compadeciéndose de todos aquellos que sufren, hombres,
animales y plantas, el hombre franquea la barrera que separa su Yo del Yo de
los demás. A través de la compasión universal el hombre se libra de la feroz y
estúpida tiranía de la Voluntad Ciega que produce el dolor universal. Así la
belleza contribuye a la salvación del mundo...
Romano Guardini,
filósofo y teólogo ítalo-alemán nos habla con claridad latina y precisión
germana. Nos dice que la belleza aparece cuando la esencia se expresa plana y
claramente. En este sentido son bellas: la estatua de la graciosa diosa griega,
la triste Crucificación de Grünewald y los "Horrores de la Guerra" de
Goya. La diosa griega es bella porque expresa la esencia da la gracia femenina.
La Crucificación expresa la esencia de tristeza del Martirio y las creaciones
de Goya la fealdad de la violencia y de la crueldad. Estas vivencias estéticas
—nos dice Guardini— influyen en el espíritu humano, lo elevan a la esfera
no-real —estética— en la cual experimenta la suprema libertad y felicidad. Toda
auténtica obra de arte desemboca en algo religioso, dice Guardini.
Ivan
Meštrović, escultor y humanista croata, dice que la belleza no es para
inebriar y seducir la fantasía sino para advertir que el valor de la existencia
humana está en el sacrificio por la verdad y la bondad. La belleza tiene mil
caras, la bondad un solo corazón.
Por fin
Dostoyevski... El visionario euroasiático proclama con voz de Isaías:
Existe en toda parte la sensación que
ha llegado la hora de algo milenario, de algo eterno, de algo para que el mundo
se ha estado preparando desde el comienzo de la civilización... ¡La belleza
salvará el mundo!...
¿Cómo lo
salvará?... ¿Cómo la belleza podrá salvar el mundo que ha crucificado la Verdad
y la Bondad? Esto Dostoyevski no lo hace, pero alude. La Verdad y la Bondad se
ofrecieron, se sacrificaron voluntariamente. Pero la Belleza —impetuosa,
seductora, mágica— no se ofreció, no se sacrificó, sino victoriosa dominó el
mundo y —sin misericordia— ¡Io salvó cinco minutos antes de la hora 24!
¡Croacia!. Esta
patria no es bella por lo que es sino por lo que no es... No es bella por la
belleza de sus playas y montañas, de sus aldeas y ciudades, de sus ritmos y
melodías... Es bella por su nostalgia de felicidad universal... Hemos hablado
con Hoelderlin: No vale el hombre lo que es sino lo que quiere ser...
Lucas Ev. Fertilio
Viña del Mar,
Abril 1984
L'Abbé Richard ha publicado un editorial bajo el título del epígrafe en el periódico francés L'homme Nouveau, el día 19 de febrero de 1984. Studia Croatica ha dedicado bastante espacio al extraordinario fenómeno de la "aparición" de la Virgen a un grupo de niños croatas en la aldea de Medjugorje. Los textos son el testimonio de los más variados testigos, vernáculos o extranjeros. Esta vez publicamos lo esencial del editorial, escrito acerca del mismo fenómeno por el abbé Richard. He aquí el texto que más nos interesa:
LOS
acontecimientos de una importancia capital para cada uno entre nosotros
europeos, creyentes o no, vienen desarrollándose desde el 24 de junio de 1981
en Medjugorje, una pequeña aldea de Yugoslavia, en la región croata de
Herzegovina.
La Virgen de Paz en un país marxista
Tengo ante mis
ojos un volumen de doscientas páginas pulcramente editado e ilustrado con fotos
que impresionan.
El volumen está
intitulado: "¡Aparece la Virgen en Medjugorje?" con el subtítulo:
"Un mensaje urgente dado al mundo en un país marxista".[44]
El libro está
firmado por dos teólogos católicos. Uno es el padre Rupčić, croata,
profesor de exégesis, quien ha escrito en su idioma el relato de Ias primeras
apariciones. El segundo es René Laurentin, quien ha trasladado esta obra al
idioma francés, dándole un volumen mayor. Efectivamente él había visitado en
1983 el lugar, porque las apariciones continúan y agregó un reportaje
excepcional, pues él mismo había asistido a varias apariciones. Así da su
testimonio: "Hasta este día yo había estudiado Ias éxtasis en los
historiadores. Por primera vez yo Ias vi. Esto es irreemplazable y he entendido
muy bien cosas que no me escapaban".
Nosotros no
tenemos necesidad aquí de presentar a René Laurentin, conocido no sólo por los
especialistas gracias a su obra excepcional en teología y en exégesis, sino
también por el numerosíslmo público a causa de su obra histórica, referente a
apariciones de Lourdes, de Río de Bace de Pontmain, sin necesidad de hablar
acerca de sus intervenciones en la gran prensa en muchísimas ocasiones.
El era bien
preparado no solamente para formular un juicio, el cual, después de largas
encuestas llega a la autoridad jerárquica, sino para enunciar también
concretamente principios generales de discernimiento, que permiten no sólo
plantear bien la cuestión: "¡Aparece la Virgen de Medjugorje?", sino
también de reconocer desde ya la gran probabilidad de una respuesta positiva.
He aquí brevemente puntos más característicos e importantes desarrollados en la
obra.
La aparición se
manifiesta todos los días después del 24 de junio de 1981 hasta el comienzo de
enero de 1984. Sólo durante 5 días no hubo aparición.
Ella se
manifiesta a un grupo no sólo de chicos, sino también de jóvenes. El más joven,
Jakov, ha nacido el 5 de junio de 1971. Ivan en 1965. Mirjana en 1965. Ivanka
en 1966. Vicka y María son del año 1964. Ella se manifiesta, en primer lugar,
en un viñedo al pie de una colina que tiene un sendero rematado por la cruz,
que se eleva a 450 metros de altura. Luego, después de la prohibición por parte
del poder público, las apariciones tuvieron lugar en una habitación que
pertenece a la Iglesia parroquial, único lugar donde el culto está permitido.
Después de la
oración común los chicos entran bruscamente en éxtasis, reaccionando de la
misma manera, con la mirada transfigurada que converge hacia un punto único.
Entonces viene el diálogo con la Virgen, dando a los videntes diversas
actitudes como si fueran en una conversación. Los labios se mueven, pero las
personas alrededor de los videntes nada entienden. AI final, después de algunos
minutos, cuando la Virgen desaparece, las voces retoman la oración del comienzo
y entonces todos entienden. Muchos psicólogos, quienes han examinado el caso,
excluyen la alucinación y la autosugestión.
Los chicos
reciben mensajes concernientes a la Iglesia local (Parroquia, Diócesis,
Yugoslavia) pero también a la Iglesia universal y al mundo entero. Además,
nueve secretos son revelados a los chicos. Mirjana ha recibido el décimo, que
conoce sólo ella. Los chicos no tienen derecho a hacerlos públicos hasta que
nuestra Virgen no conceda el permiso. Ellos se resisten fuertemente a todas las
presiones que se les habían hecho.
Uno de los
secretos se refiere a un signo visible, que será dado por nuestra Virgen como
prueba de sus apariciones.
Las apariciones
no están condicionadas por el lugar, que fue cambiado varias veces, sino más bien
por los videntes, porque les faltaron a veces a pesar de su deseo o de su
oración. Ellas vienen de una acción libre e imprevisible, fuera de las leyes
terrestres.
El grupo de los videntes no está dirigido absolutamente por ninguno de ellos que podría ser el líder. Ellos están ligados por una sólida amistad. Se tienen un gran respesto mutuo. Entre ellos no hay rivalidad ni celos. Fuera de las apariciones, ellos son como los demás jóvenes, excepto que han hecho un gran progreso en su vida religiosa.
El Padre
Rupčić, que ha escrito su libro en 1982, ha resumido en esa época el
mensaje de la Virgen usando la palabra shalom. Efectivamente dos
sacerdotes habían preguntado si la Virgen les había revelado algo de ella. Eso
fue el día 6 de agosto de 1981. La Virgen luego contestó: "Muchos son
quienes han preguntado por mi nombre: 'Yo soy la Reina de la Paz'."
También un día la
palabra "paz", en croata "mir", fue escrito en letras muy
visibles sobre el cielo. Muchas personas pudieron verla. Además numerosos
saneamientos, físicos o espirituales, por los cuales los peregrinos rinden
gracias, son signos auténticos de la aparición.
Reportaje de René Laurentin
Después de haber
seguido el conjunto de las primeras apariciones de acuerdo con el libro del
padre Rupčić, René Laurentin presenta el desarrollo de apariciones
hasta el comienzo del año presente. Su observación más importante es la
evolución hacia una discreta interiorización. El carisma de la videncia es como
si fuera destinada a ser sobrepasada. Mirjana fue invitada ya por la Virgen
para retornar a la fe pura. Desde este momento asistirnos al primer
relajamiento de los carismas.
Tal es así. como
si una nueva generación de dones espirituales más interiores se desarrollase
para preparar el futuro. Después de algunos meses ya un conjunto de oraciones
espontáneas se ha formado entre los muchachos que testimonian un notable grado
de espiritualidad. René Laurentin presenta a dos muchachas de unos 12 años:
Helena y Mariana, que fueron gratificadas de un carisma análogo al de los
vidantes, pero más de carácter interior. Ellas no ven a la Virgen, pero la
perciben por su corazón. Se trata de lo que sucedió —nota René Laurentin— en la
evolución de Catarina Labouré. ¿Significa esto el despertar más general en la
Iglesia de los carismas de las primeras asambleas cristianas? Sea como fuere,
René Laurentin reproduce algunas expresiones die los mensajes. Yo no puedo
dejar aquí de destacar algunas de ellas (omitimos lo que fue señalado y pasamos
a reproducir el resto del artículo del abbé Richard).
"En octubre
de 1981 la Virgen habría respondido a tres preguntas acerca de Polonia,
planteadas por un sacerdote: René Laurentin - Luis Rupčić:
"Aparece la Virgen en Medjugorje? - Un mensaje urgente dado en un país
marxista", 192 pp., ed. O.E.LL.; precio 76 francos. En corto plazo allí
habrá grandes conflictos, pero los justos van a prevalecer'. Con referencia a
los países del Este: `Rusia es un pueblo en donde Dios será más glorificado. El
Oeste ha hecho progresar la civilización, pero sin Dios, como si fuera él mismo
su procreador, pero lo que concierne a Occidente todavía queda en la esfera del
secreto.
Señalamos por fin
una palabra de la Virgen extremadamente significativa. "!o digan: tal die
y tal fecha habrá allí una catástrofe. Les digo hoy, el castigo va a venir, si
el mundo no se convierte. Invitad a la gente a la conversión, todo depende de
vuestra conversión".
Evaluación de René Laurentin
De esta manera el
conjunto de mensajes de Medjugorje está ya claro. Se trata. resume Laurentin,
de mensaje de paz. Se trata, en primer término, de una pacificación interior,
de retorno a Dios de cada uno, luego a nivel de las pequeñas comunidades de
grupo (videntes, parroquia, familias, aldeas) mediante una iluminación
concéntrica: Iglesia en Croacia, en Yugoslavia, Iglesia universal, y nuestro
mundo cargado de violencia, que desgasta lo mejor de las energías para preparar
su propia destrucción.
Este es el
mensaje recibido, vivido y que está brillando en un nuevo lugar de peregrinaje
con el fin de iluminar a nivel de la Iglesia universal.
Luego, en cinco
páginas precisas con sus propias fotos, el autor es testigo ocular de tres
apariciones: del 24, 25 y 26 de diciembre. Esto es, en verdad, como si nos
hubiera llevado con él a los pies de la Virgen. ¡Gracias, René Laurentin!
Los expertos que
tendrán que emitir su opinión en el proceso canónico, también serán agradecidos
a René Laurentin por las cincuenta páginas significativas con que termina la
obra bajo el título: "¿Son auténticas las apariciones?, dónde están su
evaluación y discernimiento".
El autor
presenta, en primer lugar, los argumentos en contra: ¿Demasiadas apariciones?,
¿Contradicciones?, ¿Desafío subversivo?, ¿Los excesos?, ¿Tensiones con la
autoridad?
Luego los
argumentos en pro: autenticidad doctrinal; la normalidad de éxtasis; la
normalidad de los videntes; una pastoral ejemplar; los frutos que parecen
excepcionalmente convincentes en todos los niveles, no sólo para los videntes,
sino para la parroquia entera con oración prolongada de entusiasmo juvenil; la
celebración diaria de la misa parroquial, caridad, reconciliación en las
familias y las aldeas.
Actualmente hay
un peregrinaje que viene no sólo de la Yugoslavia entera, sino también de todo
el mundo. El autor ha recogido las opiniones positivas de los hombres de
ciencia, de los expertos en la vida espiritual y de profesores de teología.
También de los
protestantes espirituales como es David Duplessis, quien testimonia: "Aquí
he visto que María lleva a Cristo. Hablaré al Papa, cuando le vea".
Un derviche
musulmán, a su vez, ha reaccionado muy positivamente, asistiendo a las
apariciones en una habitación reservada para ellas.
En cuanto a los
obispos, ellos están esperando la decisión del obispo de Mostar, quien en este
momento desea esclarecer ciertos puntos. No obstante, el arzobispo de Split ha
dicho públicamente: "Medjugorje ha hecho más en dos años que nuestra
actividad pastoral durante cuarenta años".
Por fin, con la
reserva de juicio, que compite a la autoridad episcopal, y a simple título de
los expertos de lo cual él está bien consciente en cuanto a su limitado valor,
l'abbé Laurentin concluye con una apreciación positiva de las apariciones:
"Las apariencias contrarias —señala— parecen revelar falsas interferencias
e insuficiente percepción de un evento que lleva en sí signos de la verdad
excepcional".
Yo, que he leído
con atención su análisis, creo justo subrayar que él ha enriquecido esta verdad
con opiniones singularmente esclarecedoras con respecto al cuerpo glorioso de
la Virgen en relación a nuestro tiempo-espacio; y con respecto al hecho, si las
apariciones no son "el Cielo de la betífica visión", son un
"signo" de este Cielo. Por lo tanto, no son "ilusión".
Ellas no son el término de la ruta. Pero ¡qué maravilla de viaje por esta ruta!
