Zeljko Ducmelic: Cuatro meses en el paraíso (Ediciones L. H., Buenos Aires, 1971).

"Das Jahr '45" es el título del libro publicado en Alemania en 1970. En él una treintena de escritores de importancia sobresaliente (Thomas Mann, H. Boll, E. Funger) exponen sus memorias y recuerdos de aquellos días de peligro y de horror vividos en el curso de la última gran guerra e inmediatamente después de su terminación.

Este libro fue traducido al castellano con el título "1945, el año de la catástrofe" (Barral Editores S. A., Barcelona 1971). El prólogo de este libro tan interesante y conmovedor hace constar que el año 1945 es de una importancia y significado muy grandes para el mundo entero y la civilización en general; un año de los más importantes de nuestro siglo.

Este año es -acota el prólogo- el fin de aquella angustia agobiante, pesadilla infernal que se había precipitado sobre casi todos los pueblos de Europa, amenazándolos con la destrucción y el aniquilamiento. En la historia de la humanidad, a su vez, aquel año marca el fin de una nueva caída del hombre y de muchos valores de carácter moral, imposibles de revivir. Marca el fin de un capítulo y el comienzo de otro que promete mucho, a pesar de que hasta ahora nada hizo: el fin del siglo XX y el comienzo del XXI.

Estas son las ideas aproximativas del prólogo español Sin embargo, la afirmación del mencionado prólogo en cuanto al fin de aquellos días de matanzas generales y destrucciones que hubieran visto su fin en 1945, por desgracia, tiene un valor muy relativo y sólo parcialmente exacto.

Un vistazo, muy breve, de lo que sucedió después de 1945 hasta nuestros días, nos obliga a una conclusión harto diferente: el año 1945, para muchos, significa tanto el fin como el comienzo de nuevos horrores y matanzas. En efecto, Hans Rauschning, en el epílogo del libro que mencionamos, se queja de que el año 1945 fue prontamente olvidado y sólo un detalle del artículo de H. von Doderer resulta verdaderamente horroroso. En el libro "De los diarios, 1945" von Doderer nos cuenta cómo la mayoría de las mujeres de Viena vivían diariamente con la cantidad necesaria de veronal justamente en ese año 1945, año del pretendido fin de los horrores y los padecimientos de guerra, por el miedo a los rusos y sus costumbres poco caballerescas para con las mujeres,.

Por parte croata, una contribución a la serie de estas crónicas tristes postbélicas, es el libro de Zeljko Ducmelic: Cuatro meses en el paraíso.

Este libro, de carácter netamente autobiográfico, es sólo una parte de la vida tan tormentosa de su autor, quizás la parte más decisiva y fatal. Terminada la lectura del libro, recomendamos a los lectores reflexionar por un momento sobre su contenido, sobre lo que acaban de leer. Si uno desea hablar de los días decisivos en la vida de un hombre o un pueblo, es menester hablar franca y claramente; resulta indispensable exponer el problema en forma simple y verídica como es simple y verídica la verdad que deseamos señalar. En éste nuestro caso croata, de todo lo que nos dice Ducmelic y de lo que ha vivido y sufrido durante cuatro meses en el nuevo paraíso yugoeslavo, la verdad se podría expresar en los términos siguientes: "¿Qué significado tiene el año 1945 en la vida de Z. Ducmelic y de su pueblo? ¿En nombre de qué derecho, ideas o ideales debería optar él por ese año 1945 y por todo lo que significa, aceptando todo lo que trajo esa fecha, si la misma para él y para su pueblo, como también para muchos otros pueblos, significa única y exclusivamente la lucha y la huída ante una catástrofe y muerte evidentes? ¿Significa el año 1945, en efecto, para cada uno de nosotros, el comienzo de una vida nueva y mejor?"

Estos y similares problemas están planteados en el libro casi en cada página en forma directa o indirecta por nuestro autor, narrando acontecimientos de su vida joven y penosa de aquellos días. La serie de sus preguntas que son casi acontecimientos acabados, significa una grave y pública acusación a sus perseguidores, los opresores de su pueblo. Esta acusación surge del sentimiento de que todo lo que pasó y sufrió es injusto, sin justificación. Adversario, y estando del otro lado de las barricadas del opresor de su pueblo, Ducmelic comunica sus sentimientos y sus ideas cálida, sincera y simplemente. De su libro fluye un deseo incontenible por una vida mejor y por un orden del mundo más bello, como también por un mejor lugar, justo y correspondiente de su propio pueblo. Sus sentimientos jamás son comunicados llorando o maldiciendo o con desesperación. El autor los acompaña con una fe inconmovible en la posibilidad de algo mejor, más justo, más luminoso. Este libro de Ducmelic es un documento de su tiempo. Lo vivido y narrado coincide perfectamente con el acontecer político en Croacia. El autor contribuye así a la resistencia y a la lucha del pueblo croata en el conflicto con las fuerzas que se le oponen y le impiden vivir y desarrollarse en la convivencia con otros pueblos en libertad y de acuerdo con su peculiaridad nacional e histórica.

M. Rakovac