La represión contra las
actividades juzgadas "nacionalistas" continúan, con acusaciones en
numerosas repúblicas por delitos de opinión. En Zagreb, a fores de 1980, Franjo
Tudjman es nuevamente llevado a prisión por una entrevista dada a un periodista
alemán en la cual entrega estadísticas que demuestran que los serbios tienen
una excesiva representación en el Partido y el ejército en Croacia. Junto a
Tudjman, numerosos otros disidentes croatas serán también condenados. La lucha
entre centralistas (serbios) y descentralización del sistema (pueblos no
serbios) estaba francamente declarada.
En 1983, en Sarajevo, es
juzgado un grupo de intelectuales musulmanes de Bosnia, acusados de
"asociación en vista de una actividad hostil". Entre ellos estaba el
abogado Alija Izetbegović, a quien acusan de ser el autor de una
"declaración islámica". A algunos de los que acompanan a
Izetbegović, se les hace el cargo de haber efectuado viajes a Irán en
donde ya está en el poder Khomeyni y su régimen integrista. Todos serán
castigados con pesadas condenas. También en el campo serbio aplicarán castigo a
Vojislav Šešelj acusado de nacionalista; personaje que posteriormente logrará
obtener una dudosa fama en la agresión de los serbios a Bosnia, por ser el jefe
de los chetniks que cometerán masacres y atrocidades contra los musulmanes. En 1990,
Tudjman será elegido presidente de Croacia y Alija Izetbegović presidente
de Bosnia-Hercegovina. El fascista Šešelj será cobijado nada menos que por
Milosević, el presidente socialista serbio, quien lo nombrará ministro de
su gobierno.
________________
Gaspar Glavic: Mis lecturas sobre los 2000 años de
la historia de Croacia
Studia Croatica - electronic edition
____________________________________________________________