El segundo testimonio
Cuando estaba por
terminar este artículo para enviarlo a la redacción de L'Homme Nouveau, recibí
una obra nueva que se pronuncia sobre el mismo objeto, intitulado: "Las
apariciones de Medjugorje - descripciones y testimonios"[45].
Es la obra del padre Svetozar Kraljević, sacerdote franciscano del mismo
Medjugorje. La leí. Se trata del documento de primera mano y de una fuerza de
impacto singular para la reconstrucción de las escenas de las primeras
apariciones.
Es una obra más
corta que la de Laurentin-Rupčić, que contiene, como hemos visto, la
evaluación muy importante, referente al signo de la autenticidad de las
apariciones.
De esta manera
nosotros los franceses no tendríamos nada en estos eventos tan importantes.
Pero ahora estamos bien informados, porque las dos obras se complementan entre
sí. Por lo demás ¿no se trata de un evento tan inmenso que muchos reporteros y
muchas cámaras no serían demasiado para permitirnos hacer de todo esto una visión
global y penetrar en la misma con un poco más de intimidad?
¡Un aplauso para
las dos casas editoriales que han realizado dos presentaciones visualmente
perfectas y que se asemejan como dos hermanas!
En la obra de
René Laurentin podemos leer en el apéndice un llamado o un S.O.S., enviado al
Papa el día 2 de diciembre último por parte del padre Tomislav Vlašić,
cura párroco de esa parroquia. Yo me voy a referir sólo a su espíritu.
La llegada de la Reina de la Paz a Medjugorje vale bien como una Declaración de la paz. Pero es necesario aceptarla. Tenemos realmente que utilizar el período de gracia y de conversión que se nos ofrece. La Virgen invita, con urgencia, a la conversión y la reconciliación. Invitación a la oración y la penitencia está destinada a alejar los males de la guerra y, por sobre todo, a salvar las almas. Un grave castigo amenaza y parece que no será posible descartarlo completamente. La Virgen nos ruega: "¡Convertíos cuanto antes, abrid vuestros corazones a Dios!".
Parece bien que
Medjugorje sea un hito, una extensión y una conclusión a la intervención de
María de Fátima, intervención que fue tan poco aceptada, especialmente en
Francia.
¡Ojalá que
Medjugorje nos invite a despertar!
Por lo demás,
parece bien, que haya una semejanza en el destino histórico de nuestros dos
pueblos. Como los franceses evangelizados ya desde Clovingios, en el occidente
europeo fueron el primer pueblo cristiano, los croatas evangelizados más tarde,
en el siglo VII, son los primeros eslavos que abrazaron el cristianismo.
No es pues pura
coincidencia, si el libro del padre Kraljević está provisto con el
prefacio de un obispo francés, monseñor Jean Chabbert, o.f.m. arzobispo de
Perpignan.
L'ABBE RICHARD
P.S. Yo agradezco
a los lectores que me escriben para aclararme, darme coraje o, incluso, para
reprenderme. Quiero que los mismos comprendan que me resulta imposible
contestar a todos de otra manera sino a través del periódico. ¿No es lo mismo
una carta que vengo escribiéndoles cada quince dias?
(Trad. por F.N.)
(Traducción de
"NOVA HRVATSKA", Londres, N° 9/84)
No HAY y no puede
haber ninguna duda sobre la cantidad de los masacrados en Bleiburg e inmediatamente
después. No existe incertidumbre cuando se cuestiona la responsabilidad por
este crimen sin par ni rival. Después de 39 años se descubre la verdad sobre el
trato con los prisioneros más brutal que conoce la historia de cualquier
período de postguerra hasta ahora conocido.
Gracias al
interés que despertó una reciente emisión de la televisión británica sobre un
capítulo de la tragedia de Bleiburg y a las nuevas investigaciones de los
'historiadores ingleses y otros, Nova Hrvatska entró en posesión de tres
documentos con testimonios irrefutables.
Participando en
la discusión sobre el programa televisivo "La conspiración de
Klagenfurt" (The Times, 11.11.84), la periodista inglesa Elisabeth
Barker (autora del conocido libro "La política británica en el sudeste
europeo en la segunda guerra mundial") fue la primera en mencionar la
orden del mariscal Alexander, dirigida el 15 de mayo de 1945 a la Delegación
militar británica en Belgrado. Reproducimos aquí este documento en su
traducción:
De: AFHQ (Allied
Forces Headquarters - Cuartel General de las Fuerzas Aliadas), suscribe SACMED,
mencione FHDSC
Acción MACMIS
repetido 15. Grupo, 8. Ejército principal.
FX 75902. Más
alto secreto. Transmítase lo siguiente
al mariscal Tito.
La citación.
El comandante de las tropas aliadas en
Austria informa que se le rindieron alrededor de 200.000 ciudadanos yugoslavos
que prestaban servicio en las fuerzas armadas alemanas. Queríamos devolverlos
en seguida a las fuerzas del mariscal Tito y le estaríamos agradecidos si el
mariscal Tito accediera a impartir instrucciones a sus comandantes de
recibirlos y que conviniera con el comandante general del 5. Cuerpo sobre el
cupo según el cual se recibirían y sabre el lugar de su entrega para el retorno
a Yugoslavia en la frontera austríaca al sur de Klagenfurt. Citación terminada.
La orden fue
recibida por el vicemariscal de la aviación británica, Arthur Lee, que formaba
parte de la delegación de Maclean. En seguida, el 16 de mayo, Lee envía una
carta a Tito donde transmite la oferta de Alexander y asimismo agrega la
importante noticia sobre Vis (Lissa), que también debe haber recibido Tito del
cuartel de Alexander. Este documento en su traducción reza:
Querido mariscal:
El mariscal
Alexander me encargó enviarle esta comunicación.
El comandante de
Ias tropas aliadas en Austria informa que se le rindieron alrededor de 200.000
ciudadanos yugoslavos que prestaban servicio en Ias fuerzas armadas alemanas.
Quisieramos devolverlos en seguida a las fuerzas del mariscal Tito y
agradeceríamos si el mariscal Tito accedería impartir instrucciones a sus
comandantes para que los reciban y que convengan con el comandante general del
5. Cuerpo sobre el cupo según el cual podrían ser recibidos y sobre el lugar de
entrega para el retorno a Yugoslavia en la frontera austríaca al sur de
Klagenfurt.
He recibidlo el
informe de que todas las fuerzas aliadas serán retiradas die Vis (Lissa). Se
espera que la evacuación comenzara en el futuro más cercano.
Con expresión de
mi estima,
Arthur Lee
Vicemariscal de
aviación
A este documento
agregamos el tercero, el más importante. Es la respuesta de la parte yugoslava
y la aceptación idel ofrecimiento de Alexander. La carta de Arthur Lee y la
contestación de Tito aparecen ahora ipor primera vez en público.
Gabinete del
Mariscal de Yugoslavia
Nro. 15
El 17 de mayo del
año 1945
AL JEFE DE LA
DELEGACION MILITAR BRITANICA
Le ruego informe
al mariscal Alexander, que el mariscal Tito ha recibido su telegrama del 16 de
mayo de 1945 sobre la rendición de 200.000 yugoslavos, que se encuentran en
Austria y sobre la evacuación de sus fuerzas de la isla Vis.
El mariscal está
totalmente de acuerdo con el ofrecimiento del mariscal Alexander y le expresa
su gratitud.
Los antes
mencionados 200.000 los recibirá el cuartel del III. ejército al que se han
impartido las instrucciones necesarias.
Nos permitimos
rogarles de informarnos sobre el lugar de reunión "de la comisión para el
recibimiento de los prisioneros con los dele-gados designados para la entrega
por el mariscal Alexander.
Acepte las
expresiones de mi estima.
Por orden del
mariscal
General de
División
Ljub. Djurić
Los tres
documentos prueban irrefutablemente:
1) que el número
de los soldados prisioneros (de los cuales la mayoría eran croatas) sumaban
alrededor de 200.000;
2) que los
prisioneros se encontraban en el territorio austríaco y que ya estaban bajo el
poder de las fuerzas militares aliadas;
3) que
reconociendo Bleiburg y Klagenfurt como territorio austríaco, Tito "ipso
facto" renunció a Carintia, y
4) que el
mariscal Alexander pertenece al grupo de los responsables británicos, mientras
que Tito y su Ill, ejército partisano cargan con la responsabilidad principal
por el crimen máximo de este siglo.
Según la opinión
general los ,prisioneros fueron entregados a la merced de los asesinos
solamente para conservar de la manera más simple la vieja frontera
austriaco-yugoslava, y porque a los británicos no les importaba qué iba a
suceder en Yugoslavia (por esta razón se retiraron de Vis sin rodeos).
Algunos opinan
(véase la carta del Dr. Urbanac, "The South Slav Journal", Vol. 6 N.
2 [20], p. 58) que existe también un documento sobre esta "venta" de
prisioneros por Carintia, pero no solamente tales compromisos no son usuales en
forma oficial, sino que los citados documentos británicos del 15 y 16 de mayo
de 1945 resultan completamente claros. Estos documentos hablan expresamente de
la frontera austríaca al sur de Klagenfurt y Tito, quien accede a que se
ejecuten las extradiciones en esta frontera, no protesta de manera alguna
contra esa forma de determinación de la frontera austriaca. El deseo de los
guerrilleros comunistas de vengarse de los croatas por la proclamación del
Estado Independiente de Croacia era mayor que el deseo de anexar Carintia a
Eslovenia.
En cuanto al
trágico número de los masacrados, el dato de 200.000 comprende solamente a los
soldados, con los cuales, como es sabido, se retiraba de Croacia también una
muchedumbre de la población civil. El general partisano Kosta Nadj menciona en
sus memorias 300.000 personas, que al principio de mayo se dirigían hacia
Austria,
Solamente un
número reducido sobrevivió a Ias matanzas cerca de Maribor, en las montañas de
Eslovenia, a Ias marchas de muerte y a Ias liquidaciones en muchos campos de
concentración en el norte de Croacia. Las tan increíblemente numerosas víctimas
y la responsabilidadcriminal sin comparación tanto tiempo ocultada, claman para
que esto se convierta en el objeto de una imparcial indagación internacional.
Los muertos ya no pueden resucitar, pero los resultados de tal investigación
pueden ser una advertencia y pueden ayudar para que la irresponsabilidad y los
crímenes de tamaña proporción no se repitan jamás por lo menos en la Europa
civilizada.
OBSERVACION DE LA
REDACCION DE "STUDIA CROATICA":
El Instituto
Croata Latinoamericano de Cultura en Buenos Aires publicó en 1963 la edición
especial de la revista "Studia Croatica", en forma de libro, con el
título: "La tragedia de Bleiburg - Documentos sobre las matanzas colectivas
de los croatas en la Yugoslavia comunista en 1945".
En 1970, los
profesores Ivan Prcela y Stanko Guldescu publicaron en Philadelphia, EE.UU.,
similar obra intitulada: "Operation Slaughterhouse - Eyewitness Account of
Postwar Massacres in Yugoslavia" (Dorrance and Company, Philadelphia,
1970).
En 1977, la
Biblioteca de la Revista Croata (Munich-Barcelona) publicó la segunda edición
croata de la traducción y actualización del libro publicado en castellano en
1963, en Buenos Aires, con el título: "Bleiburška Tragedija Hrvatskog
Naroda".
El 5to. Congreso
del Consejo Nacional Croata, durante sus deliberaciones en Londres, del 12 al
14 de enero de 1984, analizó temas fundamentales relativos al pueblo croata que
'hacen a su lucha por la libertad y llegó a Ias siguientes conclusiones:
— El pueblo
Croata, al igual que todos los demás pueblos, tiene el derecho de materializar
en su patria, por medio de la revolución a Ia lucha armada, la libertad e independencia
nacional.
—El rol de los
Croatas en el exilio es explicar y sostener frente a los factores de poder
internacionales el derecho del pueblo Croata a su autodeterminación.
El trabajo
politico y propagandístico del Consejo Nacional Croata se desarrolla dentro del
marco de la ley de los paises donde actúa.
— Con miras a
alcanzar nuestro supremo objetivo nacional, el Consejo Nacional Croata acciona
activamente para materializar la unidad en la lucha libertadora, sin hacer
hincapié en diferencias políticas, religiosas, sociales u otras que pudieran
existir.
El Consejo
Nacional Croata desecha toda componenda con un Estado Yugoeslavo, porque es
imposible materializar los objetivos nacionales croatas dentro de cualquier
solución Yugoeslava. Hacemos hincapié en que el pueblo Croata puede existir,
sobrevivir y desarrollarse normalmente sólo en un Estado propio democrático e
independiente, establecido sobre la totalidad de su territorio étnico e
histórico.
—El Consejo
Nacional Croata sostiene la política de los propios intereses nacionales, que
se fundamenta en sus reales posibilidades y que se apoya en sus propias
fuerzas. Solamente de esta forma podemos pasar a ser un factor
internacionalmente reconocido. Esto se debe manifestar también en la relación
con los otros pueblos del actual Estado Yugoeslavo que buscan su independencia.
— La integridad
política y territorial de la Yugoeslavia actual está sostenida por ambos
bloques contra la voluntad de los croatas, albaneses y otros pueblos oprimidos.
Por lo tanto, nuestra obligación y deber es demostrar persistentemente la
insostenibilidad de ese Estado Yugoeslavo, que fue creado contrariando los
deseos de los pueblos compulsivamente en él, aglutinados. Yugoeslavia viola los
más elementales derechos de los hombres y de los pueblos en contradicción con
las conclusiones de la conferencia de Helsinski sobre seguridad Europea y
contra los principios de la Declaración de los Derechos Humanos de las Naciones
Unidas.
Su sistema
económico y político está en seria crisis. No existe justificativo para que un
Estado así sea artificialmente mantenido con vida en base a ayuda monetaria
proveniente de Estados y Bancos occidentales, cuando sobre ese territorio se
puede establecer el bienestar económico entre Estados independientes dentro de
un mercado libre.
