EL REINO DE ALEJANDRO I
(1921-1934)
Recordemos que desde fines de
la guerra, Alejandro I Karageorgevich ejerce la regencia en lugar de su padre
Pedro I, enfermo. Cuando este fallece en 1921, Alejandro se hace cargo del
trono. De 1921 a 1929, Yugoslavia conocerá un régimen parlamentario, y los
croatas, fieles a su tradición, practicarán una oposición legal. El electorado
croata dará casi en forma unánime sus votos al Partido republicano campesino
croata de Esteban Radić, quien termina por aceptar de trabajar con la
monarquía: la conciliación era una costumbre en esta familia política. El
Partido incluso suprime la palabra "republicano" en su título y
Radić aceptará un ministerio por un corto período, de 1925 a 1927. Su
partido se había ganado la confianza del campesinado croata gracias a una
cadena de cooperativas y asociaciones campesinas. Los otros pueblos que habían
pertenecido al Imperio Austríaco como los eslovenos y musulmanes de Bosnia,
aceptarán mejor el régimen yugoslavo. Pero la situación es grave al sur del
país, en las provincias que vivieron bajo la influencia otomana y que habían
sido conquistadas por Serbia en 1912. En el Kosovo, a los albaneses no se les
reconocía ningún derecho. Sus rebeliones son sofocadas a golpes de fusil, y
destrucciones de sus pueblos y aldeas.
En cuanto a los macedonios,
ellos ni siquiera son reconocidos como pueblo por la monarquía de Alejandro I y
son considerados como serbios. Los combatientes del VMRO (Vnatresna
Makedonska Revolucionarna Organizacija, (Organización revolucionaria interior
macedónica), un movimiento de resistencia que nació luchando contra los turcos
y que continúa su lucha en contra de los serbios, tienen su refugio en
Bulgaria, desde donde se organizan y lanzan sus ataques en Macedonia en contra
las fuerzas monárquicas de Belgrado. Una represión feroz le obligará a
renunciar a operar en territorio yugoslavo y reducirán su acción a actos
terroristas incluso dentro de Bulgaria.
A recordar también la
oposición del Partido comunista quien desde la formación misma de Yugoslavia,
denuncia este Estado como una "prisión de los pueblos"
dominada por la "burguesía gran-serbia". Será puesto fuera de la ley
en 1921, y se mantendrá muy activo hasta el comienzo de la Segunda Guerra
mundial. A pesar del terror policial, la situación política y social se
mantiene preocupante, viviendo al límite de la revuelta popular en contra del
régimen. Pero para la monarquía, "la bestia negra" es Esteban
Radić. El rey Alejandro I llega a la misma conclusión que sus predecesores
Obrenović o Karageorgevich: la experiencia parlamentaria y democrática en
Serbia es impracticable. El camino para democratizar verdaderamente la vida
política era el de ir a la reforma de la Constitución de Vidovdan, pero la
clase política y comercial la "charchia belgradense" junto a la
Iglesia ortodoxa se oponen a todo intento de reforma, ante lo cual, Alejandro I
elige el de imponer. un régimen aún más despótico y dictatorial, como el que
habían impuesto anteriormente sus predecesores serbios y bizantinos. Su propio
temperamento despótico, la educación rusa y la "charchia"
militar-política-financiera de Belgrado, más la influencia siempre presente de
la Iglesia ortodoxa serbia, lo empujan a la toma del poder absoluto. Nombra
como jefe del gobierno al general Simović, antiguo militante de la
"Mano negra" y el asesino de Alejandro Obrenović en 1903. Siendo
los croatas los principales obstáculos para el gobierno dictatorial de
Alejandro 1 y sobre todo su líder el representante del Partido campesino croata
Esteban Radić, el rey serbio, previa consulta con la "charchia",
decide eliminarlo "al estilo serbio".
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Gaspar Glavic: Mis lecturas sobre los 2000 años de
la historia de Croacia
Studia Croatica - electronic edition
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