— Teniendo en
vista el derecho del pueblo Croata, una vez establecido el Estado Croata, a
decidir sobre sus relaciones internacionales, el 5 Congreso del Consejo
Nacional Croata sostiene que es de interés del pueblo Croata, por su posición
geopolítica, que el Estado Croata se adhieren a los Estados neurales como
Suecia, Suiza y Austria. Históricamente el pueblo Croata ha sostenido que su
Estado debe ser democrático, politicamente pluralístico y socialmente justo. En
el Estado Croata serán respetados y garantizados todos los derechos humanos, al
pueblo Croata y a todas las minorias nacionales.
El Estado Croata
democrático y neutral sería aceptable tanto por Oriente como por Occidente,
porque no alterarla, el equilibrio de fuerzas existentes sino que contribuiría
al afianzamiento de la paz en Europa.
MENSAJE AL PUEBLO
CROATA EN LA PATRIA
Durante las
deliberaciones del 5° Congreso del Consejo Nacional Croata en Londres fue
analizada la difícil situación del pueblo croata en su patria, concerniente a
los múltiples e intrínsecos problemas que hacen a su permanencia como tal, los
cuales se manifiestan en el empobrecimiento continuo de la economía croata, en
Ia destrucción del aservo cultural croata, en Ia baja tasa de natalidad, en las
emigraciones masivas, y en el desempleo.
La única
permanente solución de estos problemas existenciales del pueblo croata es el
establecimiento del Estado Independiente Croata en todo su territorio étnico e
histórico.
Los croatas en el
exilio trabajan con todas sus fuerzas, dentro del marco de sus posibilidades,
para conseguir en el resto del mundo comprensión y ayuda para la justificada
lucha del pueblo croata por su autodeterminación.
La resistencia
activa del pueblo croata en su patria facilitará la tarea de los croatas en el
exilio a obtener soportes internacionales para materializar nuestro común
objetivo nacional.
Manifestad
vuestro descontento, como los albaneses, disminuyendo la actividad laboral,
desatendiendo obligaciones socio-políticas, aislando dentro de la sociedad
croata a los traidores, protestando y recurriendo a toda otra forma de
resistencia organizada.
Este tipo de
lucha debilitará aún más al régimen y al Estado que ya se encuentra en grave
crisis política y económica y obligará a la servil dirigencia comunista croata
a inevitables cambios politicos.
Los congresales
del Consejo Nacional Croata, reunidos en el 5to. Congreso en Londres, dirigen
estos pensamientos y saludos a sus hermanos en la patria, confiando en Ia pronta
liberación del pueblo croata y en el restablecimiento de nuestro independiente
Estado Croata.
PARTE DE LA
REALIDAD YUGOSLAVA
(Bajo este título
ha salido un artículo en "Frankfurter Allgemeine Zeitung" del 16 de
abril, publicado en la destacada página de los editoriales. Lo escribió el
mismo editor de este diario alemán de primera línea, Johann Georg Reissmüller.
Estas circunstancias, como también el tiempo de la aparición del artículo, le
confieren importancia.)
Si hoy en dia se
pregunta en Yugoslavia a los políticos comunistas por las dificultades en Ia
región de Kosovo, mayormente habitada por los albaneses, se contesta que las
hay, pero que se está en buen camino para superarlas. No se niega el problema
de Kosovo. Le ocurre completamente diferente al que quisiera dilucidar la
cuestión croata con los representantes de la autoridad yugoslava. Esta no
existe, se le hace oír; es un invento de "Ias fuerzas enemigas". A
ningún gobierno dei mundo le gusta que se le mencionen problemas no
solucionados de ia política interior. Pero la firmeza con la que se niega algo
que existe aquí a Ia vista de todos, no tiene comparación. Esto extraña en un
país, cuya politica se siente ligada al leninismo, pero no al modelo de los Soviets.
En realidad la
cuestión croata está hoy tan poco solucionada como hace veinte o treinta años.
En pocas palabras quiere decir que la nación croata se siente tan postergada en
el Estado multinacional yugoslavo —en muchos casos con razón, en algunos, no
podría ser de otro modo, sin motivo—. El régimen de Ia Yugoslavia comunista
nunca ha admitido que las quejas croatas de la falta de igualdad podrían ser
fundadas y reconocer a los croatas sólo temporariamente, y entonces sólo
formalmente (y sin decisión de sacar conclusiones), que el reino de Yugoslavia
entre las dos guerras los trataba mal.
Se podría pensar
que esto último es, mientras tanto, un pasado lejano, y que sería mejor que los
croatas no volvieran sobre el asunto. Sin embargo, los ojos de muchos croatas,
algunas imágenes de la Yugoslavia del rey se parecen a la Yugoslavia comunista.
Cerca del final de la Primera Guerra Mundial, el gobierno monárquico servio en
el exilio ha asegurado al representante de los exiliados croatas en un tratado
firmado en la isla griega de Corfú, que el Estado sur-eslavo que anhelaban
ambas partes será ordenado como un reino federal de los pueblos eslavos del sur
con la igualdad de derechos. Lo que salió después bajo la presión del
predominio servio era la Gran Servia ensanchada con nuevas provincias, por
ejemplo Croacia. También los comunistas han declarado durante la Segunda Guerra
Mundial, que después de la victoria, su Yugoslavia seria una federación de
pueblos iguales. Pero el Estado de Tito entró en la vida como una dominación
centralista de Belgrado. Por cierto ahora no existia más la dominación real
servia, el todopoderoso mariscal Tito no era servio, y los hombres en su torno
eran oriundos de todos los pueblos. Pero el pueblo croata no sentia la
discriminación a la que estaba expuesto ahora como más liviana porque no
provenía más sólo del gobierno servio.
En 1928 un
diputado servio asesinó a balazos en el parlamento de Belgrado a los más
importantes políticos croatas —hasta hoy se sospecha que actuó por mandato del
rey Alejandro Karadjordjević o por lo menos por encargo del gobierno.
Después de 43 años, en otoño de 1971, Tito destituyó en circunstancias
humillantes a la conducción comunista de Ia República de Croacia, que se hizo
popular por bregar por los intereses nacionales. Esta vez no era Belgrado el
lugar de la acción, sino Karadjordjevo —el coto de caza de Tito—, el mariscal
debía saber como ofendía a los croatas justamente escogiendo el lugar de este
nombre. Por cierto, esta vez nadie fue asesinado; pero algunos prominentes
intelectuales croatas fueron encarcelados.
El rey Alejandro
no ha proclamado solamente la dictadura después del asesinato en el parlamento,
sino que habla dictado también que el idioma del reino será ahora el
"yugoslavo", que en realidad significaba, como se vio en seguida, que
el idioma oficial desde ahora deberá ser el servio. Yugoslavia es desde 1945
una dictadura del partido comunista, así que Tito no la podia inaugurar de
nuevo. Pero al federalismo, que se desarrolló en la segunda mitad de los años
sesenta, lo cubrió primero con el centralismo. Hasta aqui se repetia entonces
el golpe de 1929. Naturalmente, después aflojó Ia garra centralista, y en 1974
Yugoslavia recibió una constitución típicamente federalista. Lo más importante:
la organización del partido retuvo en los años setenta Ia mayoría de las
características federalistas, que obtuvo en 1969. Pero a pesar de todo el
federalismo, quedó la opresión de Croacia. El golpe contra los croatas en
Karadjordjevo determina hasta hoy dia Ia realidad en esta república.
El
"yugoslavo" como nombre forzoso (absurdo) para el idioma no fue
decretado de nuevo después de 1945. Pero a los croatas se les impuso para su
variante idiomática, que ellos siempre llamaban "croata", la
designación "croata-servio". No les ayudaba en nada que de otra parte
el servio se denominó "servio-croata". Porque la consecuencia de Ia
nueva denominación era que la variante idiomática croata vino bajo Ia presión
de amoldarse a la servia. El secretario general del partido comunista croata
Bakarić, fallecido en 1983, informó después alrededor de 1970, cómo
sucedió todo eso y qué rol jugaba Ia policia secreta. Pero lo más interesante
en su descripción era, que hasta él, el más alto jerarca comunista de Croacia,
ha tenido que mirar impotente, como la central de Belgrado —a pesar de su
composición multinacional por lo menos hasta 1966, hasta la caída del
vicepresidente servio y jefe de la policia secreta Ranković de orientación
granservia— trataba a los croatas sin miramientos.
En la vieja
Yugoslavia real el ejército era un instrumento para el afianzamiento de la
supremacía servia. En la Yugoslavia comunista se la reimplantó (entre otros)
para reprimir a los croatas. El general servio Jovanić, en ese entonces el
comandante de la región militar de Zagreb, trataba de asustar en la primavera
de 1971 a Ia conducción nacional y reformista croata con el movimiento de
tropas. Cuando después en el otoño Tito asestó el golpe, las tropas de
Jovanić se encontraban paradas amenazando a la capital de Ia República
Croata, Zagreb. Tito ha destituido después también a la conducción partidaria
reformista servia tachándola de "liberal", pero aquí el ejército no
se movió.
Los croatas se
quejaban durante la monarquia de la discriminación económica, en el Estado
comunista se sienten igualmente económicamente perjudicados. Entretanto, en
este campo ayudó bastante la federalización del Estado de los años 1966 hasta
1974. Hoy hasta constatan algunos expertos occidentales, que el federalismo
económico yugoslavo ha degenerado en el aislamiento recíproco de las repúblicas
y que es una de las razones de las dificultades económicas yugoslavas. Hay algo
cierto en esto. Pero confiamos que el Oeste no va por esto forzar a Yugoslavia
a liquidar al federalismo, que constituye el elemento pluralista más fuerte en
el estado leninista.
¿Cuánto tiempo
será vigente Ia cuestión croata? En Yugoslavia no se ven hoy políticos, que
podrían comenzar a resolver el problema con sabiduría y coraje. No se puede
esperar nada en este sentido ni de los dirigentes comunistas de la República de
Croacia —sabiendo que llegaron a la cúspide gracias al golpe de Tito contra los
croatas en 1971—. En cambio, podría imaginarse que la conducción yugoslava iría
sacando pragmáticamente y sin alarde algunas espinas muy molestas de la carne
de la nación croata. ¿Sería, por ejemplo, imposible liberar a algunos
intelectuales croatas, supuestamente nacionalistas, sentenciados a largas
condenas de prisión y que fueron tratados especialmente mal?
La revista española de renombre internacional "Revista de Estudios Políticos", en su edición para los meses septiembre- octubre, 1983, Madrid, escribe acerca de nuestra edición, mencionada en el título lo siguiente:
Muy movida es la
historia die Croacia a lo largo de los últimos trece siglos. Situada entre
Occidente y Oriente supone una barrera de orientación occidental contra las
presiones del Este (servios y turcos) y del Norte (austríacos y magiares).
Tratándose de una
historia política y cultural, con inclusión de elementos geográficos, étnicos y
económicos, la obra recoge de una manera dinámica las siguientes etapas de
existencia y presencia activa de Croacia en la historia europea: 1) Período de
los duques y reyes de Ia dinastía nacional. 2) Croacia en la comunidad política
con otros pueblos. 3) Croacia durante la Primera Guerra Mundial 4) Entidades
estatales croatas peculiares. 5) El componente yugoslavo en ia política croata.
6) La restauración de la independencia (1941-1945). 7) La historia cultural. 8)
Ciencias morales y naturales. 9) La economía. 10) La importancia estratégica de
Croacia.
Dentro de este
contexto, el lector de habla hispana encontrará el fondo die la gloria y de Ia
tragedia, al mismo tiempo, de los croatas, respaldado por una excelente
bibliografia con fuentes croatas, extranjeras y no pocas latinas. A todo ello
se suma una larga lista de nombres de personajes históricos y actuales que
fueran. configurando los destinos de un pais que sigue luchando por su independencia.
Podríamos
concluir este breve comentario con las palabras del que prefacia la
publicación, el argentino Raúl Oscar Abdala: a mitad de camino entre Bizancio y
Roma, Croacia nació luchando por su supervivencia, por su ser nacional; desde
entonces no ha hecho más que cuadrarse de cruzado (= de cruzadas) frente a unos
y otros. En cada una de Ias alternativas, esta comunidad nacional croata se ha
mostrado extraordinariamente fiel a sí misma, asida con desesperada energía a
los suppestos étnicos y culturales que explican por una parte su idiosincrasia
nacional y por otra la irrenunciable occidentalidad que desde los días die
Carlomagno constituye uno de sus más legítimos orgullos.
Además el autor
de las líneas precedentes —Stefan Glejdura escribe sobre el estudio publicado
en Journal of Croatian Studies, Nueva York, p. 67, y cuyo autor es N. L.
Karlović, intitulado "Croatia and its Future: Internal Colonialism or
Independence", lo siguiente:
Croacia forma
parte de Yugoslavia desde 1918, excepto el breve período durante la Segunda
Guerra Mundial (1941-1945), con un territorio étnicamente bien determinado.
Yugoslavia es un Estado multinacional, ya que frente a los servios en su
territorio están incluidos eslovenos, macedonios, albaneses y otras nacionalidades
o grupos étnicos. El sistema federal de régimen, implantado a raíz de la
Segunda Guerra Mundial, no ha resuelto el problema de las manifestaciones
nacionales, sobre todo entre los croatas y los servios. Servia es considerada
como centro de poder y Croacia sólo como una de las regiones periféricas. De
ahí las constantes tensiones en el dominio religioso, político, social,
económico y cultural. Los diferentes grupos étnicos aspiran a algo más que a
una formal autonomía regional bajo la dominación de Servia. Esta parece ser la
cuestión clave, a lo largo de las cuatro publicaciones aquí señaladas, para la
existencia de la Federación yugoslava y su estabilidad interior y también en la
escena internacional.
El problema de
Croacia constituye una pieza más en la cadena de reivindicaciones nacionales
que en los últimos años vienen exteriorizándose tanto dentro del bloque
marxista como en el mundo occidental. Es otro resurgimiento nacional, después
dei siglo XIX. La argumentación de que los procesos de integración
internacional —la Comunidad Económica Europea, por ejemplo—, puedan resolver la
cuestión nacional, no ha dado frutos deseados hasta ahora. Si al principio el
nacionalismo era un movimiento primordialmente elitista, hoy día es de Ias
masas que se consideran como miembros integrantes de la Comunidad
internacional. Por ello, internacional, y no interestatal. Como tales aspiran a
contribuir en su propio nombre a su desarrollo y al de la humanidad.
¿Colonialismo
interno o independencia? El sentimiento nacional croata se manifiesta cada vez
con más fuerza desde las décadas sesenta y setenta conectando, de esta manera,
con la oposición croata frente al servismo de entre las dos guerras mundiales,
cuando la "Gran Servia" (= Yugoslavia) controlaba el sistema politico,
militar, administrativo y financiero. Hoy, las respectivas posiciones no están
bien claras, aun menos en el campo económico.
Basándose en
fuentes extranjeras y yugoslavas, Karlović localiza con gran sentido
realista la presente situación de Croacia en la Yugoslavia de hoy a todos los
niveles. El camino hacia la independencia será, sin duda alguna, largo.
Nueva York,
Croatian National Congress, 1983, 48 págs.
Yugoslavia está
en grave crisis desde el punto de vista tanto político como económico.
Solamente que el Oeste no se percibe de este hecho. Politicamente, las naciones
y nacionalidades son diferentes en cuanto a historia, cultura, religión y
aspiraciones cara al futuro. Ya lo hemos visto, los croatas aspiran a su propio
Estado nacional e independiente respecto a la burocracia y al control militar
de Servia. Ya en Ia década sesenta, y paradójicamente bajo liderazgo de la Liga
de los Comunistas de Croacia (filial de la LCY) surgió un movimiento nacionalista
autodefensivo croata cuyo objetivo consistía en transformar a Yugoslavia en una
confederación en la que las repúblicas existentes dentro de la actual
federación yugoslava llegarían a ser virtualmente soberanas. Sin embargo, en
1971, este movimiento, dentro del propio comunismo autogestionario yugoslavo,
ha sido aplastado por el ejército de Tito dominado por los servios. No
obstante, y una vez más, los croatas insisten en la realización del derecho de
autodeterminación creando su propio Estado nacional fuera de Yugoslavia.
En cuanto a la
nutrida minoría albanesa, considerada constitucionalmente como
"nacionalidad", son bien conocidos los acontecimientos de 1981-1982
(región autónoma de Kosovo). Miles de albaneses han perdido la vida y otros
tantos fueron a parar en prisiones, sólo por reivindicar sus derechos
nacionales. Según parece, el objetivo final de los albaneses de Yugoslavia
consiste en separarse de este país artificial y reunirse con su vecina Albania,
al fin y al cabo también bajo régimen comunista.
Económicamente,
problema estrechamente ligado al aspecto político, Yugoslavia se encuentra en
una crisis sin precedentes en 1982, aunque esta cuestión no suele tenerse en
cuenta por observadores occidentales y sólo algunos, sí se percatan de que
Yugoslavia supera la deuda exterior incluso la de Polonia, para no ir más
lejos. Todo indica que el poder de Belgrado no quiere enterarse de nada. Desde
su posición marxista lo considera resuelto todo, a expensas del Occidente.
Mientras tanto, según acabamos de señalar indirectamente, la realidad es bien
distinta.
Belgrado, 1982,
125 págs.
Frente a estas
tres publicaciones aparece la cuarta, Las nacionalidades en Yugoslavia.
Como si su autor pretendiera contrarrestar, de alguna manera, la argumentación
de las anteriores. Lo consigue sólo en parte, ya que sus argumentaciones son
más bien de carácter teórico-jurídico-constitucional que basándose en esa
"realidad bien distinta" ...
Es el punto de
vista servio y, por tanto parcial, hegemoníaco. Se presenta un cuadro de
situaciones en las repúblicas federadas y en Ias regiones autónomas. No
convencen ni el número o proporciones de determinadas naciones y nacionalidades
en Yugoslavia, tampoco Ia fundamentación histórica de la actual "comunidad
yugoslava", y aun menos las relaciones entre dichas naciones,
nacionalidades y grupos étnicos.
El problema sobre
todo croata y albanés contrarresta la situación real. Se habla de una igualdad
de todos los pueblos de esta extraña federación como comunidad multinacional.
Igual que èn el caso de Ia federación checo-eslovaca y de la URSS. Al menos, el
autor ofrece una base para ser criticada a fondo desde unos presupuestos tanto
jurídicos como prácticos. Desde luego, el tema es apasionante y, por tanto,
digno de ser tenido en cuenta por los investigadores de la situación en los
Balcanes y en Europa central.
Stefan Glejdura
La agresividad
servia queda en vigencia. Observación con motivo del septuagésimo aniversario
del atentado de Sarajevo. (Redacción de Studia Croatica)
ENTONCES en
octubre de 1912 se desencadenó una crucial y confusa guerra entre Bulgaria,
Rumania, Montenegro, Turquía, Grecia y Servia. Sólo la última sabía lo que
quería a la larga: ganar tanto en peso para poder someter a su dominación a los
croatas, a los eslovenos y a otros pequeños pueblos que acababan de escapar de
Austria. Los Habsburgos acapararon y anexaron a Bosnia y Hercegovina para
probar que no se vende el pellaje de águila de dos cabezas sino recién después
de haberlo matado. Desde este momento, Europa vive un período de constante
fiebre sostenida por un abceso purulante de los Balcanes. Rusia se alió a la
Servia para contrarrestar a Austria y Turquía. La negligente y corrompida
aristocracia de San Petersburgo trata de hacer olvidar la humillación de su
derrota frente al Japón en 1905 y desviar con una guerra el espíritu
revolucionario que vivía latente en el 'pueblo después de dicha fecha. Francia
elige en Poincaré, oriundo de Lorena, un presidente de la república autoritario
e intransigente, símbolo de la revancha. (...) Sólo dos poderes auténticamente
pacifistas pudieron impedir el drama, es decir la Iglesia y la Internacional socialista,
pero ambas fueron desviadas por las olas de odio. No hubo en toda Europa quizás
más de diez hombres con sangre fría necesaria. Entonces pudo por fin darse
posibilidad de disparo de fuego en Sarajevo.
Los eventos
tienen el siguiente calendario
1) El 28 de junio
de 1914: dos estudiantes servios, inspirados posiblemente por ciertos elementos
del gobierno de Belgrado, matan en Sarajevo el archiduque heredero de Austria,
Francisco Fernando.
Y continúa el
calendario de la estupidez humana:
2) El 22 de
julio: después de un mes de elaboración secreta de acuerdo tácito con Alemania,
Austro-Hungría envió a Servia un ultimatum rigurosamente preparado para
provocar la guerra, exigiendo públicamente cue se le permitiera investigar en
el mismo territorio de Servia acerca del atentado.
3) El 25 de
julio: Servia, a su vez, sostenida secretamente por Rusia, rechazó ciertas
cláusulas del ultimatum.
4) El 28 de
julio: Austro-Hungria declara la guerra a Servia y empieza con las
hostilidades.
5) El 30 de
julio: el zar proclama la movilización general del ejército ruso sin consultar
a sus aliados, haciendo así extender el cnflicto austro-servio al nivel
europeo. (...)
En una parte de
este articulo, su autor, Claude Mancerón, pregunta: "¿Cuáles son los
gubernantes, los hombres o grupos de hombres, quienes en cada uno de los paises
interesados presidían este lento montaje de antogonismos?".
En cuanto a
Servia el autor dice: "En Servia reinaba el rudo Pedro I Karageorgevich,
jefe de bandoleros más que rey, que acaba de destronizar a los Obrenović
por medio del asesinato".
-
Este articulo fue
publicado en 1964 con motivo de cumplirse medio siglo desde Ia Primera Guerra
Mundial en la revista "Janus", Paris, junio-setiembre. Nosotros
reproducimos sólo partes más características y en una forma abreviada. En el
año en curso -1984-- se cumplen 70 años de aquel grave acontecimiento que
convulsionó primero a Europa y luego a casi todo el mundo. Desde entonces el
mundo vive en una fiebre cada vez más alta, culminando primero en la Segunda
Guerra Mundial y colocándolo ahora en vísperas de la Tercera.
Quien se interesa
más por las verdaderas causas y consecuencias de la Primera Guerra Mundial que
estalló después del atentado en Sarajevo, le recomendamos el libro "Bosnia
y Herzegovina", edición de "Studia Croatica", Buenos Aires.
De acuerdo con
nuestro saber, no hay momentos nuevos de importancia que podrían mitigar o
cambiar la responsabilidad de Servia en este tremendo evento histórico. Su
agresividad y el deseo de conquistar, ocupar, asimilar y servizar a los
territorios y pueblos ajenos siguen en plena vigencia. Lo prueban hoy en día
Croacia, Albania y Macedonia.
(Traducción de
EFEMERON)
THE SOUTH SLAV
JOURNAL - Revista en inglés, que edita un grupo de emigrantes servios y
"yugoslavos" (eslovenos y croatas) en Londres, en su número 1 (19),
Vol. 6 del año 1983, se refiere en dos cartas al futuro de Yugoslavia.
EN la sección
"Cartas al editor", la mencionada revista publica dos cartas, que se
refieren a una entrevista que su redactor tuvo con el príncipe heredero
Alejandro y la publicó en el Vol. 5. N° 3 (17), en otoño de 1982. Este nieto de
Alejandro I, rey de Yugoslavia, asesinado en 1934, considera que la monarquía
sería un régimen apropiado para mejorar la situación en Yugoslavia. Además, es
partidario de una organización de Yugoslavia como un "commonwealth of
nations". Por ahora no ve perspectiva alguna de un cambio en la Yugoslavia
actual, y considera que esto depende de "si los pueblos de Yugoslavia son
capaces y dispuestos a proceder en conjunto para asegurarse un futuro
mejor".
En la primera
carta, Tome Brulc, de Buenos Aires, dice que "Yugoslavia es una entidad
artificial, y comprende pueblos de diferente religión, diferente cultura,
diferentes grados de desarrollo y una historia a veces mutuamente hostil".
Parecía que en 1918, cuando se creó Yugoslavia, estas diferencias habían sido
superadas, pero por el contrario "el desencanto venía creciendo hasta
1941, cuando irrumpió en toda su vehemencia. Esto comprobó que el nuevo Estado,
compuesto de varias naciones y de varias religiones, era una imposibilidad, que
no tenía razón alguna para existir y que nadie fue dispuesto a defenderla. La
clave para Yugoslavia es el problema de Croacia, y Ia segunda Yugoslavia, igual
que la primera, ha cometido los mismos errores, y, además, está basada en las
masacres de 1945". Brulc manifiesta que tiene la impresión de que el
príncipe Alejandro seria dispuesto a negociar con los comunistas la transición
del poder a un régimen democrático, pero no cree que los pueblos de Yugoslavia
están preparados para aceptar discusión alguna. En cuanto a la Liga de los
comunistas de Yugoslavia, pregunta si el príncipe cree que ellos "merecen
la credibilidad y que inspiran confianza, pues han demostrado lo
contrario". Luego sigue enumerando los problemas que se presentan a
Yugoslavia: "Los asesinatos masivos cometidos por Tito, el problema de
Kosovo, Ias deudas yugoslavas, la idea de los croatas de un Estado
independiente, la cuestión de Bosnia y Herzegovina, el nuevo sistema social, el
odio entre los croatas y los servios", y pregunta si el príncipe Alejandro
"está seguro de poder hacer algo por los pueblos de Yugoslavia y resoiver
estos problemas". Y continúa: "La mayor dificultad actual de
Yugoslavia consiste en cómo olvidar el odio mutuo entre los croatas y los
servios. Si ellos no han podido vivir juntos antes, la probabilidad de que lo
podrían hacer en el futuro es ahora aún más tenue". Brulc termina
diciendo: "Sin embargo, es de esperar devotamente que ellos encontrarán
algún camino de salida de esta situación sin derramar sangre".
De todos los
problemas que se le presentan a Yugoslavia y la aquejan —como dice Brulc—,
mencionando sólo una parte, puede concluirse fácilmente su no viabilidad. Sin
embargo, él no propone la disolución de Yugoslavia en varios Estados
independientes, aunque parece que no sería contrario a esta solución, si a ella
pudiera llegarse sin derramamiento de sangre.
Para los croatas
la única salvación del peligro de su desaparición biológica es el Estado de
Croacia independiente. Los croatas han tenido pésima experiencia con los
servios en la primera y la segunda Yugoslavia para que pudiesen esperar algo
diferente en una tercera de cualquier signo que ella fuera.
En la otra carta,
George Grlica, de Ginebra (Suiza) considera que los principios mencionados por
el príncipe Alejandro son —"a primera vista"— correctos. El por lo
tanto acepta una tercera Yugoslavia, aunque con la salvedad de que "los
croatas deben tener sus propias fuerzas armadas con el propio comando supremo y
la policia propia. Esto es —continúa Grlica— un sine qua non, pues la
credibilidad en la palabra de los servios —una promesa o un convenio escrito—
es de muy poco valor para los croatas". Grlica se refirió de este modo a
la declaración del príncipe Alejandro quien consideraba que las fuerzas armadas
de Yugoslavia deberían ser organizadas como en Inglaterra, de modo que habría
regimientos croatas, macedonios, etc., pero admite la posibilidad de que cada
pueblo tenga sus propias fuerzas armadas, si así se "decide
democráticamente". Grlica hace también hincapié a las fronteras y dice que
Srijem y Boka Kotorska deben volver a Croacia, y en cuanto a la región de
Sandzak admite que podría ser discutida entre los croatas y los servios.
Grlica confiesa
que "tiene la impresión de que si los servios tuvieran un interés honesto
en transformar a Yugoslavia en una confederación libre, democrática y genuina,
los croatas podrían tener interés en ello en las actuales circunstancias que
están prevaleciendo en ese área. Pero la iniciativa debe venir de parte de los
servios".
No sabemos en qué
Grlica funda esa impresión. No vemos que las actuales circunstancias sean
diferentes de las que precedieron a la "primavera croata" en 1971
cuando todos los croatas han experimentado como un primer sabor de libertad y
que por lo tanto no pueden tener interés en una tercera Yugoslavia sea ésta
monárquica o republicana. Es la verdad, G. Grlica señala que esta es su opinión
personal y no compromete a nadie. ¡Menos mal!
Por Vladimir
Ciprin[46]
En la prestigiosa
revista musical "PROMUSICA", editada en Buenos Aires, bajo la
dirección de Jorge Martinez de León (subdirector es Juan Vasle), salió en el
número 19 del mes de abril del corriente año este articulo del señor Vladimir
Ciprin sobre la famosa ópera croata "Ero, el pícaro", del compositor
Jakov Gotovac. En la revista "PROMUSICA" colaboran los mejores
críticos musicales argentinos, entre otros Napoleón Cabrera, Pompeyo Camps,
Abel López Iturbe, Ricardo Turro, Ana Lucia Frega (Directora del Instituto
Superior de Arte del Teatro Colón). Reproducimos este artículo gracias a la
autorización del directorio de "PROMUSICA":
Hace tres años
tuve noticias de que la dirección del Teatro Colón tenía en su poder la
partitura de la ópera "Ero el pícaro" del compositor croata Jakov
Gotovac y también una grabación realizada en Zagreb.
Gotovac, que falleció
hace dos años, fue director de la Opera Estable de Zagreb. Compuso numerosas
piezas sinfónico-corales y también varias óperas. La que alcanzó mayor suceso
fue "Ero el pícaro" que lleva más de dos mil representaciones en
Croacia e importantes centros líricos de todo el mundo, entre ellos Roma,
Moscú, Londres, Helsinki, El Cairo, Tokio y Osaka. Además fue traducida a diez
idiomas.
A principios de
1981 al no tener novedades sobre el material, escribí a Gotovac a Zagreb
solicitándole que me informara sobre su ópera. Consideré que la representación
de "Ero el pícaro" en Buenos Aires sería muy importante para la
carrera del compositor y para la cultura musical croata. Gotovac respondió a mi
carta con fecha 21 de enero de 1981, detallando los esfuerzos que se habían
realizado para que su ópera integrara alguna temporada en el Teatro Colón. El
promotor de la iniciativa fue el regisseur esloveno Emil Frelih, quien había
dirigido escénicamente "La novia vendida" de Smetana, en el Teatro
Argentino de La Plata. Frelih hizo gestiones ante el entonces director del
Teatro Colón Enrique Sivieri, para que "Ero el pícaro" subiera a
escena en el Colón. A tal efecto dejó la partitura para canto y piano, una
sinta magnetofónica, junto con otros datos y antecedentes. "Sivieri falleció
y nada más se supo de mi ópera", escribió Gotovac.
Al recibir esta
carta llamé por teléfono a Frelih, quien me informó que el director de orquesta
Mariano Drago lo había visitado hacía algunos dias. Inmediatamente fui a ver a
Drago. No pudo atenderme porque padecía una afección cardíaca. Repuesto, fue a
pasar unos días al campo y posteriormente viajó a Yugoslavia. Fui a la
secretaría del Teatro Colón para reclamar el material dejado por Frelih. Al mes
me informaron que en el archivo no estaba ni la partitura ni los discos.
Mientras tanto me llegó una segunda carta de Gotovac fechada el 21 de marzo de
1981 comunicándome que me había enviado por correo Ia partitura para piano y
los discos de "Ero el pícaro". Contesté a Gotovac y le informé sobre
los infructuosos esfuerzos realizados hasta ese momento. Además le solicité que
me enviara las críticas que "Ero el pícaro" había merecido en los
países donde fue representada y los nombres de los directores de orquesta y
regisseurs que la condujeron. Consideré que estos datos eran indispensables
para que !a dirección del Colón se convenciera de los indiscutibles méritos de
la ópera de Gotovac. La respuesta nunca llegó. El maestro Gotovac falleció a
fines de 1982.
En el caso de que
las actuales autoridades del Teatro Colón tuvieran interés en la ópera de
Gotovac, con mucho gusto pondría a su disposición Ia partitura para canto y
piano y los discos de mi propiedad, además de todos los datos necesarios en
materia de regie, escenografía, puesta en escena y los trajes del coro.
Durante semanas,
tres mil periodistas extranjeros permanecieron informando sobre las Olimpíadas
de Invierno, sin darse cuenta de que bajo sus propias narices la policía
política bosniana silenciaba a los espíritus libres y críticos de la República.
La policía
hostigó especialmente al Dr. Vojislav Seselj, científico joven y muy franco en
cuanto a política, de la Universidad de Sarajevo. Sorprendían constante-mente a
sus amigos, llamándolos para interrogarlos acerca de él y de sus actividades.
En la cancha de
las Olimpíadas se dio la orden de prohibir a Sabina Berberovic, de 26 años, el
derecho a asistir a los partidos. Su padre era uno de los 12 devotos musulmanes
que fueron sentenciados a un total de 90 años de prisión, el otoño pasado, en
uno de los juicios más publicitados que se hayan presenciado en la comunista
Yugoslavia.
Dos días después
de esta humillación, la señora Berberovic sufrió un aborto, y tuvo que ser
llevada de urgencia al hospital. El punto era de que la señora Berberovic
hubiera podido hablar con los periodistas extranjeros para contarles lo del
juicio, que el Dr. Seselj había comentado públicamente como "un inmenso
escándalo", además de informarles las horribles represiones de la policía
a ese respecto.
La campaña
política de la policía contra el Dr. Seselj fue sincronizada para coincidir
precisamente con el partido que se sabía contaría con audiencia universal a
través de la televisión, calculándose que la verían no menos de mil millones de
personas.
Tan solo una hora
antes de que las cámaras enfocaran a los primeros esquia-dores que se
precipitaban por las laderas de las montañas cerca de Sarajevo, el Dr. Seselj
fue arrestado por la policía.
Cuatro hombres lo
siguieron cuando partía de madrugada a tomar el tren a Belgrado. A los quince
minutos de partir, se introdujeron en su compartimento, le ordenaron abrir sus
maletas y le confiscaron 21 manuscritos que destinaba a los periódicos y a las
editoras.
Entre los
manuscritos confiscados se encontraba un artículo para la revista
"Theoria", de Belgrado. Sus oficinas se habían quejado en repetidas
ocasiones de que el texto que él enviaba no llegaba, suponiéndose que había
sido interceptado por la policía local.
La policía
demostró un meticuloso cuidado. El juez que juzgara la criminalidad de los
manuscritos del Dr. Seselj no podia tener duda alguna acerca de su autoria. Se
ordenó al Dr. autentificar las 321 páginas antes de bajarlo a la fuerza del
tren.
La polica no
demostró tanta sensibilidad en cuanto a consideraciones legales. No presentaron
orden de allanamiento y el académico fue retenido por un período excesivo de
tiempo, sin mayor explicación.
El Dr. Seselj fue
llevado velozmente de regreso a Sarajevo, donde las Olimpíadas estaban en pleno
desarrollo.
Un periodista al
pasar no se habría fijado en ese hombre alto y delgado que se doblaba para
bajar del automóvil de Ia policía frente al Cuartel General de la ciudad. Fue
introducido en el edificio por una entrada subterránea y llevado inmediatamente
hasta el tercer piso para ser interrogado.
Al caer la tarde
fue llevado a su departamento para recoger sus manuscritos, lo que demoró tres
horas. Por la noche, la policía lo escoltó hasta la universidad para seguir
investigando su oficina durante otras tres horas.
Toda su obra,
escrita durante tres o cuatro años, fue reunida, incluyendo cartas, notas de su
esposa y artículos sobre Yugoslavia escritos por un corresponsal extranjero.
Fue fotografiado con cada documento en la mano. En su hogar, la policía lo
filmó a todo color, registrando también su voz, a medida que identificaba lo
que ellos retiraban.
Una vez en la
comisaría, Seselj fue sometido a un implacable interrogatorio acerca de sus amigos,
no sólo los de Sarajevo, sino también los de Belgrado y de Zagreb.
El sistema de
interrogatorio parecía seguir las indicaciones de un manual, que utilizaba
tanto los cebos como los acicates.
La policía lo
amenazó con que sería encarcelado por cinco años si no cooperaba, y que
perdería su cargo en la Universidad y su departamento. Hablaron de su esposa
Vesna, que lo tenía muy preocupado por estar ya en el sexto mes de un
complicado y peligroso embarazo.
Solicitaban cosas
concretas. Querían que entregara información escrita respecto de sus amigos,
que cortara inmediatamente todo contacto con ellos, tanto en Zagreb. corno en
Belgrado, que destruyera inmediatamente todos sus manuscritos y retirara
aquellos que ya estaban en prensa.
A cambio de todo
esto se le dijo que estaban dispuestos a mejorar su situación en la
Universidad. Volvería a su cargo de conferencista en la Facultad de Ciencias
Políticas y volveria a ser miembro del Partido Comunista con todos los
privilegios que eso implica.
En la primera
sesión se le mantuvo durante 27 horas sin comer ni dormir. Sólo se le permitió
regresar a su hogar cuando, ya exhausto, prometió no dar información acerca de
lo ocurrido hasta después de la clausura de las Olimpíadas y no aceptar
entrevistas con los corresponsales.
La última sesión
con Ia policia de Sarajevo, antes que Seselj llegara a Belgrado para avisar a
sus amigos fue algunas horas después del término de Ias Olimpiadas, cuando ya
los periodistas subían al avión de regreso a sus paises. Quizás la mayor ironía
para los corresponsales occidentales en Sarajevo fue la felicitación del
presidente del comité de organización de los Juegos, Branko Mikulic, que es
casi seguro que representará a Bosnia en la nueva presidencia de Yugoslavia.
"Nos complace
que los mensajes que ustedes enviaron desde Sarajevo sean mensajes de paz, de
cooperación y de amistad para con todos los pueblos...".
Esto se los dijo
en su última conferencia de prensa justo antes que Seselj fuera llamado para su
último interrogatorio de cuatro horas y media.
Peter Ristic,
Belgrado (exclusivo para "El Mercurio", Santiago de Chile, 16-4-1984)
Amigo profesional
o empresario argentino-croata:
Es bien sabido
que hoy Ia colectividad croata en la República Argentina comprende un número
significativo de personas. A mediados de este siglo el grupo étnico croata fue
enriquecido con una nueva inmigración, política, altamente capacitada y formada
en los valores morales, patrióticos y profesionales. Esto le dio un nuevo
impulso a la colectividad croata. Nuestra identidad nacional ya no es
confundida con nombres regionales; nuestro destino como nación, los valores de
nuestra cultura y los propósitos liberadores de nuestra lucha patriótica son
día a dia mejor conocidos y .más justificados, gracias a los valiosos aportes
del nombre croata integrado en la sociedad argentina.
Como resultado de
este laborioso ascender contamos hoy con jóvenes profesionales y numerosos
empresarios de origen croata, varios de ellos ya públicamente reconocidos por
su capacidad y desempeño, pero que todavia no cuentan con una organización
propia que aune sus esfuerzos personales hacia metas comunes.
Este vacío, entre
las múltiples sociedades croatas en la República Argentina, debe ser llenado
por una ASOCIACION DE PROFESIONALES Y EMPRESARIOS ARGENTINO-CROATAS que nos
proponemos organizar, alentados por Ia unánime convicción de su necesidad
manifestada en un amplio grupo de apoyo a este plan organizativo.
Los fines de la
Asociación proyectada serían:
a) Promover entre
los asociados el conocimiento de las realidades nacionales croatas y
argentinas, así como sus legitimas aspiraciones a la libertad, integridad y
soberania nacional.
b) Profundizar el
estudio de la problemática de Ia inmigración croata en Ia Argentina, postulando
soluciones eficaces acordes a los resultados obtenidos de dichos estudios.
c) Promover el
bienestar general de sus miembros en su accionar como integrantes de la
comunidad argentina, respetando la idiosincracia e intereses legítimos de ambas
naciones, tendiente a un mutuo conocimiento y enriquecimiento cultural.
d) Difundir
estudios e investigaciones así como también trabajos congruentes con los fines
de ia Asociación mediante publicaciones, seminarios, cursos, conferencias,
simposios, etc.
e) Establecer
vinculaciones con otros organismos argentinos o croatas en toda la República
Argentina, incluyendo particúlarmente Ias capitales y ciudades donde viven, a
veces en grupos numerosos pero aislados, nuestros compatriotas. Asimismo
vincularse con los numerosos descencientes croatas en toda Hispanoamérica y en
el mundo, para establecer intercambios culturales, profesionales y económicos.
El cuadro de
estos fines demuestra la multiplicidad de tareas que podria realizar la
Asociación proyectada para el bien socioeconómico de sus miembros y como aporte
a toda la colectividad croata. Con fe y visión de futuro, con trabajo de equipo
bien organizado, podríamos contribuir efectivamente a la grandeza de nuestra
Patria Argentina y afirmarnos como dignos representantes de Croacia la Patria
de nuestros antepasados.
Los invitamos,
pues, a contribuir con su adhesión, con sus ideas, sugerencias y trabajo
constructivo, liberados de sectarismos y dirigidos hacia altos fines
nacionales, para constituir, dar vida y dinámica a la organización proyectada.
¡El éxito está en
nuestras manos!
Buenos Aires,
agosto de 1983
GRUPO ORGANIZADOR
DE LA ASOCIACION DE PROFESIONALES Y EMPRESARIOS ARGENTINO-CROATAS
(La dirección de
la Asociación de Profesionales y Empresarios Argentino-Croatas es: Benjamín
Matienzo 2532 - 1426 BUENOS AIRES, ARGENTINA)
(Encuentros y
acontecimientos vividos Período desde 1938 hasta 1975, según mis recuerdos),
Tomo segundo: 1945-1975, Munich - Barcelona, 1983. Edición de la Biblioteca de
la Revista Croata, pp. 586.
En 1970 reseñamos
el primer tomo de Ias memorias de Ivo Rojnica: "Encuentros y
acontecimientos vividos entre 1938-1945", publicadas por la misma
editorial en el año 1969 (Ver: STUDIA CROATICA, Nro. 36-37/1970, pág. 79-82).
Casi quince años después, Rojnica presenta al público lector el segundo tomo de
sus memorias que comprenden treinta años de su vida y actividad política
subsiguientes al éxodo de Croacia en 1945, luego de la desfavorable terminación
de la Segunda Guerra Mundial para el Estado Independiente de Croacia, cuya
creación y posterior defensa durante cuatro años de guerra (1941-1945), ha sido
el objeto principal del primer tomo. El autor ha dedicado el primer tomo a la
juventud croata que no tuvo la oportunidad de conocer el difícil pero glorioso
período de nuestra Soberania nacional, mientras que el segundo tomo lo dedica
al pueblo croata en diáspora y en Patria.
En general, la
obra se divide en cuatro partes. En la primera parte, intitulada "A través
de Austria e Italia", el autor describe el dramático éxodo de los croatas
hacia Austria al finalizar la Segunda Guerra Mundial, y en este marco relata
sus vivencias personales, cuando en Lavamünd, ya en Austria, pierde el contacto
con su esposa e hijita de apenas algunos meses y tiene que proseguir solo con
su hijo de cuatro años, junto con unos amigos, en procura de seguridad en Ias
zonas ocupadas por los ingleses en Austria. Después de caminar varios días,
llega al pueblo Krumpendorf, donde por casualidad se entera por un médico, que
su esposa e hija se han salvado de la extradición a Yugoslavia y como fueron
enviadas en tren a Italia. Luego se entera por un sacerdote croata que su
familia se halla en el campo de refugiados en Reggio Emilia, Modena. A través
de varias vicisitudes llega a Italia y se reúne finalmente con su mujer e hijita,
en el campo de refugiados de Fermo. Varias veces viaja a Trieste para recabar
informes de la gente que viaja a Yugoslavia sobre la suerte que corrió el resto
de sus familiares en la patria. Durante uno de estos viajes lo detienen. El
peligro de extradición a Yugoslavia es inminente. En la cárcel empieza a fingir
locura, con lo cual consigue el traslado a un manicomio de donde logra huir. Es
conmovedora la descripción de la fuga desde Trieste hasta Fermo, y la estadía
en la cercanía del campo de refugiados y en el campo mismo con el permanente
peligro de captura. Rojnica se traslada finalmente a Roma, donde un sacerdote
croata le ayuda obtener documentos personales y el pasaje para el buque
"Philipa". Sin embargo, un presentimiento lo impulsa a cambiar de
planes y embarcarse como simple "marinero" en un carguero que lo trae
el 31 de marzo de 1947 al puerto de Buenos Aires, después de treinta y cinco
días de travesía. Ahí se entera que algunos de los pasajeros croatas embarcados
en "Philipa" fueron capturados por los ingleses y enviados a
Yugoslavia.
En el segundo
capítulo, que intitula "Nueva vida en el nuevo mundo", el autor
describe sus primeras impresiones del nuevo ambiente y la vida de los primeros
inmigrantes croatas en la Argentina. En Buenos Aires aprende el oficio de
tejedor y se dedica a la industria del tejido de punto. Ayudado por un
compatriota, también oriundo de su Cista natal, logra juntar a la familia
después de siete meses de separación. En 1950 empieza a participar en Ias
primeras actividades socio-políticas de los nuevos inmigrados. Dado que las
antiguas organizaciones políticas no se adecuaban más a la nueva realidad
política, Rojnica se adhirió al grupo que se proponía formar un nuevo partido
político croata en el exilio. Así lo vemos participar en la constitución del
Partido Republicano Croata el 6 de enero de 1951, bajo la presidencia del
profesor Juan Oršanić, donde colabora durante siete años. En el ínterin
realiza su idea de inaugurar Ia emisión croata en Radio Splendid (La hora croata),
ayudado por el Coro croata "Jadran" con su director profesor Antonio
Kopitović y el reverendo Mateo Luketa en la parte técnica. A renglón
seguido Rojnica describe su participación, en 1956, en la fundación del Club
Cultural Croata-Argentino que sigue funcionando hasta hoy en día. Decepcionado
con la orientación política prevaleciente en el Partido Republicano Croata, se
separa del mismo en 1958.
La ruptura con el
Partido Republicano Croata encamina su actividad en otros rumbos positivos,
pues le posibilitó que Rojnica realizara otras iniciativas a favor de la causa
croata.
En la tercera
parte de sus memorias, que intitula "La consecuencia positiva de la
decepción", Rojnica describe ia fundación de la revista "Studia
Croatica", y del Instituto Croata Latinoamericano de Cultura como ente
patrocinante de la revista, hecho acaecido en 1960. Entre Ias ediciones
especiales del Instituto, el autor destaca el libro "La Tragedia de
Bleiburg", y su presentación en Buenos Aires en 1963. Luego, en 1965, con
motivo del quincuagésimo aniversario del estallido de la Primera Guerra
Mundial, el Instituto publica un número especial (Nro. 16-19) de la revista
"Studia Croatica", también en forma de libro, con el título
"Bosnia y Herzegovina - Aportes al esclarecimiento del origen de la
Primera Guerra Mundial". Este libro fue presentado al público en noviembre
de 1965. Una de sus iniciativas iniciales fue un compendio sobre Croacia en
castellano. Este propósito se torna realidad recién en 1977 cuando aparece el
libro "Croacia y su destino".
Rojnica relata
también sus conversaciones con los dignatarios eclesiásticos croatas en Roma
durante el Concilio Vaticano II; se refiere a su relación con el Rotary Club en
la Argentina; a su viaje a Europa en 1966, y a sus conversaciones con hombres
políticos croatas, especialmente con el doctor Juraj Krnjević, presidente
del Partido Campesino Croata, a quien trató de persuadir para que encabezara un
frente nacional en el exilio. Luego se ocupa del "caso Nikolić",
o sea de la expulsión, a instigación del servicio secreto yugoslavo, de Francia
del profesor Vinko Nikolić, director de La Revista Croata, que se
había trasladado en 1968 de Buenos Aires a París, para seguir editando su
revista en Europa, y de Ias medidas tomadas por la Sociedad Argentina de
Escritores en favor del profesor Nikolić. Nos enteramos asimismo del
"caso Draganović", o sea del secuestro a manos del servicio
secreto yugoslavo del profesor Krunoslav Draganović en Italia en 1967 y de
su posterior reaparición forzada en Yugoslavia, y de la conferencia de prensa
al respecto, organizada por el Instituto Croata Latinoamericano de Cultura
en Buenos Aires.
Rojnica viaja
nuevamente a Europa en 1968, y en su libro nos informa sobre sus conversaciones
que giran en torno de una organización representativa de todos los croatas en
el exilio. La idea de la formación de un bloque extrapartidario baja el
liderazgo del doctor Krnjević, presidente del Partido Campesino Croata, o
de un grupo de politicos croatas independientes, urge a Rojnica a buscar
contactos y encuentros con los croatas radicados en el mundo libre: En este
sentido dirige cartas a prominentes croatas y a los jóvenes dirigentes que
huyeron de Yugoslavia después de la cruel liquidación de la "Primavera
croata" por Tito en 1971, con los cuales establece -contacto y diálogo
(Bruno Bušić, posteriormente asesinado en 1978 por el servicio secreto
yugoslavo, y Zlatko Markus).
En 1970 llega a
establecer contacto con el destituido alcalde comunista de Zagreb,
Većeslav Holjevac, y prepara todo para una entrevista con él en un país
europeo. Pero Holjevac fallece repentinamente el mismo día de la entrevista
concertada. En 1971 Rojnica participa en el simposio, en Lucerna, Suiza,
organizado por; La Revista Croata (profesor V. Nikolić), con varios
intelectuales croatas exilados y venidos de la patria: También participa en la.
celebración del vigésimo aniversario de La Revista Croata en Brugg, Suiza. En
todas estas ocasiones Rojnica manifiesta su firme opinión que los trabajadores
temporarios croatas en los paises europeos deberían invertir sus ahorros en la
economia de Croacia, preparando así su regreso a la patria, y no en los bancos
extranjeros. En estas ocasiones, Rojnica insiste en la confección de un plan
general nacional-político que amalgamaría a todas las fuerzas políticas croatas
en el exilio.
El autor, en un
capitulo, revela pormenores sobre la historia de la Argentina, que en 1974
publica en Buenos Aires, en el idioma croata, con el titulo "Panorama de
Ia historia argentina y el aporte croata". Este libro fue presentado en
1974 en el Club Cultural Croata-Argentino (véase Studia Croatica, N°
54-55/1974).
Las cosas maduran
con el tiempo y a principios de febrero de 1974, cuatro organizaciones
políticas croatas forman en Toronto, Canadá, el Consejo Nacional Croata y
eligen las autoridades provisionales hasta que se celebren elecciones dentro de
un año. Pareciera que con ello el anhelo de tantos años de Rojnica y de sus
amigos por fin se hace realidad. No obstante, no fue así. El nuevo ente politico
acusaba deficiencias, principalmente por no abarcar en su seno a ciertas
organizaciones y a intelectuales independientes, como ser Ias publicaciones
"Nova Hrvatska" (La Nueva Croacia) de Londres, "Hrvatska
Revija" (La Revista Croata) de Barcelona y "Studia Croatica" de
Buenos Aires. Rojnica se convierte ahora en coordinador de los esfuerzos
tendientes a efectuar la adhesión de las tres mencionadas publicaciones al
Consejo Nacional Croata.
Sus gestiones,
viajes y conversaciones los relata Rojnica en la cuarta parte de sus memorias
que lleva por título "Concentración general croata en el Consejo Nacional
Croata". La reunión de la asamblea general (Sabor) del Consejo Nacional
Croata en Toronto, Canadá, en setiembre de 1975, luego de las elecciones realizadas
a través de las organizaciones formadas mientras tanto en todo el mundo,
representa el broche de oro de los esfuerzos de varios años para formar un ente
politico general croata en Ia diáspora. En estos esfuerzos Rojnica ha jugado un
papel prominente con su empeñe personal, moral y financiero a lo largo de los
casi treinta años de su vida en la Argentina, como lo atestigua este libro de
sus memorias que concluyen con la realización de la Asamblea de Toronto en
1975.
AI terminar sus
memorias el autor agrega un capítulo, intitulado "Enseñanza y
mensaje", con el cual se dirige a la juventud croata, destacando sus
principios e ideales puestos al servicio de su nación croata, según el lema:
¡Tengo el honor de estar al servicio de mi patria Croacia!
El libro
"Encuentros y acontecimientos vividos", tomo segundo, está escrito
con un estilo vivaz, directo y ameno, sin pretensiones literarias, aunque
algunas secciones, especialmente en la primera parte, demuestran
características novelísticas de hondo dramatismo literario. Por su contenido el
libro constituye una rica fuente de información histórica en cuanto a la vida
política y social de la diáspora croata en la Argentina y en el mundo. Por
ello, el futuro historiador del exilio politico croata no podrá pasar por alto
este libro de memorias en busca de las fuentes e informaciones sobre ia
reciente historia croata que todavía falta explorar.
Además del
interesante material ilustrativo, el Libro contiene una amplia nota
bibliográfica del autor escrita por el profesor Vinko Nikolić, y un
registro muy completo de personas.
Como todas las
ediciones de la Biblioteca de La Revista Croata, también este libro ha sido
expuesto en la Feria Internacional del Libro en Francfort del Meno, Alemania,
en octubre de 1983. En Buenos Aires, el libro de memorias de lvo Rojnica fue
presentado al público croata por el Dr. Radovan Latković, presidente del
Instituto Croata Latinoamericano de Cultura, en el Club Cultural Croata
Argentino, el 17 de diciembre de 1983.
Milan Blažeković
(en croata),
Chicago 1983, 138 páginas.
Para exponer el
variado contenido de este libro, necesitaríamos escribir un libro nuevo y de un
volumen no menor al del epígrafe. Todo constituye una cadena. Una lógica férrea
y, como la cadena se rompe —si se rompe un eslabón—, así en esta obra, si se
omite una o pocas proposiciones, la totalidad se torna incomprensible. Por la
misma razón se exige una intensa atención al leerlo y gran familiaridad con el
modo de pensar de su autor. Debemos, por ello, limitarnos a lo esencial.
Vasilj considera
que la religión es de importancia existencial para todos y cada uno de los
hombres. "El hombre vive bien espiritualmente, si vive según la
verdad", dice textualmente. Para que el autor pueda realizarse, y
liberarse de toda la alienación, es necesario ver, si es posible y útil
liberarse de la alienación religiosa. Sólo liberándose de ella es posible
liberarse de los demás Si la religión no descansa sobre la verdad, entonces nos
aliena y carece de todo sentido real. Hay muchos que le niegan este sentido y
el valor, por lo cual es necesario examinar sus argumentos y restituir el valor
prístino de la religión y restablecer el orden de un mundo de alienaciones.
Este es el motivo
principal, por el cual el autor entabla un "diálogo lógico" con los
empiristas y los positivistas lógicos, quienes son los más listos en negar a la
religión todo sentido, tanto en el aspecto natural cuanto en el metáfisico y
sobrenatural. Aportar algo a ia verdad de la religión es el objetivo primordial
de nuestro autor.
El hombre, arguye
él, encuentra en si dos tipos de hechos de carácter empírico. Muchos sienten
que la persona humana es capaz para creer en su destino metafísico y, de
acuerdo con esta creencia, modelar su vida personal-individual y social. Pero,
asimismo se conocen como seres fisicamente mortales y sin encontrar en ello
contradicción alguna.
Teniendo presente
estos dos hechos, surge la cuestión: ¿qué es lo que nos autoriza a pensar en
nuestro destino metafísico? ¿Cómo el hombre puede convencerse que hay un
destino de vida sempiterno, si la experiencia física nos dice, que todo termina
en el sepulcro?
El autor entonces
intenta Ia conciliación, para muchos real, de los dos hechos y acercarnos a la
idea religiosa que supera el triste destino de sepulcro.
El cosmos es una
constante de materia y energia a pesar de todos los cambios en él. Se gasta y
se disuelve en sus elementos constitutivos, pero el hombre se siente en sí sin
cesar y a pesar de todos tos cambios, como un ser idéntico a si mismo. Además,
el principio del conocimiento humano se conoce "como unicidad-homogeneidad
interna". Si fuera compuesto de dos o más principios diferentes, el
conocimiento humano no podría conocer a si mismo como una "unicidad-homogeneidad",
como tampoco podría conocer a otros seres en su "singularidad y su
totalidad". A causa de esta composición de diferentes elementos y
principios, el cosmos físico no puede despertar de ninguna manera la idea de si
mismo, de su propia realidad. Sólo un ser idéntico consigo mismo y de una
simplicidad metafísica puede hacerse consciente de su realidad. "Existir
físicamente en el tiempo —dice Vasilj— significa perder o recibir en su ser
interno, pero existir en el tiempo en ia forma metafísica significa guardar y
conservar todo su ser sin ningún menoscabo a pesar de todos los cambios de su
ser".
Si la muerte del
ser humano no involucra en si ninguna contradicción desde el punto de vista de
su composición de varios elementos, ella sí representa la contradición y la más
grave tragedia en el Universo desde el punto de vista del supremo fin de la
existencia humana. Existir sólo en el orden natural del hombre, no permite
lógicamente tantos sufrimientos y la muerte, durante tan larga historia de la
humanidad. Estos sufrimientos no son conciliables con la idea de Dios y el más
alto fin de la vida humana. Por el contrario, entonces todo parece absurdo. Por
ello surge un insuperable conflicto entre el fin tan absurdo y frustrado de la
vida humana y su seguridad lógica de que debe tener otro sentido, justamente
metafísico. (No es éste el argumento postulatorio que para nuestro autor es
absolutamente inválido? N.O.)
En este dilema
residen el fundamento y la razón para dirigirnos a la religión y pedirle el
consejo y una aclaración. Quizá ella no daría suficiente luz para poder
eliminar la contradicción y restituir a la vida humana un sentido digno de este
concepto.
Para conseguir
este abjetivo se nos entrecruzan ciertas formas científicas y filosóficas. En
efecto, en el subtitulo —La ciencia real y de moda— el autor advierte que hay
una manera de pensar en boga, donde los científicos tratan de extender las
consecuencias de uno o varios hechos científicos nuevos hasta el extremo, sin
preguntar, si las mismas están en conflicto con los hechos comprobables en la
empiria, o de aquellos cuyo pensar lógico está en plena conformidad con
principios más rigurosos de la lógica. Así, por ejemplo; hay científicos que
deducen conclusiones desde biología de Darwin a pesar de que la biología
moderna ha superado muchos resultados. Un día surgirá un nuevo genio que
someterá a la crítica la teoria de la relatividad de Einstein, pues la historia
de la ciencia es la historia de los errores. Vasilj, por esta razón, divide a
los científicos en creadores y no creadores. Los últimos acumulan y enumeran un
cúmulo de hechos sin comprender la totalidad, pues aceptan como válidos sólo
juicios sintéticos. Confiado en ellos, la teoria darwiniana se convierte en
filosofía darwiniana según la cual los seres vivos son solamente una nueva
forma de la organización de la materia, olvidando que aquí se trata de un nuevo
principio y de un nuevo ser frente a la materia. Por esta razón tratan de crear
la vida o seres vivos de la materia, lo que no consiguen y no conseguirán, pues
los seres vivos presentan un ser originario y completamente nuevo,
específicamente diferente de la matéria. autor llama este intento
"éshatonbiológico". Se emprenden pasos grandes y difíciles en vano,
pero la esperanza no los abandona.
En el capítulo II
—El empirismo, el empirismo lógico y el conocimiento de la realidad— el autor
aclara la relación del empirismo lógico de Kant y al empirismo verdaderamente
no ético.. Si las categorías lógicas -12 en total— de Kant tienen valor para
sintetizar y sistematizar el mundo fenomenológico, excluyendo la posibilidad
del conocimiento a priori y si no sabemos dar una justificación adecuada a
nuestro saber apriorístico o sistólico, entonces la metafísica no es posible
dentro del pensar kantiano y de sus seguidores, ni tampoco dentro de las leyes
de la lógica real y de sus principios.
Criticando el
empirismo, no quiere excluirlo completamente. Vasilj se declara empirista. No
obstante, acentúa una diferencia sustancial entre el empirismo absoluto y su
empirismo relativo. "Yo entiendo, dice nuestro autor, el concepto de la
experiencia como la unión entre la intuición intelectual y la percepción
sensorial (...)". "Entre mi concepto empírico-espiritual y aquel de
los positivistas empíricos hay una diferencia de principio. Coincidimos pues
sólo parcialmente. Cuando yo digo que soy empirista, entonces bajo el concepto
de empirismo entiendo no sólo la percepción sensorial sino además la intuición
intelectual de Ias cosas. Cuando los empiristas dicen que son empiristas,
entonces bajo el concepto de empirismo captan sólo la percepción
sensorial". Es evidente entonces que la diferencia entre dos clases del
empirismo involucran consecuencias fundamentales. Los primeros admiten y
comprueban la posibilidad de la metafísica y los segundos la niegan en
absoluto. "Por eso, dice textualmente nuestro autor— cuando un ser
puramente sensorial observa una cosa y cuando lo mismo hace una persona humana,
no es lo mismo, pues esta última ve algo más que las percepciones
sensoriales". "Kant no era consciente de esta distinción por lo cual
niega la metafísica y por la misma razón no aceptó el realismo trascendental
pero si el idealismo trascendental. Kant y sus seguidores proporcionan al
empirismo y al empirismo lógico un nuevo aliento y apoyo, negando toda la
posibilidad de la ciencia metafísica y, consecuentemente, toda la posibilidad
del conocimiento religioso".
El segundo error
de la filosofia de Kant, Vasilj lo encuentra en la idea del filósofo alemás
según la cual la etnología trascendental es un "caso especial" de la
metafísica, mientras la misma es sólo un apoyo profísico del saber humano. Por
el mismo error, Vasilj rechaza la filosofía de Newton, de Darwin, de Hegel y de
Marx. Es especialmente interesante la opinión de Vasilj en cuanto a lo tocante
a la filosofía de este último. "El capitalismo burgués es un mal, pero el
capitalismo estatal y el totalitarismo son males mayores. Los marxistas
reprochan a los hombres religiosos la persecuciones en nombre de la religión,
olvidando que ellos mismos gozaban de bastante libertad en las sociedades
religiosas, lo que les permitía desarrollar sus teorías irreligiosas y, una vez
en el poder, tratan de eliminar la religión de la vida social y suplirla con su
materialismo dialéstico" (...) "En cambio (respetar la opinión
diferente e incluso contraria. N.O.) proceden como totalitarios de la sociedad
cuando para la propaganda de su doctrina se apropian de las escuelas que, por
su definición, pertenecen a todo el pueblo, y Ias tratan coma si fuesen sus
seminarios".
Luego el autor se
detiene sobre la diferencia entre los llamados juicios sístoles libres ex y
reales. Estos últimos deben descansar sobre la realidad, pues "sólo la
realidad puede engendrar la realidad". En estrecha conexión con esto,
acentúa el autor la diferencia entre conceptos e ideas. Los primeros tienen su
origen en el conocimiento tanto empírico como metafísico de la realidad
comprobable, mientras las ideas sólo y únicamente si con-seguimos realizarlas
en el mundo empírico. Además hay que tener presente la existencia de juicios
cognitivos y recognitivos. Estos últimos nos posibilitan conocer casos
particulares de la realidad. Los conocimientos cognitivos hacen posible nuevas
y originarias cogniciones y conceptos que superan y sobrepasan conocimientos
recognitivos. El ejemplo más evidente, que nos ofrece en tal sentido nuestro
autor, es el conocimiento científico, que la masa-energía en el cosmos
constituye una constante invariable, lo que supera toda nuestra experiencia
sensorial. "Kant ha explicado erróneamente en su totalidad el comienzo, el
rol cognocitivo y el valor de los conocimientos sístoles, dándoles,
lógicamente, el nombre de conocimientos sístoles "a priori".
Los empiristas y
los positivistas lógicos adoptan esta teoría de Kant sólo parcialmente,
reconociendo el valor de los sístoles hasta el punto puramente empírico.
Resulta raro que muchos otros pensadores, entre ellos también neoescolásticos,
consideran la teoría de Kant como una conquista definitiva, dando más fe a los
juicios y conocimientos sístoles de Kant y extendiendo el valor de los mismos,
tratando de escapar del apriorismo kantiano. Según la naturaleza y la lógica de
la posición de Kant, este proceder no es lógicamente permitido, pues el mismo
evidencia sus puntos débiles cuando Kant queda más consecuente, si bien crece
cada vez más la duda sobre el valor de su teoría.
No nos resulta
claro —y eso puede ser nuestra insuficiencia personal— porque el autor niega la
posibilidad de comprobar el valor real de la metafísica que hemos construido
legítimamente con los juicios sintético y sístoles. El idealismo crítico queda
sólo como una posibilidad hueca y no hay salida de la misma. ¿Pero cómo es esta
metafísica que sale del realismo empírico y no es susceptible a una
comprobación real? Unicamente el tránsito mediante premisas de valor real es
posible en el campo de sístoles y de la metafísica, mientras toda la
comprobación ulterior quedarla imposible. ¿Si el tránsito es posible, debe
resultar posible también toda la deducción y comprobación ulterior?
Resultaría
interminable esta reseña, si quisiéramos sólo tocar todos los problemas y las
tesis del autor. Nos detendremos únicamente en los puntos más salientes, aunque
sea en forma sucinta.
La filosofía como ciencia tiene sentido, si es fundada, edificada sobre percepción sensorial y la intuición intelectual, capaz de dar sentido a la existencia humana. Mas, la metafisica debe conferir a la vida un sentido superior. "En la metafísica - Tü eres para mi persona humana, digna de todo respeto; pero en la física, Tú eres para mi sólo un animal de un grado superior: en la balanza de los valores del universo no hay definitivamente mayores diferencias entre el hombre y el animal"(...) "Pero la física, cuando la separamos en el pensamiento y de acuerdo con eso en la vida de metafísica, veo únicamente cuentas egoistas, una competencia de autoexhibición, la negación celosa, una actividad antisocial, la explotación del hombre por el hombre, o, incluso, de un pueblo por otro. Así ocurre que una y la misma sociedad ensalza servilmente hombres de poder al altar de los ídolos monstruosos, mientras a los hombres sin poder pisotea como a hormigas y gusanos, sin sentimiento alguno de humanidad y de responsabilidad.
La filosofía, la
verdadera metafísica, está llamada a buscar y encontrar un Ser infinitamente
perfecto, un Ser a se, que puede crear a otros seres en su ser y
existir. Nuestro autor rechaza los argumentos de esta clase, formados por los
filósofos y Ias filosofias después de Aristóteles, incluso los de los
pensadores cristianos. Guarda y sostiene únicamente el argumento que se deduce
de la finitud del mundo.
El concepto de
Dios, creador del universo en su ser, lo deducimos de la unión de dos juicios
sístoles: 1) Cada ente actúa con la totalidad de su ser, si opera libremente, y
2) Cada serie de los seres finitos actuantes entre si es finita. Aqui Vasilj
invoca a Santo Tomás de Aquino, quien afirma en su "Summa contra
Gentiles" que la finitud del universo seria el mejor argumento en pro de
la existencia de Dios. El universo como cadena de seres finitos debe ser
también finito. Ningún ser finito puede crear a otro ente en su ser. Sólo un
Ser a se puede hacerlo. Los entes actúan en la libertad siempre con todo su
ser. Dios los creo en su ser, esencia y la existencia y ellos actúan por si
solos. Por eso Dios no es responsable por falta y pecados que suceden en la
naturaleza y en la sociedad del hombre. Las faltas y los pecados serían el
fruto del contacto entre los seres creados que no corresponde. Así elimina a la
tradición judía y a toda clase de supersticiones posteriores.
Aquí el autor
deja insatisfecho al que escribe estas líneas. ¿Para qué crear al mundo y
especialmente al hombre con el fin tan trágico si el Creador es un ser
infinitamente perfecto? Añadir algo más en general es absurdo; agregar algo
imperfecto, todavía más absurdo. Navegando por el mar finito para conseguir al
Infinito —lo que es objetivo del hombre— ¿a qué sirve, si millones no lo
entienden y otros tantos y más millones se pierden ahogados?
El autor de ese
modo deja abierto el camino hacia la religión. Es un orden superior,
sobrenatural, al que la religión eleva al hombre. Se trata de un orden
especificamente diferente del natural. Allí el hombre encuentra su destino
sobrenatural y definitivo. En la religión es Dios quien se revela e indica el
camino que se debe seguir. Pero el autor no confunde al permitir una especie
del pluralismo de Revelación. El budismo, el judaismo, el cristianismo y el
islamismo. Pero como si se sintiera débil a causa de esta posición, el autor
hace grandes esfuerzos a posteriori para comprobar la autenticidad de una sola
Revelación, tomando en consideración Ias personalidades de los fundadores de
dichas religiones y el valor de sus obras. El autor queda con Cristo, aduciendo
sus virtudes divinas e inalcanzables para los demás.
Para terminar: K.
Vasilj es un hombre de altas dotes filosóficas. El espera a un crítico, quien
se dedicara a su entero y enorme Opus con criterio de especialista en las
disciplinas filosófica y teológica. Nuestras observaciones son de un lego y
aficionado, quien necesitaría años de estudio para adentrarse adecuadamente en
el pensamiento de este nuestro eximio pensador, profundo, original y muy
productivo. Nosotros carecemos de elementos necesarios para tal fin, aunque el
sentido de vida —vemos que no se encuentra en el mundo material— es nuestro
único anhelo auténtico en esta vida terrenal tan corta y a menudo tan penosa.
Franjo Nevistić
[1] Raymond
Ruyer: "Elogio de la sociedad de consumo" en la Introducción de la
edición española (EMECE) señala: "La rebelión contra la economía es
antigua como la actividad económica, es decir, antigua como el mundo. La
economia es la dura necesidad. En la primera ocasión posible se ensaya escapar
a esta insufrible presión, volcándose hacia los grandes juegos: la magia, la
mística, la religión, el ascetismo, la droga, el arte, la danza, el teatro, la
política, la aventura o las guerras".
[2] Georges
Hourdin: Los cristianos contra la sociedad de consumo, traducción
española del original francés (EMECE).
[3] Raymond
Ruyer, Op. cit., pág. 29, invoca a Hegel para justificar la economía liberal.
"...el apetito subjetivo se transforma en una contribución a la satisfacción
de las necesidades de los otros... Hay mediación de lo particular por lo
universal, lo cual hace que cada uno, produciendo para si, produce al mismo
tiempo el goce de los demás...".
[4] G.
Hourdin, Op. cit., pág. 23.
[5]
Richard J. Barnet y Ronald E. Muller: "Global Reach. The power of the
Multinational Corporations - Traducción alemana: "Die Kriesen Macher"
(los hacedores de la crisis), 1974, pág. 15.
[6] G.
Hourdin, Op. cit., pág. 24.
[7] Raúl Prebisch: "El capitalismo periférico, crisis y
transformación", México, 1981, pág. 223. Exigencias crecientes de consumo,
inversión privada y gastos del Estado acompañaron este aumento del producto,
sin que en su asignación hubiera un criterio de compatibilidad a tal punto que
tales exigencias han superado el crecimiento del producto, y el exceso se ha
cubierto a expensas del producto del resto del mundo. Esto ha podido lograrse a
cambio de signos monetarios que han propagado internacionalmente la inflación
interna, y a lo cual han venido a añadirse Ias consecuencias de encarecimiento
del petróleo". Ibid., p. 222.
"Este crecimiento de las importaciones por sobre tas exportaciones y
otros re-cursos exteriores, ha sido el factor más importante en el déficit
crónico del balance de pago de los Estados Unidos. Además de ello cabe agregar
Ias inversiones de Ias transnacionales en el exterior, en la medida en que no
fueron cubiertas propias ganancias externas" (pág. 225).
Vale como un
principio general lo que dice Prebisch: "...Las grandes fallas del
desarrollo latinoamericano carecen de solución dentro del sistema
prevaleciente. Hay que transformarlo. Muy serias son Ias contradicciones que
ahí se presentan: prosperidad y, a veces, opulencia, en un extremo; persistente
pobreza en el otro". Después de destacar el optimismo en cuanto al
desarrollo técnico y científico con bienes de consumo sin límite, Prebisch
comenta: "Pero el desarrollo se ha equivocado desde el punto de vista
social y gran parte de esas energías vitales del sistema se malograron para el
bienestar colectivo. Trátase del capitalismo imitativo (parte pequeña de
privilegiados que en el mundo subdesarrollado desea vivir como los del centro
capitalista (N.O.). Se ha desvanecido el mito de que podríamos desarrollarnos a
imagen y semejanza de los centros. Y también el mito de la expansión espontánea
del capitalismo en la órbita planetaria. El capitalismo desarrollado es
esencialmente centrípeto, absorbente y dominante. Se expande para aprovechar la
periferia. Pero no para desarrollarla. Muy seria contradicción en el sistema
mundial" (pág. 14).
[8] G.
Hourdin, Op. cit., p. 95.
[9] G.
Hourdin, Op. cit., p. 148.
* ¿Qué puede esperar el pueblo croata, cuando sus organizaciones en el mundo
libre se presentan pidiendo la protección de los derechos humanos y nacionales
en su patria? Amnesty International ha comprobado que Yugoslavia y en
pro-porción con el número de su población, registra el más alto número de los
presos politicos y de conciencia. Una mentalidad como está descripta más arriba
—en los Estados Unidos y en Gran Bretaña— no puede tener comprensión por los
verdaderos valores humanos. Uno de los managers norteamericanos había
declarado: "¡Ni nación, ni Estado, ni credo alguno religioso, ni
ideología, sino exclusivamente la ganancia!".
Mientras podemos
comprender a un manager, ¿cómo comprender al State Department, que garantiza
créditos e integridad territorial a Yugoslavia, cuyos representantes
diplomáticos, delegaciones ocasionales o el periodismo están mendigando sin
pausa en todos los contactos con el mundo exterior? No se trata tanto de la
explotación de un país subdesarrollado como de una falsa creencia de que la
Yugoslavia comunista es un baluarte contra el bloque comunista con la sede en
Moscú. Sea como fuere, la política de ayuda a un régimen y un Estado comunistas
– totatitarios, es una política equivocada que debemos denunciar y formular
nuestra disconformidad absoluta.
[10] R.
Ruyer, op. cit., pag. 322.
[11] G.
Hourdin, op. cit., pág. 57.
[12] Si lo tuviera no habría podido ser
extendido a otros países.
[13] Quien nunca estuvo en Rusia ni en
China, quien nació y se educó en el centro de Europa Occidental, en la Renania,
en Tréveris, ex Estado (PrIncipado) Pontificio y quien pasó casi toda su vida
en Londres.
[14] No hay que olvidarse que existen
varios "marxismos" y a nosotros aquí nos interesa sólo el marxismo de
Marx.
[15] véase: M. Poradowski, Karl Marx - un
ideólogo de la revolución.
[16] Esta es la tesis principal de la
obra de Françoise Lévy, Karl Marx, histoire d'un bourgeois allemand, Grasset,
Paris, 1978.
[17] Richard
Wurmbrand, Karl Marx et satan, Paris, 1978.
[18] "Die
Oktoberrevolution ist rachtmässig ais die erste Etappe der
Weltrevolution", dice Trotsky, Die permanente Revolution, Fischer
Taschenbuch Verlag, ed. 1973, p. 17.
[19] Es difícil fijar la fecha exacta del
nacimiento del "imperio marxista de fuerza" en China, pues se fue
imponiendo poco a poco, durante varios años de guerra civil, fomentada desde
Moscú; mientras que en Rusia, gracias al apoyo del gobierno alemán, se impuso en
octubre de 1917.
[20] Es el título del libro de Czeslaw
Milosz, Premio Nobel de Literatura.
[21] No se dispone de cifras exactas. El
cómputo exacto de Ias víctimas del terror en el "imperio marxista de
fuerza", ruso y chino, es imposible, pues ni siquiera Ias mismas
autoridades de estos países llevan registros completos al respecto. Sin
embargo, los cálculos de Soizhanitsyn (63-65 millones), y de otros (al menos
70), el se trata de Rusia, y de Jean-François Ravel (125 millones) y de otros
(más de 150 millones), si se trata de China, no son arbitrarios, sino. basados
sobre estudios minuciosos, serios y honestos. En esta breve "nota" no
es posible entrar en detalles, que las personas interesadas pueden encontrar en
tas obras especializadas; la bibliografía al respecto se puede consultar en la
monumental obra de Michel Heller y Aleksander Nekri.ch, L'utopie au pouvoir -
Histoire de l'U.R.S.S. de 1917 à nos jours, París, 1982.
Sin embargo, los cómputos mencionados de 65-70 millones de víctimas y de
125-150 millones, en Rusia y en China, respectivamente, desde el punto de vista
de la demografía, son insuficientes e inaceptables. Según los métodos de la
demografía moderna, Rusia debería tener actualmente (1983) al menos 770
millones de habitantes y, sin embargo, tiene sólo 270. ¿Dónde están los 500
millones que faltan? Pero ¿por qué Rusia debería tener actualmente 770 millones
de habitantes? Muy sencillo. Según el censo de 1897 la población de Rusia fue
de 122.666.500 habitantes y el crecimiento anual de 4,2. El censo de 1900
constata que hay en Rusia 135.600.000 habitantes, es decir, que en sólo 3 años
ta población aumentó de 12.933.500 h. Según el censo de 1912 ya hay en Rusia
171 millones de habitantes, sin embargo, el crecimiento anual baja a 3,1.
Faltan datos exactos respecto al año 1914, pero se puede calcular que la
población en vísperas de la guerra llega a 185 millones y que en enero de 1917,
es decir, en vísperas de la revolución marxista, es al menos de 185.500.000,
pues durante los tres años de guerra el crecimiento vegetativo poco superó las
pérdidas provocadas por la guerra y sus consecuencias. Pues bien, el primer
censo en la Rusia bolchevique, el de 1920, constata sólo 130.500.000, es decir
que faltan 45 millones que son víctimas de la revolución (Ias víctimas de la
guerra fueron descontadas anteriormente). Si Rusia tenía en vísperas de la
revolución probablemente unos 185 millones de habitantes y un crecimiento anual
de 3,1, incluso si se supone que esta tasa después disminuye, llegando a la
actual de 1,5, la población de Rusia debería ser actualmente de al menos 770
millones, y es de 270, es decir, que faltan 500 millones, que son los
resultados de la revolución, del terror, de ejecuciones en masa, de los campos
de concentración, de la espantosa mortandad infantil, de la destrucción de la
familia, etc. Este es el "costo social", el "costo
demográfico", el "costo humano" de la revolución marxista en
Rusia, y en China es proporcionalmente mayor.
[22] Marx tomó esta doctrina de los
blanquistas (en la primera mitad del siglo XIX hay en Francia dos grupos
"blanquistas": uno compuesto por los partidarios de la doctrina
revolucionaria elaborada por los hermanos Augusto y Adolfo Blanqui, y otro por
los partidarios de Louis Blanc; sin embargo, ambos estaban de acuerdo respecto
a la doctrina sobre la "dictadura del proletariado").
[23] Claro está que aquí simplificamos
esta sucesión, pues ni Stalin, ni Kruschev, ni Breznev, ni Andropov, ni
Chernenko llegaron de inmediato a ser los dictadores absolutos, y Stalin se
demoró más que los otros en poder eliminar a sus rivales.
[24] Maurice Thorez fue durante muchos
afies el secretario general del partido comunista de Francia.
[25] Se trata de una serie de artículos
publicados en Rusia, en los primeros dias de abril de 1917. La doctrina de
Lenin sobre el partido único no es original, pues Lenin sólo profundiza y
actualiza lo expuesto por Marx en un "Memorandum de abril de 1850"
sobre el partido del proletariado; en otras palabras, la "tesis de
abril" de Lenin es la actualización de la "tesis de abril" de
Marx.
[26] En Polonia hay cuatro partidos
politicos; sin embargo, en realidad, se trata solamente de las cuatro secciones
del único partido comunista, que a su vez, es solamente la sección polaca del
partido único de la Unión Soviética.
[27] En la Unión Soviética tanto "de
jure" como "de facto" todos son "proletarios", pues no
existe la institución de la propiedad privada y, por ende, no existen los
propietarios.
[28] En la Constitución staliniana está
el famoso artículo 126, sobre la presencia y función de las células (yacheyki)
del partido en todos los organismos sociales.
[29] Algunos países sojuzgados por la
Unión Soviética, como por ejemplo Alemania Oriental o Polonia, oficialmente se
llaman "democracias populares" y con razón, pues en ellas todavía
quedan algunos restos de democracia, debido a que —según la doctrina marxista
sobre la revolución comunista como proceso que lleva al comunismo— este proceso
pasa por las cuatro etapas, a saber: burguesa, democrática, socialista y
proletaria. Los países "satélites" de la Unión Soviética, según esta
doctrina oticíal, se encuentran sólo en la etapa
"democrático-socialista", mientras que Ia Unión Soviética ya alcanzó
la etapa "socialista", dejando atrás las etapas "burguesa"
y "democrática" (las cuales correspondían al período del gobierno de
Kerensky, entre febrero y octubre de 1917).
[30] Ozanam dice: "La propiedad
privada es el fruto de la libertad y su garantia". Citado por Gustavo
Corçâo, Ozanam, PRESENCIA.
[31] Completamente otro es el caso de la
vida "comunista" en los conventos y agrupaciones voluntarias, que
funcionan al margen de la sociedad y que son formadas con fines espirituales y
de culto.
[32] Tanto Lenin como Trotsky defienden
el terror contra Ias opiniones de los marxistas-democráticos del grupo de
Kautzky; ambos tildan a Kautzky de "renegado" por haber insistido en
que el terror no es un elemento esencial de la revolución marxista. Los
marxólogos de hoy dan razón a Lenin y a Trotsky contra Kautzky, pues descubren
en los escritos de Marx que éste consideraba la violencia y el terror como
elementos esenciales de la "revolución permanente".
[33] Véase: Michel
Heller y Aleksander Nekrich, L'utopie au pouvoir, Paris, 1982, p. 35, 44.
[34] Fouquier-Tinville fue el dirigente
de los organismos de terror durante la Revolución Francesa.
[35] Discurso en Londres en 1983.
[36] Véase:
"N'ayez pas peur" - André Frossard dialogue avec Jean Paul Il, Robert
Laffont, París, 1982, p. 147.
[37] Fueron
una especie de policía militar en Croacia-Eslavonia (precisamente en los
Confines) vestidos a la usanza turca.
[38] Se
refiere al Congreso paneslavo del año 1848 en Praga.
[39] Roman
Rosdolsky: "Zur nationalen Frage" - Acerca de la cuestión nacional,
Berlín 1878.
[40]
Reichstag - Asamblea de Francfort de 1848.
[41] Extraido del libro: “JuanBenigar, el
sabio que murió sentado”, de Victorio Suicic (Edición de los Talleres Gráficos
Besteiro, Buenos Aires, 1970. Páginas 96 y 97).
[42] El padre de Juan Benigar, que
también se llamaba Juan, era una persona muy culta y trabajaba como profesor de
matemática y física en un colegio de Zagreb. Los padres de Juan Benigar
tuvieron diez hijos. El hermano menor de Juan Benigar, Reverendo Padre Aleksa
Benigar, OFM., franciscano, que también nació en Zagreb, todavía vive en Roma
(el 28 de enero del corriente año cumplió 91 años de edad). Escribió varios
libros, entre ellos, en idioma croata, la biografía del Cardenal croata
Aloysius Stepinac, editado en Roma, en el año 1974 (Ediciones ZIRAL).
[43] La primera esposa de Juan Benigar,
Eufemia Barraza, cuyo nombre indígena era Sheypukiñ, era una lejana
descendiente del famoso cacique Catriel.
[44] René Laurentin - Luis
Rupčić: "Aparece la Virgen en Medjugorje? - Un mensaje urgente
dado en un país marxista", 192 pp., ed. O.E.LL.; precio 76 francos.
[45] Svetozar Kraljević: Las
apariciones de Medjugorje - Descripción - Testimonios, ed. Fayard, 127 pp.,
París, precio 49 francos.
[46] Vladimir Ciprin es una de Ias más
destacadas figuras del quehacer cultural croata en nuestro país. Acaba de
cumplir ochenta años y hace más de treinta que vivo en la Argentina.
Actualmente colabora con varias publicaciones croatas de nuestro país, Estados
Unidos y Europa. Escribió ensayos literarios y musicales. Publicó notas en la
revista "Studia Croatica" en castellano. Escribió un capítulo
dedicado a la música croata en el compendio "Croacia y su destino".